EL REINO TRIUNFANTE DE CRISTO

REGISTRO DOI: 10.5281/zenodo.12741277

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LUIS MANUEL LEICEA YINS

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El Reino de Dios no vendrá con advertencia, 
 ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el Reino de Dios está entre vosotros. 
Jesucristo
(San Lucas 17:20-21)

PRÓLOGO

Antes de comenzar este trabajo es válido dar a conocer al autor del artículo El Reino Triunfante de Cristo, a través del cual recibí la guía y el interés para escribir la presente monografía; el Reverendo Herbert McClellan Riggle (Figura 1) Se da a conocer su foto, un titularde su muerte que apareció en el diario El Centinela de Rochester el 7 de octubre de 1952, y los títulos de algunas de sus publicaciones, sobre todo en la revista Gospel Trumpet, de la cual fue Presidente por 23 años.

Figura 1. Rev. Herbert McClellan Riggle (Iglesia de Dios, Indiana
NACIMIENTO: 18 Febrero 1872
Cochrans Mills, Armstrong County, Pennsylvania, USA
DEFUNCIÓN: 7 Octubre 1952 (de 80 años de edad)
Indiana, USA
SEPULTURA: Akron IOOF Cemetery
Akron, Fulton County, Indiana, EE. UU.

Noticia del diario Centinela de Rochester – 7 de octubre de 1952

El Rev. H. M. RIGGLE, 416 W. 5th Street, de Anderson, Indiana, falleció hoy a las 4 a.m. en el Hogar de Ancianos No. 1 de Rochester, donde se encontraba internado desde el domingo. El reverendo Riggle sufrió un ataque de parálisis el viernes por la noche y no pudo recuperarse. Llevaba más de seis meses enfermo.

Se mudó aquí hace 14 años y sirvió como Pastor de la Iglesia de Dios durante dos años.

El Sr. Riggle luego aceptó una llamada de una iglesia de Anderson y más tarde fue Pastor de una iglesia de Defiance, Ohio. Regresó a Rochester hace seis años.

Durante 23 años fue presidente de Gospel Trumpet[1], una revista cristiana publicada en Anderson. Él y su esposa también sirvieron en los campos misioneros extranjeros durante varios años.

El reverendo Riggle nació el 18 de febrero de 1872 en Mateer, Pensilvania, hijo de George y Mary (ASHBAUGH) RIGGLE. Estaba casado con Minnie M. SHELLHAMER, el 12 de enero de 1893. El Rev. Riggle era miembro de la Iglesia de Dios de Rochester.

Sus tres hijas, Sra. M. R. BALLENGER, Rochester; Sra. Charles WHITE, Akron y Sra. George PONCIOUS, Huntington; dos hijos, Herbert A. [RIGGLE], Huntington y George W. RIGGLE, Jacksonville, Florida; diecinueve nietos y diecinueve bisnietos. Una hija, Naomi [RIGGLE] que le precedió en muerte.

Los servicios funerarios a cargo del Dr. A. T. ROWE de Anderson se realizaron a las 2:30 p.m. del jueves en la Iglesia de Dios de Akron. El entierro será en Akron I.O.O.F. cementerio. El cuerpo descansa en la funeraria Zimmerman Brothers adonde los amigos pueden llamar.

Algunas publicaciones de Riggle

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: La Iglesia cristiana, su ascenso y progreso, (Anderson, Ind., Gospel Trumpet Company, [1912]) (imágenes de la página en HathiTrust)

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: La Segunda Venida de Cristo y lo que seguirá, (Anderson, Ind., Gospel Trumpet Company, [c1918]) (imágenes de la página en HathiTrust)

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: La discusión Ebeling-Riggle: sobre el reino de Dios, la salvación universal de la familia humana, la Iglesia de Dios y las prácticas y enseñanzas de la Iglesia Reorganizada de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días / ([Blystone, Pa.: 1901?]), también por F. J. Ebeling (imágenes de la página en HathiTrust)

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: El hombre; su presente y futuro… (Anderson, Ind., Gospel Trumpet Co., [pref. 1916]) (Imágenes de página en HathiTrust)

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: El hombre, su presente y futuro / (Anderson, Ind.: Gospel Trumpet Co., c1904) (imágenes de la página en HathiTrust)

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: Evangelización pionera: Experiencias y observaciones en casa y en el extranjero / (Anderson, Ind.: Gospel Trumpet Co., c1924) (imágenes de la página en HathiTrust)

• Riggle, H. M. (Herbert McClellan), 1872-: El catolicismo romano a la luz de sus propias Escrituras y autoridades, por H. M. Riggle. (Anderson, Indiana, compañía de trompetas Gospel, [c1917]) (Imágenes de la página en HathiTrust)

INTRODUCCIÓN

El presente artículo pretende ser una actualización de una vieja monografía escrita por el autor Rev. H.M. Riggle acerca de la realidad del Reino Triunfante de Cristo entre nosotros (Figura 2) Con la luz del Señor que ese siervo tenía hasta ese entonces, Riggle describió oportuna y claramente el Reino de Dios como algo que los profetas mesiánicos predijeron, y que fue cumplido, bajo el Evangelio de paz en el Señor Jesucristo, por lo que explicó que Cristo es Rey ahora, y no debemos esperar un reino milenario como muchos maestros de doctrina predican. Riggle explicó además la relación tipológica del Rey David con Jesús, definiendo el reinado del primero como algo temporal y limitado que feneció cuando el hijo de Isaí murió, pero el Reinado universal de Jesucristo lo describió, de acuerdo a la Palabra de Dios, como algo universal y eterno (Isaías 9:6-7) Se trata de un Reinado Redentor de la raza humana de acuerdo al propósito divino de reunir todas las cosas en Cristo en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, tanto en los cielos como en la tierra (Efesios 1:10), así como un reinado que en su primera etapa se verifica aquí entre sus santos, los llamados a salir, la Iglesia, pero que se extiende más allá, en la eternidad, para su segunda etapa, como bien el Señor le dijo a Pilato acerca de que su señorío no es de aquí, de la tierra, sino que se remite más allá , en los cielos (Juan 18:36-37)

Figura 2. Carátula del viejo folleto El Reino Triunfante de Cristo de H.M. Riggle

En la Dedicatoria hice la salvedad de que el presente trabajo es un atrevimiento de mi parte, porque aspiro a actualizar el estudio de Riggle, ya que el tiempo ha pasado y nuevas verdades y situaciones están siendo reveladas y vividas. La Iglesia del tiempo de Riggle tenía sus retos en su tiempo, más la Iglesia de hoy tiene también sus propios retos; el diablo está cada día más cerca de su muerte eterna y arrecia su furia contra la Iglesia, el mundo del error ha crecido grandemente en nuevas formas de paganismo y evangelio light[2], las herejías se han multiplicado y el pecado en diversas formas se ha recrudecido, lo que apunta a que la Segunda Venida de Cristo cada vez está más cerca. Profecías que no podían entenderse a plenitud en el tiempo pasado, incluso antes del Gran Avivamiento de los últimos años del siglo XIX, se han esclarecido más. Riggle vivió (1872-1952) la mayoría de sus años (58) dentro de la etapa de la Iglesia de Filadelfia (1880-1930, Apocalipsis 3:7-13), y unos años (22) de la etapa de la Iglesia de Laodicea (1930-Segunda Venida de Cristo), pero a medida que se acerca el Advenimiento de Cristo aumenta el pecado y el error y la característica de la Iglesia de este último tiempo es de tibieza espiritual (Apocalipsis 3:14-22), lo que no quiere decir que tengamos que ser tibios forzosamente, pero  Cristo describe las características de este tiempo para avisarnos de ese gran peligro. Además, otros peligros más agudos y grandes acechan a la Iglesia de hoy, como por ejemplo, el peligroso Octavo enemigo que cada vez se vislumbra más, y que para él, el Israel de Dios (Gálatas 6:16) debe estar preparado.

El artículo consta de siete capítulos siguiendo incluso la estructura temática que Riggle describió, pero, repito, se trata del aporte de más datos, más citas bíblicas, y más epígrafes, incluso se añaden figuras que hacen más potable la lectura. Espero poder ayudar a la Iglesia de Dios en Cuba en la comprensión de este importante tema, y si logro este objetivo me sentiré bien y gozoso al poder llegar a cada lector con la verdad del Reino de Cristo.

Estoy en deuda con todos los que me ayudaron con sus escritos, libros y publicaciones, y especialmente con H.M. Riggle, que con su artículo, nos enseñó la gran verdad del Reino Triunfante de Cristo, monografía que estudiamos muchos de los Pastores y Ministros de la Iglesia de Dios en Cuba y por medio de él pudimos conocer acerca de la verdad de Dios en este sentido.

Me pongo entonces en las manos del Altísimo para que me ayude a desarrollar el tema, tener fe en terminarlo con éxito, y lograr el beneficio de la Iglesia en Cuba.

EL ESCRITOR

DESARROLLO

CAPÍTULO 1. EL REINO DE CRISTO PROFETIZADO

En este Capítulo 1 nos adentramos primeramente en el tema de la divinidad del Señor Jesucristo a fin de demostrar que al hablar del Reino de Dios estamos haciendo una referencia fuerte al Reino del Señor Jesucristo por cuanto Él es Dios, ocupando la Segunda Persona de la Trinidad (una ilustración sencilla se muestra en la Figura 3), la cual es Dios en tres personas, o sea un solo Dios, pero en tres personas diferentes en su gran obra de la salvación del hombre, pero iguales en contenido. El Padre proveyó la salvación, El Hijo es el Mediador de ella y el Espíritu Santo es su Sostenedor (1 Juan 5:7) También se estudian algunas de las profecías que apuntaban a ese reinado, y como esas predicciones fueron cumplidas en la dispensación del Evangelio de paz.

Figura 3. Ilustración de la Bendita Trinidad

1.1. La Divinidad de Cristo

La escritura de Juan 1:1-13 es una de las muchas que reportan con claridad meridiana la divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, ya que recrean al Señor como Creador, Divino y Salvador. Esta cita es considerada como un himno a la divinidad de Jesucristo.

Observaciones introductorias

La cuestión del origen de la vida ha fascinado a personas de todos los ámbitos.  Aunque muchas teorías se han inventado para explicar el mundo lejos de la historia del Génesis 1 y 2, aún resuenan en los confines de la eternidad que en el principio creó Dios los cielos y la tierra (Génesis 1:1) y nadie lo ha podido desmentir.

El testimonio del resto de las Escrituras, especialmente del Nuevo Testamento (NT) nos habla de la veracidad de la Creación de Dios.

• San Lucas, presenta una genealogía de Jesús que sigue el relato del Génesis hasta llegar a Adán y Dios: (Lucas 3: 23-38)
• Pablo señala a Adán para explicar la importancia de la salvación en Jesús: (Romanos 5:14, 1 Corintios 15:22, y 1 Timoteo 2:13)
• Jesús mismo menciona a Abel como el primer mártir (Mateo 23:35)
• Hebreos 11:3-34 comienza con la historia de la creación y luego enumera una multitud de héroes del Antiguo Testamento asumiendo que todas esas historias son verdaderas.
• Las referencias podrían multiplicarse (Mateo 13:35; 19:4-5; 25:34, Marcos 2:27; 10:6,7-8; 13:19; 16:15, Lucas 11:50; Juan 17:24 , Hechos 4:24; 10:12; 11:6; 14:15; 17:24,26; Rom 1:20,23,25-27; 4:17; 5:12,17-19, 8:19-22,39; 11:36; 1 Corintios 6:16; 8:6; 11:8-9; 15:45, 2 Corintios 4:6; 5:17; 11:3; Efesios 1:4, 3:9, 5:31, para nombrar solo unos pocos textos).  Objetar la creación significa no sólo objetar Génesis 1 y 2, sino la inspiración y la exactitud de toda la Biblia, algo que aún en este siglo XXI, repetimos, nadie ha podido desmentir fehacientemente.  Es a la luz de lo anterior que se puede entender mejor Juan 1:1-13.

Son siete los elementos que vinculan la verdad acerca de Cristo como Dios, descrita por Juan en Juan 1:1-13 con la creación narrada en Génesis 1 y 2.

1. Juan 1:1 comienza con las mismas palabras de Génesis 1:1: “En el principio”, lo que da a entender que Juan quiere llamar la atención del lector a Génesis 1.  Jesús estaba allí antes que todas las cosas ¡Gloria a Dios!

2. En Génesis 1:1 Dios es el centro de la atención: “En el principio creó Dios…”  Así también en Juan 1:1: “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios” La diferencia es que mientras que Génesis presenta la persona de Dios de forma resumida como una unidad, Juan desarrolla este concepto para explicar que Dios está compuesto de varias personas (menciona aquí dos de las tres existentes, el Padre que aquí se llama “Dios “y el Hijo, Jesús, el Logos[3], que también es Dios.

3. El sustantivo logos o Palabra, usado aquí como un título para Jesús, también se origina en la historia de la Creación.  El verbo griego afín, lego, que es “hablar“, del cual deriva el sustantivo logos, aparece 11 veces en Génesis 1 (Génesis 1:3,6,9,11,14,20,22,24,26,28,29) y siempre en relación con actos creativos de Dios.  Del mismo modo, logos se utiliza en otros lugares en referencia a la creación: Ejemplo: Salmo 33:6.  Vinculando a Jesús como el Logos de Dios que trajo todo a la existencia, Juan hace de Jesús el agente que actúa en la obra de la Creación. Jesús es Creador.

Salmo 33:6 Por la palabra (Logos) de Jehová fueron hechos los cielos,
Y todo el ejército de ellos por el aliento de su boca.

4. En Juan 1:3 el evangelista usa tres veces las formas del verbo “hacer” (Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho) Este verbo es el mismo que se utiliza profusamente en Génesis 1 (23 veces) con relación a la obra creadora de Dios.  El hecho de que Juan aclara que “todas las cosas” han sido hechas por Jesús, aclara muy enfáticamente el origen de la vida por la palabra de Dios, Jesús. 

5. Ya en Juan 1:4 Juan nos aclara que en Cristo estaba la vida y la vida era la luz de los hombres.  El Padre sopló en las narices de Adán el “aliento de vida” (Génesis 2:7) y este fue un “ser vivo”. Adán no posee la vida por su propia voluntad, sino que la recibió de Dios.  Cuando la mujer fue creada a partir de la costilla de Adán, éste la llamó “Eva” (“vida”) porque “ella era la madre de todos los vivientes” (Génesis 3:20), así que todos los seres humanos deben su vida a Eva, ya que ella es la madre de todos, y ella a su vez fue creada del costado de Adán.  Adán, a su vez, recibió la vida de Dios.  En ese sentido, la vida de todos los seres humanos proviene de Dios, el Creador de la vida.  Por el contrario, Jesús tiene vida en sí mismo, su vida no ha sido creada ni tomada de nadie; es esa vida la que fue compartida con Adán y con todo el orden creado ¡Gloria a Dios!

6. Juan declara que Jesús era “la luz de los hombres” y que “la luz brilla en las tinieblas” (Juan 1:4-5), lo que de nuevo nos lleva al relato de la creación de Génesis ya que la luz fue lo primero que Dios creó y es el elemento que disipa la oscuridad al comenzar el proceso de la creación (Génesis 1:3-4, 3 Y dijo Dios: Sea la luz; y fue la luz, 4 Y vio Dios que la luz era buena; y separó Dios la luz de las tinieblas…; o sea de la oscuridad a la luz, del caos al orden.  Juan toma este motivo temático y le da una dimensión espiritual, en el sentido de que el mundo sin Dios y sumido en el pecado, es oscuro, pero la venida de Jesús dispersó la oscuridad del pecado, y trajo orden y belleza espiritual al alma humana.  Así como Jesús produjo la luz en la creación para extinguir la oscuridad, también trajo la vida espiritual para acabar con la oscuridad espiritual del pecado (Juan 1:29) La obra de la redención, por lo tanto, es una bendita réplica de la obra de la creación.

7. Juan hace una última referencia a la Creación en el concepto de filiación que él construye.  Adán era “hijo de Dios” en virtud de la creación (Lucas 3:38) Aquellos que creen en Jesús son hijos de Dios (Juan 1:12-13) Las tres palabras, sangre, carne, y hombre, aparecen en el relato del Génesis.  La sangre es un símbolo del origen humano en Dios (Génesis 9:9-10) La carne apunta a la creación de Adán y Eva (Génesis 2:21-23) y, lo que es más importante, alude al plan divino del matrimonio y la procreación instituido en el Edén, y que hoy el hombre quiere desvirtuar, (Génesis 2:24) “El hombre”, a su vez, señala de nuevo a Adán como el padre de todos los seres humanos, e incluso la fuente de la que Eva fue creada. Juan está exponiendo aquí la experiencia del nuevo nacimiento como una repetición del acto de la creación, pero en un sentido espiritual, y tiene su origen en Dios.  Así como los humanos no podrían crearse a sí mismos, tampoco los pecadores pueden regenerarse a sí mismos sin la intervención de Dios (Ver Juan 3:3-5) 

Resumen

Es entonces evidente que Juan utiliza magistralmente un lenguaje relacionado con la Creación para definir la divinidad de Jesús.  Dios creó todo por medio de Jesús, el Logos, que es igual al Padre.  Es el Creador de toda la vida.  En ese sentido, Juan expone sobre el origen de la vida, y le da más claridad al tema.  Juan luego toma el lenguaje de la Creación para describir la Nueva Creación.  La venida de Jesús trae la luz que dispersa las tinieblas del pecado, al igual que la luz creada por Jesús en la creación dispersó la oscuridad que envolvía a la tierra.  Y, además, así como dio la vida física a Adán, nos ofrece la vida espiritual a todos los que creemos en un proceso de recreación a través del cual los pecadores se convierten en hijos de Dios (Juan 1:12-13) Sin duda, la historia de la Creación juega un papel central, tanto en la formación de la Teología[4] de Juan como en toda la Soteriología[5].

Toda esta reseña acerca de la Divinidad de Cristo nos sitúa en la verdad tangible de que cuando se habla del Reino de Dios se está hablando igualmente del Reino de Cristo, porque Cristo es Dios, contrario a lo que enseña, por ejemplo, la secta de los Testigos de Jehová cuyo texto del Evangelio del Apóstol Juan comienza irrespetuosamente:  

Juan 1:1(Versión del Nuevo Mundo) En el principio la Palabra existía, la Palabra estaba con Dios y la Palabra era un dios.

Con esta declaración, se intenta quitar a Cristo su divinidad, el poder para quitar el pecado de en medio (Juan 1:29), la capacidad de ser la Cabeza de su Iglesia (Colosenses 1:18), y la gloriosa verdad de tener un Reinado, como Rey de toda la Creación, la cual está sujeta a Él (Efesios 1:17-23; 3:19 y 4:9,10)

1.2. Profecías relativas al Reino de Cristo

El Antiguo Testamento (AT) Dios lo concibió para que fuera la imagen de la sustancia que se verificaría en el NT. Así el AT está repleto de profecías mesiánicas que se cumplen meridianamente ya que Dios nunca nos deja sin información acerca de Su Voluntad para el hombre. En muchos de los Salmos, el Rey David predijo que el Mesías reinaría sobre el Monte Sión[6] (Figura 4, Anexo 1), el cual tipifica la Iglesia del NT, el pueblo de Dios de la Nueva Dispensación. Por ejemplo el profeta Isaías dijo en Isaías 32:1:

Isaías 32:1 He aquí que para justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio.

Figura 4. Monte Sión (Unplash)

En un cumplimiento temprano de la profecía, el rey Ezequías (Figura 5) ciertamente cumplió. De él se escribió: Hizo lo recto ante los ojos de Jehová, conforme a todas las cosas que había hecho David su padre. En Jehová Dios de Israel puso su esperanza; ni después ni antes de él hubo otro como él entre todos los reyes de Judá. Porque siguió a Jehová, y no se apartó de él, sino que guardó los mandamientos que Jehová prescribió a Moisés (2 Reyes 18:3, 5-6)

Sin embargo, apuntando al futuro, a la dispensación en el NT, el rey Ezequías era un tipo[7] del Rey de reyes, Jesucristo. Jeremías 23:5 anuncia esto acerca de nuestro Mesías: He aquí que vienen días, dice Jehová, en que levantaré a David renuevo justo, y reinará como Rey, el cual será dichoso, y hará juicio y justicia en la tierra. Y quien sino Jesús cumplió esa profecía mesiánica. Del linaje de David vino el Señor, como un renuevo[8]. Así David fue cortado de la tierra de los vivientes pues su reinado fue temporal, pero en su lugar nació este Rey Eterno (Mateo 2:1-2) cuya justicia es como ninguna otra, ya que nos extendió un certificado de inocencia ante el Padre; nosotros que como pecadores no merecíamos esa bendición, por lo que nos reconcilió y justificó ante Él.

Figura 5. Rey Ezequías (Wikipedia)

No era suficiente, tener un rey justo. El rey debe tener ayudantes, príncipes bajo su liderazgo, que también presidirían en juicio y justicia. Ezequías tuvo ese tipo de leales príncipes, como Eliaquim, el escriba Sebna, los ancianos de los sacerdotes y el mismo Isaías (2 Reyes 19:2) Estos no eran príncipes en el sentido literal de ser hijos del rey Ezequías. La palabra hebrea para príncipe puede significar cualquier gobernante bajo un rey.

Si Ezequías, el rey justo, apunta a Jesús, el Rey Justo; entonces ¿quiénes son los príncipes de Jesús? Sus santos son sus príncipes, ¡gloria a Dios!como señala 1 Pedro 2:9: Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable. Así anunciamos la justicia divina en la tierra de acuerdo a la Gran Comisión que el Rey nos dejara en Mateo 28:18-20. Apocalipsis 5:10 también tiene esta proclamación al respecto del pueblo de Dios: y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra. Y es verdad, nosotros estamos reinando ahora aquí sobre el mundo, la carne y el pecado e intercedemos ante Dios por todos los pecadores para que sean salvos. Muchas de las pruebas y dolores que sufrimos los hijos de Dios en esta vida tienen un propósito maravilloso hoy, y en el mundo del más allá mañana, y es entrenarnos para ser los príncipes del Rey sufriente, parecernos a Él, participar de sus sufrimientos, pero también de su victoria, siguiendo sus pasos sabiendo que nos promete gran bendición (Filipenses 3:9-10, Juan 16:39), y de esta forma gobernar fielmente con el Rey Jesús cuando finalmente nos lleve con Él a las moradas celestiales y eternas (Salmo 23:6)

Pero, gloria a Dios, el amor y la misericordia de Dios no se quedó solo en el pueblo físico de Israel a quien El escogió entre las naciones de la tierra para manifestarse a él (Éxodo 19:5-6), sino que fue más allá y se manifestó el misterio escondido en los rincones de la eternidad cuando el incluyó en su Plan de Redención al pueblo gentil (Efesios 2:11-19; 3:5-6) ¡Gloria a Dios!

Así como bien profetizó el profeta Zacarías en Zacarías 9:10, y 14:9:

Zacarías 9:10 Y de Efraín destruiré los carros, y los caballos de Jerusalén, y los arcos de guerra serán quebrados; y hablará paz a las naciones, y su señorío será de mar a mar, y desde el río hasta los fines de la tierra.

Zacarías 14:9 Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová será uno, y uno su nombre.

Todas estas profecías nos están asegurando que Cristo sería el Rey que traería justicia y paz verdaderas a su pueblo al establecer su Reinado eterno en el corazón de los hombres, bendición alcanzable no solo para el pueblo de Israel, sino para todos los gentiles, para el Israel de Dios (Efesios 3:5,6, Gálatas 6:16) ¡Gloria a Dios!

Algunas profecías mesiánicas se muestran en la Tabla 1.

No.	PROFECÍA	CITA BÍBLICA	CUMPLIMIENTO
1	Nacería en Belén	Miqueas 5:2	Mateo 2:1-11
2	Nacería de una virgen	Isaías 7:14	Mateo 1:18-23
3	Autoridad profética comparable a la de Moisés	Deuteronomio 18:18-19	Mateo 28:18-20, Marcos 11:27-33
4	Luz para los gentiles	Isaías 49:6-7	Lucas 2:32
5	Moriría en la cruz	Salmos 22:14.16-18	Mateo 27:50
6	Montaría sobre un pollino	Zacarías 9:9	Mateo 21:1-13
7	Vendido por 30 piezas de plata	Zacarías 11:11	Mateo 27:3-10

No.	PROFECÍA	CITA BÍBLICA	CUMPLIMIENTO
8	Tendría un mensajero que le prepararía el camino	Malaquías 3.1	Mateo 3:1-6
9	Haría señales que nos mostrarían que Él está presente	Isaías 35:4	Marcos 16:17
10	Reino sempiterno	Salmo 45:1-6	Romanos 14:17

Tabla 1. Algunas profecías mesiánicas cumplidas bajo el Evangelio de paz (Wikipedia)

1.3. La Nueva Dispensación con Cristo Rey

El Evangelio según San Marcos narra la primera aparición de Jesús y el mensaje que estaba predicando (Marcos 1:14-15)

14 Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios, 
15 diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.

El Señor estaba anunciando que el tiempo estipulado por Dios (tiempo no Cronos [9] sino kairos[10]) para que se cumpliese la dispensación del Evangelio, se había acercado a la tierra con la sola presencia del Salvador del mundo, un tiempo que se había estado esperando por los buenos israelitas, como el viejo Simeón que cuando movido por Espíritu Santo fue al Templo, y tomó en sus manos al niñito Jesús exclamó:

29   Ahora, Señor, despides a tu siervo en paz, 
Conforme a tu palabra; 
30   Porque han visto mis ojos tu salvación, 
31   La cual has preparado en presencia de todos los pueblos; 
32   Luz para revelación a los gentiles,
Y gloria de tu pueblo Israel.

Tres cuestiones importantes expresó el viejo Simeón:

1. Cristo es la salvación del pecado del género humano (Juan 1:29)
2. El Padre había propiciado esta salvación (no el hombre, ni ninguna agencia), y lo había hecho no solo para Israel, sino para todo el mundo (Juan 3:16)
3. Había llegado la luz espiritual para los gentiles que andaban sin Dios y sin esperanza en el mundo (Efesios 2:11-22), y este hecho fue la gloria de Israel pues de allí precisamente vino la salvación (Juan 4:22), referencia resumida a las palabras proféticas pronunciadas por Jacob antes de su muerte. (Génesis 49:10)

El tiempo del establecimiento del Reino de Jesucristo había llegado por fin a la tierra, y para desmentir creencias de un reino físico, material, como Jesús mismo aclaró a sus atribulados y dudosos discípulos en Hechos 1:6-8 cuando lo que más ellos necesitaban en ese momento era poder para la misión que les esperaba.

Hechos 1:6 Entonces los que se habían reunido le preguntaron, diciendo: Señor, ¿restaurarás el reino a Israel en este tiempo? 
7 Y les dijo: No os toca a vosotros saber los tiempos o las sazones, que el Padre puso en su sola potestad; 
8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.

El Salvador aclaró además a los fariseos que le hicieron una pregunta similar (no solo para saber porque ellos no entendían nada de la misión del Señor, sino también para tentarle), en Lucas 17:20-21, escritura que reza:

20 Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia, 
21 ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros.

Las palabras del Maestro encierran una verdad muy grande, algo que cambió la historia dándole un ritmo salvador, de esperanza y de gozo al expresar que su Reino había llegado y estaba precisamente entre la gente ¡Gloria a Dios! Que su Reino tiene carácter espiritual, porque es establecido en los corazones de los hombres de fe, allí donde la paz y el gozo pueden transformar las vidas, allí donde Él puede llegar para dar justicia, regeneración, propiciación, adopción, reconciliación, redención y santificación, pilares todos de la salvación del hombre (Figura 6)

Figura 6. Pilares de la salvación (El autor)

Pablo, el Apóstol de los gentiles, arrojó mucha luz sobre este particular cuando dijo en Romanos 14:17 y 1 Corintios 15:50:

Romanos 14:17…porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.

1 Corintios 15:50 Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción. 

Aquí Pablo recalca la inmaterialidad del Reino de Cristo, el cual no es comer y beber, lo cual implica cuestiones meramente materiales, o sea necesidades físicas del hombre que se pueden resolver fácilmente comiendo o bebiendo alguna cosa, sino que consiste en cuestiones y dones espirituales, que ninguno puede dar a menos que crea en el Señor Jesucristo y su Reino, cuestiones estas que son justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. Además el Reino no es habitación de carne, ni sangre, ni tampoco de corrupción. Los hombres, sin saberlo, muchas veces procuran alimentar sus almas con mucha mundanalidad, pero nada pueden hacer para calmar sus espíritus y se diluyen es muchas concupiscencias y pecados; y es que el alma del hombre solo puede ser alimentada y sostenida por Dios, quien la creó y la quiere salvar buscándole un especial refugio: El Reino de Cristo.

Otra cita que explica que este Reino es una realidad presente es Colosenses 1:12-14:

Colosenses 1:12 con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz; 
13 el cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo, 
14 en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.

Y el Apóstol Pedro también nos aclara:

9 Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; 
10 vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro tiempo no habíais alcanzado misericordia, pero ahora habéis alcanzado misericordia.

Estos versos nos aclaran que debemos dar gracias a Dios por habernos escogido para redención, ya que nos trasladó del reino de las tinieblas del pecado al Reino de Jesús, Su Amado Hijo, por ello somos un linaje escogido, adquirido por el Dios de misericordia y amor, para que estando en esa bendición podamos anunciar al mundo las virtudes de quien nos llamó a su eterna luz, haciendo un pueblo especial, un reinado de gente santa, como dijera en Éxodo 19:5-6 y se ratificara en Tito 2:14.

Y también Juan, el teólogo, dice en Apocalipsis 1:9ª:

Apocalipsis 1:9 Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo,…

De acuerdo a este verso, Juan nos sitúa junto con él participando del Reino de Jesucristo ahora. Todos estos versos y muchísimos más son decisivos en la verdad que estamos desarrollando: El Reino de Cristo fue implantado en la dispensación del Evangelio de paz por lo que Cristo tiene un reino, una agencia donde mora, rige y gobierna. ¡Gloria al Señor!

CAPITULO 2. ACTUALIDAD DEL REINO DE CRISTO

2.1.   Introducción

Muchas profecías que predican el milenio [11], o período de 1 000 años, apuntan a que Jesucristo implantará su reinado en una etapa posterior a esta dispensación. Existen varias teorías al respecto, las cuales se muestran en la Figura 7. La teoría Premilenialismo Post-tribulacional enseña que el milenio sucederá después de la segunda venida de Cristo y antes del juicio final, la Pre-tribulacional (dispensacional) afirma que sucederá el rapto de la novia- Iglesia, luego un período de tribulación en la tierra, después la segunda venida de Cristo con su ya esposa- Iglesia (boda que se realizó previamente en el cielo), entonces sitúa el milenio antes del juicio final. La Post-milenialista lo señala justo antes de la segunda venida de Cristo, sucediendo el juicio final junto a la segunda venida de Cristo después de este período, y por último la teoría amilenialista que lo trata como un tiempo simbólico antes de la segunda venida de Cristo, la cual sucedería al mismo tiempo que el juicio final.

Figura 7. Teorías acerca del milenio (Mario Revel)

Es la Teoría Pre-tribulacional (dispensacional) la que abunda entre el Denominacionalismo[12], y se explica en la Figura 8.

Figura 8. Teoría Pre-milenialista predicada por la mayoría de las Congregaciones denominacionalistas (Ver Anexo 2 para la explicación del paquete doctrinal escatológico que estas predican) (el autor)

2.2. ¿Un Reino milenario?

El punto de vista de la Iglesia de Dios respecto al milenio señala este tiempo como los alrededor de mil años que el Catolicismo romano (Bestia de Apocalipsis 13:1-10) estuvo reinando en la escena religiosa mundial sin oposición (530 d.C., efervescencia del Catolicismo Romano hasta 1530 d.C., comienzo del tiempo del Protestantismo o Imagen de la Bestia, Apocalipsis 13:11-18) El afirmar que Cristo tiene un Reino ahora sería un golpe bajo a esta doctrina milenarista, que por demás es una doctrina relativamente nueva al igual que el rapto de la Iglesia, los dos juicios (de recompensas y condenación), el Armagedón, las bodas de Cristo con su Iglesia en el cielo, el afirmar que Cristo tiene actualmente una Iglesia-novia, y la Gran Tribulación. Todas estas doctrinas conforman un paquete doctrinal de tal manera que el desmentir una de ellas todas pierden su sostén de verdad (Ver Anexo 2) Ellos esperan un reinado milenial donde Cristo se sentaría en el trono de David en un Tercer Templo, y sometería a todos los reyes de la tierra (Figura 9), lo cual no tiene basamento bíblico toda vez que el Capítulo 20 de Apocalipsis expresa sí ciertos eventos, pero en el orden simbólico.

Figura 9. Maqueta del Tercer Templo Milenial de Jerusalén que se exhibe en museo en esa ciudad (Acontecer cristiano)

La Figura 10 muestra la posición de la Iglesia de Dios respecto a este tema:,

Figura 10. El milenio: posición de la Iglesia de Dios (el autor)

La Figuras 11, 12 y 13 explican el significado espiritual de Apocalipsis 20, escritura simbólica que se toma literalmente por el mundo denominacional.

Figura 11. Explicación de Apocalipsis 20 (I) (Alex Figueroa)

Figura 12. Explicación de Apocalipsis 20 (II) (Alex Figueroa)

Figura 13. Explicación de Apocalipsis 20 (III) (Alex Figueroa)

2.3.  Evidencias de que Cristo tiene un Reino

A continuación, algunas de las principales evidencias de que Cristo tiene un reino ahora, las que se muestran en la Tabla 2.

No.	EVIDENCIA	CITA BÍBLICA	COMENTARIO
1	Cristo nació Rey	Mateo 2:1-2	No fue por disposición legal, no por herencia.
2	Aseveración ante Pilato	Juan 18:36,37	Cristo afirmó que la naturaleza de su reino no es terrena, más espiritual, que había nacido precisamente con el objetivo de ser Rey, además le expresó a Pilato que este había afirmado precisamente esa verdad.
3	Episodio con Natanael	Juan 1:47-51	En este bello episodio, Natanael expresa con vehemencia que Cristo es Rey, y el Hijo de Dios, afirmación muy especial y estupenda, tras comprobar su omnisciencia.
4	Episodio de la entrada triunfal en Jerusalén	Juan 12:12-15	Este episodio es concluyente cuando las gentes que le recibieron en la ciudad le identificaron como el Rey de Israel, cumpliéndose lo dicho por el profeta Zacarías en 9:9.
5	Predicción de la venida del Rey	Isaías 33:22	Isaías predijo su venida, oficio y trabajo. El apóstol Pablo dijo que es ahora es el día de salvación (2 Corintios 6:2)
6	Afirmación del Apóstol Juan	Apocalipsis 1:5, 17:14	Cristo es Rey de reyes. Él está por encima de todos los reyes de la tierra.
7	Afirmación del Apóstol Pablo a Timoteo	1 Timoteo 6:14-15	Cristo es Rey ahora y al vencer y sentarse a la diestra del Padre esta verdad se hacía más amplia y comprensible.
8	Testimonio de Pedro	Hechos 2:29-36	Dios levantó a Jesús para ser príncipe de paz y vida.
9	Testimonio del escritor del libro a los Hebreos	Hebreos 2:9	Jesús fue coronado de honra y de gloria.
10	Afirmación del apóstol Pablo a los efesios	Efesios 1:20-23	El Padre lo puso sobre todo principado y autoridad y poder y señorío.

Tabla 2. Algunas evidencias de la actualidad del Reino de Cristo

2.4.  Importancia de la muerte y resurrección de Cristo

Resumen: En el sacrificio de la crucifixión de Jesús se nos muestra la profundidad del amor de Dios por nosotros (Romanos 5:8) y las benditas medidas tomadas por el Padre para salvarnos de nuestros pecados (Hebreos 1:1-4) Y en la resurrección de Jesús vemos el triunfo de Dios sobre la muerte (Juan 11:25), señalando la promesa de la vida eterna en la presencia de Dios (Juan 3:16-17) Así, con su muerte, Cristo destruyó al diablo que tenía poder para traer al hombre la muerte espiritual y el pecado (1 Corintios 15:26) La resurrección de Jesús, por otro lado, hizo nula la victoria del sepulcro y dejó sin efecto la muerte misma, haciendo posible la salvación plena de todos nuestros pecados.

El pecado nos aleja de Dios. Desde que Adán y Eva dieron la espalda a Dios en el jardín del Edén (Génesis 3), los seres humanos hemos sido corrompidos por el pecado (Romanos 5:12-21) Ignoramos lo que Dios quiere porque preferimos hacer lo que queremos (Egocentrismo[13]) Ponemos nuestro corazón en acumular poder y riqueza para nosotros mismos, y no cuidamos bien lo que Dios nos da. Estamos demasiado oscurecidos por nuestros pecados para encontrar el camino de vuelta a Dios por nosotros mismos. Y la regia justicia de Dios exige que haya un precio por nuestros pecados y yerros (Isaías 53:11)

Sin embargo, a pesar de nuestros yerros, Dios nos ama y quiere que nos reunamos con Él. Jesús, el Hijo de Dios, vino a la tierra para hacer posible nuestra reconciliación con Dios.

En los tiempos del AT, el pueblo de Israel seguía un sistema de sacrificios para pagar la deuda por sus pecados. Las leyes de Dios determinaban qué tipos de sacrificios se requerían para expiar los diferentes pecados. La mayoría de los sacrificios vivos debían ser animales perfectos y sin mancha (Levítico 1:2-4, 10)

En el Nuevo Testamento, Jesús, el Hijo de Dios, vino a la tierra para reunirnos con Dios mediante el máximo sacrificio: su propia vida (Hebreos 9:1-14)

Nunca podríamos llevar una vida digna de Dios por nosotros mismos, debido a nuestra naturaleza pecaminosa (Romanos 3:9-18) Por ello, Jesús vivió una vida sin pecado por nosotros. Y luego murió la dolorosa muerte que nuestros pecados merecían (Filipenses 2:8) Juan 3:17 dice: “Dios no envió al Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo se salve por él“. Al sacrificarse por nosotros en la cruz, asumió el castigo de todos nuestros pecados a la vez. Esto le convirtió en el sacrificio definitivo, satisfaciendo de una vez por todas las exigencias de la justicia de Dios. Por eso llamamos a Jesús “Cordero de Dios” (Juan 1:29) Fueron dos las obras maravillosas que este sacrificio trajo al hombre: la salvación de nuestros pecados cometidos y la santificación de nuestras vidas que arranca de raíz la semilla del pecado adámico (Anexo 3)

Gracias al sacrificio de Jesús en la cruz, nuestras vidas ya nunca serán iguales. Este regalo o don que se nos ha procurado nunca nos lo podrán quitar, nunca perderá su poder, y nunca dejará de existir. La nueva vida en Cristo es el mejor regalo que podemos recibir (Efesios 4:20-32)

Es imposible disociar la idea de salvación del concepto del Reino de Dios. Entrar en el Reino de Dios expresa precisamente la realidad de ser redimidos por Cristo y habitados por el Espíritu Santo . Así que nadie puede entrar en el Reino de Dios por sus propios méritos, es necesario experimentar una nueva vida (Juan 3:3)

Los discípulos no entendieron la íntima conexión entre la salvación y el Reino de Dios. Cuando Jesús dijo que es más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja que un rico entre en el Reino de Dios, inmediatamente preguntaron: “¿Entonces quién podrá salvarse?”. (Marcos 10:25-26).

Entonces Jesús con su muerte y resurrección adquirió un pueblo el cual compró con su sangre. Ese pueblo le sirve y le tiene como rey de sus corazones porque allí es donde Él en gobierna y está en control (Apocalipsis 1:10-20) Cristo compró una Iglesia (Mateo 16:18), los llamados a salir. Un coro que forma parte de la liturgia de la Iglesia de Dios reza:

Aleluya que el Reino de Dios entre nosotros está,

Aleluya que el Reino de Dios es justicia es gozo y es paz

En el Espíritu Santo que enseña toda la verdad,

//El Reino es la Iglesia de Dios, es la Iglesia de la Santidad//

2.5.  Sobre la identidad del Reino

El Reino de Dios es básicamente el dominio, reinado o soberanía de Dios sobre todo. La doctrina del Reino de Dios impregna toda la Biblia. Por lo tanto, es necesario entender que la expresión “Reino de Dios” trae consigo un concepto muy amplio, cuyo sentido debe entenderse a la luz del contexto de toda Escritura.

Las profecías sobre el Reino de Dios están presentes desde el AT. Pero es en el NT donde el mensaje sobre el Reino de Dios se desarrolla de manera aún más clara, siendo principalmente el tema más frecuente de la predicación de Jesús.

Algunas personas tratan de aplicar diferentes significados a las designaciones “Reino de Dios” y “Reino de los Cielos”. La expresión “Reino de los Cielos” aparece treinta y cuatro veces en el Evangelio de Mateo ; mientras que la expresión “Reino de Dios” aparece sólo cinco veces. Los otros tres Evangelios hacen uso frecuente de la expresión “Reino de Dios”.

Además, en varios pasajes donde Mateo usa la designación “Reino de los Cielos”, los textos paralelos de Marcos, Lucas y Juan usan la designación “Reino de Dios”. Mateo mismo usó las dos expresiones juntas indistintamente (Mateo 19:23,24). Por lo tanto, las designaciones “Reino de Dios”, “Reino de los Cielos” o simplemente “Reino” son sinónimos (cf. Mateo 5:3; Lucas 6:20)

Hay una sugerencia que se usa a menudo para explicar por qué Mateo usa “Reino de los cielos” en lugar de “Reino de Dios”. Esta explicación dice que Mateo usa la expresión “Reino de los Cielos” porque él era un judío que escribía a judíos. Era costumbre de los judíos usar el nombre de Dios lo menos posible, ya que lo consideraban muy sagrado. Entonces Mateo respetó esta tradición y habló del “Reino de los Cielos”.

Por otro lado, la expresión “Reino de los Cielos” quizás no era tan inteligible para los gentiles como “Reino de Dios”. Así que esa podría ser la razón por la cual Marcos, Lucas y Juan usan esa expresión en lugar de “Reino de los Cielos”.

El concepto del Reino de Dios puede trabajarse tanto de manera más amplia como más estrecha; tanto en su sentido más general como en el más específico. Como se ha dicho, su significado general habla del reinado eterno y soberano de Dios sobre todos. De principio a fin, la Biblia muestra a Dios como el Rey supremo que gobierna sobre todas las cosas (cf. Salmo 103:19; 113:5; Daniel 4:34,35; Mateo 5:34; Efesios 1:20; Colosenses 1:16; Hebreos 12:2; Apocalipsis 7:15; etc.)

El Reino de Dios, en su acepción más restringida, habla de todo lo que implica la acción soberana de Dios en la redención de su pueblo. Por lo tanto, el concepto de “Reino de Dios” incluye la obra de Cristo, la realidad presente de la Iglesia y las bendiciones de la salvación, y la consumación de todas las promesas en la bienaventuranza eterna en el universo redimido.

Aunque Dios gobierna el universo entero soberanamente desde su trono (Salmo 11:4, Habacuc 2:20), debido al pecado la humanidad caída se niega a reconocer el gobierno de Dios. Desde el comienzo de la historia del mundo, los malvados se han levantado en rebelión contra el Reino de Dios. Pero que un día llegará a su fin. El Reino de Dios durará para siempre y toda oposición caerá en eterna ruina (Isaías 9:6-7)

Pero según las Escrituras, todo esto implica un largo proceso histórico. El compromiso con el Reino de Dios se llevó a cabo por primera vez en el linaje piadoso de Set , que culminó con la obediencia de Noé (Génesis 6 y 7) Después, en una nueva etapa, se mantuvo con Abraham y su simiente, la cual es Cristo (Génesis 12:1-3;15:4-6, Gálatas 3:16)

Entonces es posible decir que en el Antiguo Testamento la revelación del Reino de Dios estaba limitada al pueblo de Israel. Mientras tanto, las demás naciones estaban en tinieblas y en completa rebelión contra Dios (Efesios 2:11-12)

Pero había un propósito mucho más amplio; el Reino de Dios no estaría restringido sólo al pueblo de Israel ¡Gloria a Dios! Esa fue solo una etapa temporal que daría paso a una nueva etapa, una etapa final y superior del Reino de Dios (Efesios 2:13-22)

Por eso los profetas anunciaron la expansión del Reino de Dios sobre toda la tierra, donde judíos y gentiles se unirían en total entrega y obediencia a Dios, cuyo reino nunca terminaría (cf. Génesis 17:17-20; 18:18; 1 Crónicas 16:23-36; Salmo 67; 97; Isaías 52:7-15; Malaquías 4; Romanos 4:13-17, Efesios 2:12-22)

Cuando Cristo se encarnó en este mundo, marcó el comienzo de la etapa final del Reino de Dios (Mateo 3:2-3) Él es el Mesías davídico, el Rey elegido que trajo el Reino de Dios a la tierra de una manera sin precedentes. Por eso, Juan el Bautista , el heraldo del Mesías, y el mismo Jesús, anunciaron con firmeza que el Reino de los Cielos había llegado, trayendo gracia y juicio (Mateo 3:2-12; 4:17). Pero como es claro, el Reino de Dios se desarrolla de tal manera que alcanzará su pleno cumplimiento al final de los tiempos (1 Corintios 15:24-28)

Las actividades narradas de Jesús, al sanar las enfermedades, expulsar los demonios, enseñar una nueva ética de vida y ofrecer una nueva esperanza en Dios al más pobre, se entiende como una demostración que el Reino está en acción. Tener al Mesías, el Rey de los judíos, entre ellos, es un aspecto de este Reino: el Rey había llegado para representar su Reino. Por su vida sin pecado y mediante sus milagros estaba demostrando a los judíos como es el Reino.

Jesús dio mucha importancia a este tema, como se puede ver en el Padrenuestro, donde es el segundo asunto más importante en esa oración.

Mateo 6:9 Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.

En el presente hablamos del Reino de Dios en su presente continuación en la Iglesia de Dios. Al respecto, W. Hendriksen [14]habla del Reino de Dios como el dominio del Señor reconocido en el corazón y activo en la vida de su pueblo. Entonces este concepto involucra las bendiciones de la salvación para aquellos que reconocen el señorío de Cristo. Los ciudadanos del reino son aquellos que han sido arrancados del reino de las tinieblas al Reino de Cristo (Colosenses 1:13, 1 Pedro 2:9-10)

También es cierto que el Reino de Dios se desarrolla de manera misteriosa durante la era evangélica (Mateo 13:19-52; Marcos 4:30) Aún en este aspecto presente, y a través de su vida y testimonio, la Iglesia de Dios está llamada a hacer visible el Reino de Dios. Además, los milagros de Jesús , obrados por el poder del Espíritu Santo, sirvieron como evidencia de la venida del Reino de Dios (Mateo 12:28)

Por tanto, el Reino de Dios en esta última etapa, en su aspecto presente, fue inaugurado por Cristo (Mateo 2:2; 4:23; 9:35; 27:11; Marcos 15:2; Lucas 16:16; 23: 3; Juan 18:37). Ahora está en pleno apogeo en la Iglesia de Dios (Mateo 24:14; Romanos 14:16,17; 1 Corintios 4:19,20; Colosenses 4:11)

El Reino de Dios también se refiere al cambio de corazón o mente (metanoia) por parte de los cristianos, dando énfasis a la naturaleza espiritual de su Reino al decir que «el Reino de los Cielos está dentro de vosotros mismos» (Lucas 17:21) Esta frase puede también traducirse, sin embargo, «el reino de los cielos está en medio de vosotros.»

Jesús usó el lenguaje del “Reino de Dios” de una forma que se contrapone con los revolucionarios judíos del siglo I, llamados zelotes[15], que creían que el Reino era una realidad política que llegaría con una revuelta violenta contra la dominación romana, reemplazada por una teocracia judía.

En los Evangelios canónicos, Jesús de Nazaret invita a todos los hombres a entrar en el Reino de Dios; aun el peor de los pecadores es llamado a convertirse y aceptar la infinita misericordia del Padre. El Reino pertenece, ya aquí en la tierra, a quienes lo acogen con corazón humilde. A ellos les son revelados los misterios del Reino de Dios.

El Reino de Dios continuará en progreso hasta que alcance su manifestación final y plena cuando Cristo regrese en gloria por segunda y última vez. Sí, en un aspecto el Reino de Dios ya está aquí, pero en otro aspecto aún está por venir. Es algo presente, pero también es algo futuro (Mateo 7:2-22; 25:34; 26:29). Por eso Jesucristo habla del Reino como herencia preparada para los santos (Mateo 25:34)

El Reino de Dios, que en esta última etapa presente se extiende a todos los pueblos y naciones, pronto será consumado (1 Corintios 15:50-58; Apocalipsis 11:15) El día en que esto sucederá está decretado por Dios mismo, pero es desconocido para los hombres (Hechos 1:7) 

Conclusión

Hablar del Reino de Dios es hablar del mensaje mismo de las Escrituras. En su Comentario al NT, W. Hendriksen sintetiza de manera muy didáctica el concepto bíblico del Reino de Dios en la enseñanza de Jesús, que se reproduce a continuación con algunas adaptaciones:

• El Reino de Dios es el gobierno o soberanía reconocido de Dios (Mateo 6:10)
• El Reino de Dios implica la salvación completa. En otras palabras, el Reino de Dios incluye todas las bendiciones materiales y espirituales que vienen cuando Dios es reconocido y obedecido como el Rey de nuestros corazones (Mateo 10:25,26)
• La Iglesia de Dios es la comunidad de personas en cuyo corazón se reconoce a Dios como Rey y Señor. Así que hay un sentido específico en el que el Reino de Dios y la Iglesia son expresiones equivalentes. Esto explica la promesa de Jesús cuando habla del liderazgo y del fundamento apostólico en la edificación de la Iglesia: “A ti te daré las llaves del reino de los cielos” (Mateo 16:19)
• El Reino de Dios habla también de eterna bienaventuranza; habla de la vida eterna en el cielo con todo su esplendor. Este es el significado futuro del Reino que expresa la realización final del poder salvador de Dios (Mateo 25:34)

Conclusivamente podemos observar uniformemente en todos los textos analizados hasta aquí que no es para un futuro, sino ahora, que Cristo al levantarse de los muertos, sentarse a la diestra del Padre en las alturas sobre todo principado y potestad, poderío y dominio, sobre todo nombre que se nombra, sobre todas las cosas y dado por cabeza sobre la Iglesia, es constituido Rey fuerte y eterno sobre todas las cosas. Nada hay más claro en este sentido. Un rey, presupone un reino, y ese es Cristo y su Iglesia, en las dos fases, tierra hoy y cielos mañana cuando Él regrese a buscarla.

Hebreos 1:8 Más del Hijo dice: Tu trono, oh Dios, por el siglo del siglo; 
Cetro de equidad es el cetro de tu reino.
9 Has amado la justicia, y aborrecido la maldad, 
Por lo cual te ungió Dios, el Dios tuyo, 
Con óleo de alegría más que a tus compañeros.
10 Y tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, 
Y los cielos son obra de tus manos. 
11 Ellos perecerán, más tú permaneces; 
Y todos ellos se envejecerán como una vestidura, 
12 Y como un vestido los envolverás, y serán mudados; 
Pero tú eres el mismo, 
Y tus años no acabarán.
13 Pues, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: 
Siéntate a mi diestra, 
Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies?

2.6   El Jinete del caballo blanco en Apocalipsis

La cita de Apocalipsis 19:11-16 nos acerca a la identidad del Rey de Reyes, Jesucristo:

11 Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea. 
12 Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que ninguno conocía sino él mismo. 
13 Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su nombre es: EL VERBO DE DIOS. 
14 Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio, le seguían en caballos blancos. 
15 De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.
16 Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES.

Figura 14. El Jinete del caballo blanco (Noticias del Chaco)

Este pasaje, como casi todos los del libro de Revelaciones está lleno de un grande simbolismo. Que el cielo esté abierto significa que iba a salir de allí, o sea de un origen divino alguien poderoso y con una grande misión divina. El caballo significa poder para pelear contra las huestes de Satanás, pero lo blanco del color apunta a su Santidad. Ahora se detallan características propias del jinete, el cual, como aseguramos, es el Señor Jesucristo. Veamos:

• Nombre: Fiel y Verdadero.- El jinete destaca por su fidelidad y la verdad que representa.
• La pelea de Él es con justicia, o sea inclinado a obrar y juzgar respetando la verdad de Dios, y dando a cada uno lo que le corresponde de acuerdo a sus actos. Es necesario destacar que el jinete estaba preparado para la lucha espiritual contra sus enemigos.
• Ojos como llama de fuego.- Nos traslada a la penetrante visión espiritual del jinete, con una mirada que penetra para reconocer la verdad y los que son de la verdad.
• Cabeza con muchas diademas.- Estaba adornada su cabeza con muchas coronas que no solo le adornaban, sino más bien son símbolo de nobleza o dignidad, y de victorias alcanzadas. El jinete era de gran realeza y reinado.
• Nombre que nadie conocía, sino Él mismo.- Puede referirse a: (a) Aspectos de la naturaleza de Cristo no revelados y por eso no entendidos por el hombre (Mateo 11:27), (b) al hecho de que el nombre de Cristo “es sobre todo nombre” (Filipenses 2:9), y que ningún hombre puede conocer (experimentar u ocupar) tal posición de autoridad y poder. Nadie posee su poder. Amén.
• Vestidura de ropa teñida en sangre.- Nos habla del sacrificio que como Cordero de Dios hizo para redimirnos del pecado (Juan 1:29)
• Nombre: El Verbo de Dios.- Juan 1:1. Este verso ya fue comentado en el Capítulo 1.
• Los ejércitos celestiales le seguían en caballos blancos.- La vestidura de estos “ejércitos celestiales” era blanca, lo que habla de santidad y pureza, y los pasajes tales como Apocalipsis 3:5; 6:11; 19:8; 17:14; Filipenses 3:20, sugieren que son compuestos de los santos, quienes siguen a Cristo en la pelea espiritual victoriosa contra las dos bestias de Apocalipsis 13. Pero, tales pasajes como Daniel 7:10; Mateo 26:53; Mateo 2:1-23, 1 Tesalonicenses 1:7; apuntan a la conclusión de que son seres celestiales. De todos modos es un cuadro simbólico de fuerzas de justicia, dirigidas por Cristo el Victorioso, en una batalla espiritual contra las fuerzas del mal,  Apocalipsis 14:1,  14:20;  17:14; Salmo 68:17; Salmo 149:6-9; Zacarías 14:5; Mateo 26:53; 2 Tesalonicenses 1:7; Judas 1:14.
• De su boca sale una espada aguda.- La Palabra de Dios es lo que Él habla; es una espada de dos filos de la que se habla en Apocalipsis 1:16.
• Hiere con la espada a las naciones.- Puede ser una declaración general del juicio o una referencia a los ejércitos espirituales de maldad de la tierra al ser «vencidos y muertos con la espada» por Él (Apocalipsis 19:21). Cristo regirá con vara de hierro en cumplimiento de las profecías mesiánicas en el Salmo 2:8, Salmo 2:9; Isaías 11:4.
• Furor e ira es lo único que les espera a los enemigos de la Verdad. (Considérese Rom 11:22) Cristo es quien pisa el lagar del vino del furor y de la ira de Dios Todopoderoso, o sea como lagar donde se pisan las uvas para extraer el jugo de ellas, así también Cristo pisa el lagar de la ira de Dios para que salga puro esa ira y furor contra la mentira y el error. Indica no solamente su poder absoluto sobre el enemigo, sino también que Él es el Gran Juez de las naciones. Véase Judas 1:14-15.
• Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES. He aquí la completa y clara identidad del jinete del caballo blanco. Él es el Rey sobre todo rey, y Señor sobre todo señor. Su reinado es sobre todo reinado y su señorío sobre todo señorío. Es Nuestro Señor Jesucristo.

CAPÍTULO 3. CRISTO Y EL TRONO DEL REY DAVID

3.1. Profecías falsas sobre el trono de David

Los defensores del reino milenario de Cristo pretenden demostrar que Cristo no reina en estos momentos, o sea que no está sentado en el trono de los corazones de los redimidos donde Él es Señor y Rey, guiando las almas del Israel de Dios (Gálatas 6:16) Esto lo atestiguan dado que la Palabra dice que Cristo se sentaría en el trono de David; pero esto lo hace de forma simbólica, siendo el rey David un tipo de Cristo (Isaías 9:6-7)

6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 
7 Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.

Los maestros de estas doctrinas llegan a predicar que Cristo se sentará en el trono de David que en ese tiempo será restablecido a fin de que Cristo y la nación de Israel literal reine sobre todas las naciones, lo cual parece algo muy hermoso y hasta lógico dadas las muchas promesas de Dios para esta nación que se cumplieron en un tiempo cercano. Pero estas declaraciones no tienen fundamento bíblico, son meras especulaciones de mentes humanas.

Figura 15. Trono del rey David, ¿será restaurado para Cristo? Respuesta: No. (El Blog del apologista cristiano)

Esta teoría carece de base toda vez que la palabra trono, significa soberanía, poder y dignidad. Así como el rey David fue exaltado a ese lugar de poder y gobierno en Israel literal, también Jesucristo será levantado y exaltado a ese lugar de soberanía y poder, pero no en un reinado literal, sino en un señorío espiritual sobre una nación espiritual como lo es el Israel de Dios (Gálatas 6:16), título hermoso para la Iglesia de Dios. Hay un interesante escrito de Erick Jiménez Milla [16]al respecto del trono de David y el Reino de Cristo:

En Apocalipsis hay dos textos que relacionan a Jesús con David. Cuando desarrolló su ministerio aquí en la Tierra, más de uno lo llamó, el hijo de David. Lo que hace que tenga una vinculación interesante con el que ha de instaurar el reino fructífero y eterno. Apocalipsis 3:7 dice “el que tiene la llave de David”, llevando una explicación lógica de la experiencia de un mayordomo de la casa de David (Isaías 22: 20-22; 2 Reyes 18: 18)

Eliaquim fue nombrado para supervisar “la casa de David”, como lo demuestra el hecho de que se le” daría “la llave de la casa de David”. Esto tiene una relación con Cristo teniendo la “llave” la cual representa su autoridad sobre la Iglesia y sobre el propósito divino que debía ser cumplido por ella (Mateo 28: 18; Efesios 1:22) Es decir, con “la llave de David”, Cristo tiene plena autoridad para abrir y cerrar, para hacer triunfar el plan de la redención. La supremacía o prioridad de David, aun hasta del mismo Abraham, es vista en Mateo 1: 1 y en Apocalipsis 5: 5 describe que “la raíz de David, ha vencido para abrir el libro y desatar sus siete sellos”. Apocalipsis 22: 16, también dice: Yo soy la raíz y la descendencia de David”. El significado de esta expresión lo podemos comprender si entendemos que David es considerado como uno de los mejores reyes y guerreros de Israel.

Este título proviene de Isaías 11: 1, 10, donde dice: “saldrá vara de la raíz de Isaí” (LXX) o “retoño del tronco de Isaí” (Heb.), o sea el padre de David. En Romanos 15:12 Pablo aplica este símbolo a Cristo, lo que muestra que Cristo es un segundo David, el cual fue el máximo rey y héroe militar de Israel. El concepto davídico del Mesías era esencialmente el de un vencedor que restauraría el reino de Israel (Mateo 21:9; cf. Hechos 1:6) Aunque Cristo no restauró el reino literal de los judíos, su victoria en el gran conflicto con Satanás restituirá el reino en un sentido infinitamente mayor y más importante. Por lo tanto, desde el punto de vista de este pasaje, este título es sumamente adecuado.

3.2. Interpretación fiel de 2 Samuel 7:12-16

Pasamos ahora a explicar fielmente la cita de 2 Samuel 7:12-16, la cual arroja mucha luz en cuanto al reinado de Cristo, en contraposición con las doctrinas milenaristas acerca de tal señorío. 

12 Y cuando tus días sean cumplidos, y duermas con tus padres, yo levantaré después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus entrañas, y afirmaré su reino.

13 El edificará casa a mi nombre, y yo afirmaré para siempre el trono de su reino.

14 Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo. Y si él hiciere mal, yo le castigaré con vara de hombres, y con azotes de hijos de hombres;

15 pero mi misericordia no se apartará de él como la aparté de Saúl, al cual quité de delante de ti.

16 Y será afirmada tu casa y tu reino para siempre delante de tu rostro, y tu trono será estable eternamente.

De este verso, que está apuntando a dos reinados; uno temporal y otro eterno, se pueden sacar varias verdades las cuales enumeramos:

1. De acuerdo a Hechos 2:29-30, Jehová profetizó al rey David por medio del profeta Natán que después de su muerte, Él iba a levantarle a su casa un rey perteneciente a su descendencia. Este rey no fue otro que Salomón, su hijo, el cual edificó la casa a Dios con el modelo y medidas que Dios ordenó, ya que David no pudo. Esto fue el cumplimiento cercano de la profecía, más en su cumplimiento a largo plazo apunta hacia el Reinado del Señor Jesucristo, cuando incluso apunta en los versos 12 y 13 que tal reino no tendría fin (Isaías 9:6-7, Salmo 132:11) El rey David reconoció diáfanamente que él tenía un Señor al cual obedecer, por tanto con toda su gloria no se envaneció, sino que aceptó que él no subió a los cielos como lo hizo el Señor para sentarse a la diestra del Padre en las alturas tras levantarle de los muertos (Salmo 16:10), y reconoció el señorío eterno de Cristo (Hechos 2:34-35)
2. Ciertamente de acuerdo al verso 13 Salomón edificó la casa material, pero Cristo edificó también casa, pero espiritual, que no es otra que la Iglesia de Dios (Mateo 16:18)
3. La eternidad del reinado es solo característica intrínseca del reinado de Cristo, ya que el reinado de David y Salomón fue temporal, tuvo fin.
4. La palabra afirmar denota que el reinado de Cristo es verdad y dado como cuestión muy cierta, además de asegurar al Señor en la posición de Rey eterno ¡Gloria a Dios!
5. Los versos 14 y 15 deben ser aplicados al rey Salomón, aunque el Señor Jesucristo tiene la misma filiación al Padre (Hebreos 1:1-14)
6. La misericordia de Dios hacia el rey Salomón, de cierto fue extendida, no así con la actitud observada por el rey Saúl, su abuelo.
7. Ya en el verso 16 la alusión es al reinado de Cristo, único con la etiqueta de eternidad, y con la característica de ser un reinado estable, o sea que se mantiene invariable o inalterable en el mismo lugar, estado o situación.
8. Este fue el propósito fundamental de la venida de Cristo al mundo, o sea, establecer su reino entre los hombres (Romanos 1:3-4)

Así que el rey David se convierte en tipo de Cristo, y es por ello que se dice que este último se sienta en el trono del primero, arguyendo a la soberanía que David tuvo sobre la casa de Israel, así es la soberanía, dominio y autoridad de Cristo sobre su reino, o sea la Iglesia de Dios (Apocalipsis 1:10-20) Esta formidable descripción simbólica obedece al Señor Jesucristo, ¡Gloria a Dios!

3.3. El Templo de Salomón, tipo de la Iglesia de Dios

Figura 16. Templo de Salomón reconstruido en 3D (Aleteia)

De acuerdo a la descripción bíblica, el Templo de Salomón era un edificio que se encontraba orientado sobre un eje longitudinal dirección este-oeste; se calcula que su longitud debió ser de cerca de 27 metros de longitud interior, 13.5 metros de altura y 9 metros de ancho.

Mobiliario del templo y sus significados

Con la misma simbología de los objetos del Tabernáculo, el mobiliario y los utensilios del gran templo construido por Salomón estaban repletos de analogías sagradas.

El templo erigido para Dios por Salomón, así como lo que sucedió, fueron hechos con el propósito de sustituir al Tabernáculo. Básicamente, seguían el mismo plano dado por el Señor a Moisés para la gran tienda que acompañaba al pueblo de Israel por el desierto. Tenía prácticamente el mismo mobiliario ceremonial básico y casi los mismos artefactos, con los mismos significados.

Figura 17. Maqueta del Templo de Salomón (Bible-history.com)

Figura 18. Vista superior del Templo de Salomón (armandilopezgolart.wordpress.com)

El altar de sacrificios – Luego de entrar al patio externo del templo, después de las murallas, se encontraba un gran altar en el que se sacrificaban los animales ofrecidos a Dios. Ellos eran el símbolo de los pecados y morían en expiación por ellos. Sólo podían ser sacrificados animales en perfectas condiciones (Levítico 1:1-17, 2 Corintios 2:14-15a), generalmente los mejores entre los mejores de los rebaños. Quemados, producían humo que subía a los cielos como “olor grato” al Señor (Éxodo 29:25), lo que significaba que el fiel estaba libre de pecados, lo que agradaba a Dios. Esto es símbolo del tiempo presente cuando el sacrificio de Cristo, como el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo (Juan 1:29) Vea Figura 19.

Figura 19. El altar de los sacrificios (Universal.org)

El “mar de bronce” – También llamado “mar de fundición” (1 Reyes 7:23-40), era un gran reservorio de agua que estaba junto al altar de sacrificios. Con la misma simbología de la antigua pileta del Tabernáculo, en su agua se lavaban los pecados, con un fuerte significado de purificación (por la sangre y cualquier otro residuo que quedara en las manos y pies de los sacerdotes). El reservorio, redondo, estaba sobre doce bueyes esculpidos en bronce que, en grupos de tres, tenían sus cabezas orientadas a los cuatro puntos cardinales. En el mar de bronce se abastecían diez piletas móviles, sobre ruedas, que eran distribuidas sobre el patio externo, cinco de cada lado del templo. Significa la obra segunda de gracia operada por la sangre de Cristo que purifica las vidas de los hombres, extirpando la raíz del pecado adámico heredado.

Figura 20. El mar de bronce (Wikipedia)

Las dos columnas – Al lado del pórtico principal del templo se ubicaban dos columnas de bronce que llegaban casi hasta el techo, llamadas Joaquín y Boaz por su realizador, Hiram Abiff, enviado por el rey de Tiro, su homónimo, Hiram, con los arquitectos y artífices que trabajarían en la obra del templo (1 Reyes 7:13-22). Reconocido artesano del bronce, Abiff había homenajeado a los reyes David y Salomón con dos pilares, de acuerdo con algunos creyentes. Para los judíos, son pilares simbólicos de mucha importancia para la vida con Dios: Joaquín simbolizaba la sabiduría y Boaz la inteligencia (ambos atributos de Salomón que lo hacían famoso en todo el mundo conocido de la época) Espiritualmente representan los dos testigos de la presencia de Dios en el mundo, o sea la Palabra de Dios y el Espíritu Santo.

Figura 21. Las dos columnas (Salvos X gracia)

La mesa de los panes de la proposición – Como la mesa de los panes del Tabernáculo, el gran templo también tenía la suya, en la misma posición, a la derecha de quien entraba al Santo Lugar. Con doce panes ácimos apilados en dos columnas de seis, la mesa de la proposición simbolizaba el alimento que viene de Dios, así como el alimento espiritual de su Palabra. Hoy sabemos que era uno de los símbolos alusivos a Jesucristo, que se refirió a sí mismo como el “pan de vida” (Juan 6:35), aunque en esa época los constructores del templo no supieran sobre eso, no lo quita.

Figura 22. La mesa de los panes de la proposición (paperblog)

Los menorás – El menorá, gran candelabro de oro con siete lámparas de aceite, era solamente uno en el Tabernáculo. En el gran templo de Salomón, la cifra aumentó hasta diez, en dos columnas de cinco a los lados del Lugar Santo (1 Reyes 7:49) Además de la evidente utilidad de iluminar el ambiente, simbolizaba la presencia de Dios en el lugar. Además de eso, sus lámparas eran alimentadas con aceite, simbolizaba la unción de Dios (Espíritu Santo) sobre nuestras vidas. La luz simbolizaba también la propia Palabra, la verdadera iluminación para la vida, indicando el camino hacia el Señor.

Figura 23. Candelabro de oro (Enlace judío)

Altar de incienso – En el altar que estaba al final del Lugar Santo, el oráculo (1 Reyes 7:49), se colocaban los inciensos, cuyos aromas de especias y otros perfumes dominaban la sala. Una simbología bastante fuerte para las súplicas, que nuevamente nos llevan a la figura del olor agradable que sube a los cielos en dirección al Señor. Allí los sacerdotes dirigían sus súplicas y la de sus fieles, ya que eran como intermediarios entre el pueblo y Dios. Hoy, gracias al sacrificio supremo de Cristo, hablamos directamente con el Padre ¡Gloria a Dios! (Apocalipsis 8:3-13)

Figura 24. Altar del incienso (Estudiospentecostales.com)

El velo – Separando el Santo Lugar del Santo de los Santos había un velo, un gran cortina con dos querubines bordados que era la única barrera. Solamente el sumo sacerdote entraba a través de él para conversar con Dios directamente. El simbolismo del velo es fuerte: aunque sea un material frágil, la única cosa que impedía que otros sacerdotes entraran allí era el respeto y el temor a Dios. También era un obstáculo para la vista. Los sacerdotes comunes, así como el pueblo, no entraban allí. Pero por medio de la oración que el sumo sacerdote llevaba, todos tenían su acceso indirecto al Padre. Un obstáculo frágil, fácil de superar para llegar a Dios, bastando para eso, orar (Marcos 15:38) Ese velo fue rasgado en dos de arriba abajo cuando Cristo murió, indicando un camino expedito para entrar a la presencia del Padre por todo aquel que así lo quisiera (Mateo 27:51).

Figura 25. El velo (Gracia más gracia)

El Arca de la Alianza – El Arca de la Alianza, después de habitar durante muchos años en el Tabernáculo, fue depositada en el Lugar Santísimo del gran templo de Salomón. Objeto sagrado solamente tocado por los sacerdotes y nunca por una persona común del pueblo, contenía otros objetos con un inmenso significado sagrado: la tablas de los Diez Mandamientos que Moisés labró orientado por Dios (la Palabra), un bocado del maná que fue dado como alimento al pueblo en el desierto por primera vez (la provisión de Dios) y la vara de Aarón que floreció (el reconocimiento de Dios sobre la autoridad conferida a alguien). Sobre el Arca estaba el Propiciatorio, la tapa del gran baúl, con dos imágenes de querubines frente a frente con las alas desplegadas. Entre los ángeles dorados, el sumo sacerdote debería focalizar la presencia de Dios, quien le hablaba (Éxodo 25:10-22) Hoy la presencia de Dios está con nosotros, con su pueblo, a través del Espíritu Santo que nos fue dado (Romanos 5:5)

Figura 26. El Arca del pacto (Aleteia)

Dios había expresado la idea de que habitaría entre los hombres en Éxodo 25:8. El santuario proporcionaba un centro visible para el culto del único Dios verdadero, acercaba a Dios a su pueblo y hacía que su presencia entre ellos fuese algo real. También esto constituía una protección contra la idolatría (Éxodo 29:43-45; Números 35:34) y un baluarte contra la adoración de los numerosos dioses de las naciones idólatras que le rodeaban contribuyendo a eliminar la costra idólatra que se apoderaba del pueblo debido a las tales.

La concepción judía del templo antiguo fue descrita magistralmente por el santo Esteban poco antes de su lapidación en Hechos 7:44-50:

Hechos 7:44 Tuvieron nuestros padres el tabernáculo del testimonio en el desierto, como había ordenado Dios cuando dijo a Moisés que lo hiciese conforme al modelo que había visto.
45 El cual, recibido a su vez por nuestros padres, lo introdujeron con Josué al tomar posesión de la tierra de los gentiles, a los cuales Dios arrojó de la presencia de nuestros padres, hasta los días de David. 
46 Este halló gracia delante de Dios, y pidió proveer tabernáculo para el Dios de Jacob.
47 Más Salomón le edificó casa;
48 si bien el Altísimo no habita en templos hechos de mano, como dice el profeta: 
49   El cielo es mi trono,
Y la tierra el estrado de mis pies. 
¿Qué casa me edificaréis? dice el Señor; 
¿O cuál es el lugar de mi reposo? 
50   ¿No hizo mi mano todas estas cosas?

De esa escritura podemos sacar las siguientes cuestiones:

1. Moisés construyó el tabernáculo de reunión, como Dios le ordenó.
2. Lo llevaron a Canaán con Josué al frente.
3. El rey David quiso construir una nueva morada par Dios, lo cual su hijo Salomón logró (1 Crónicas 17, 1 Reyes 6:1, 1 Crónicas 28:10-13, 19)
4. El propio Salomón, en el momento de la dedicación del templo (1 Reyes 8:27; 2 Crónicas 2:6), reconoce su incomprensión acerca de que un Dios que habita la eternidad (Isaías 40:12), decidiera establecer su morada en la tierra, en una casa como la que se le había construido. También los profetas apuntan a que el Señor está y no depende exclusivamente del templo. Isaías 32:14-15 y Salmo 51:10-11, reconocen al Espíritu de Dios, y David acepta que es habitado y guiado por Dios.
5. Pero, Dios no habita en casas construidas por los hombres (Isaías 66:1-2, Hechos 17:24)
6. Lo que comenzó como una tienda de campaña (tabernáculo), ahora fue un magnífico templo en Jerusalén.
7. Luego entonces Esteban señala un contraste con los versículos anteriores que hablan del tabernáculo y del templo como lugares donde Dios se encuentra con los hombres, de manera que esta escritura destaca el hecho de que Dios no mora en edificios fabricados por manos humanas.

En Hebreos 9:11-12, la palabra nos dice:

11 Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación, 
12 y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención.

¡Gloria a Dios! Cristo se presentó al mundo como Rey (Mateo 2:1-2) y sumo sacerdote (Hebreos 9:11) por el más amplio y perfecto tabernáculo no erigido por humanos, sino por el mismo Dios, sin intervención de todos los ritos que tanto el tabernáculo de reunión, como el templo de Salomón observaban para la remisión de los pecados del pueblo (Hebreos 9:1-10) El Señor entró una única vez al Lugar Santísimo para hacer notar que se había abierto un camino expedito para la redención de los hombres (Hebreos 9:12), los cuales ahora son redimidos por la sangre preciosa de un Cordero sin mancha ofrecido una sola vez (Hebreos 9:12), dando paso a un Nuevo Pacto (Hebreos 9:15-28) El Señor está construyendo su reino, la Iglesia, los llamados a salir del pecado, del mundo y de la carne (Mateo 16:18)

Un permanente contraste vemos en toda la Escritura acerca de este tema.  Isaías 57:15 nos recuerda magníficamente que Dios habita “en un lugar santo y sublime, pero también con el contrito y humilde de espíritu, para reanimar el espíritu de los humildes y alentar el corazón de los quebrantados”. Por un lado, hay un concepto profundísimo e invariable de la eternidad y grandeza de Dios y por otro lado, hay un concepto igualmente vívido que el infinito Jehová es un Dios que está muy próximo, cercano; que es amigo de la humanidad, que comulga con ella. El problema que Esteban pone de relieve con este repaso histórico es que los referentes espirituales de Israel se habían concentrado tanto en la verdad de que el Señor había prometido favorecer al templo con su presencia, que limitaban al Altísimo a este edificio; y lo que era peor, habían llegado a reverenciar más el edificio que a Aquel para quien había sido construido. Esto, de hecho, los incapacitó para reconocer y recibir a Dios “manifestado en carne” (1 Timoteo 3:16) cuando se encarnó y vivió entre ellos. Su culto estaba centralizado en el templo terrenal, pero Esteban trata de señalarles que el antiguo sistema simbólico ya había pasado, y que el propósito de Dios es construir un templo espiritual en el corazón de los hombres. San Pablo, que había escuchado esta defensa de Esteban y en cuyos pies habían puesto sus vestiduras (Hechos 7:58), empleó un argumento similar al hablar a los filósofos de Atenas (Hechos 17:24-25)

Así podemos afirmar que tanto el tabernáculo como el templo de Salomón son tipos de la Iglesia del NT. La presencia de Dios se hizo una realidad cuando el Verbo (Cristo) se hizo carne y habitó entre nosotros (Juan 1:14), trayendo el reinado sempiterno del cual hablara el profeta Isaías (9:6-7) Si antes la gloria divina se posaba sobre el Tabernáculo, es ahora Jesús en quien vemos al Padre (Juan 14:9; Colosenses 1:15). El Señor viajó allí para la fiesta de los tabernáculos (Juan 7:10), enseñó en el templo (Marcos 14:49), y utilizó su autoridad mesiánica para restaurar el decoro apropiado al encontrar el abuso de comerciantes y cambistas, llamando al templo “la casa de mi Padre” (Juan 2:16) Sin embargo, los cuatro Evangelios también registran la profecía de Jesús respecto a la destrucción venidera del templo en Jerusalén (Mateo 24:1-2), y en su conversación con la mujer samaritana, Jesús explica que la adoración al Padre no depende de lugar físico, sino que debe ser en Espíritu y en verdad (Juan 4:21-23) La noche antes de su muerte, en la Santa Cena, Jesús anunció la inauguración del nuevo pacto basado, no en la sangre de animales sacrificados en el Templo, sino en su propia sangre (Mateo 26:28) El día ha llegado, cuando Jesús renovó el santuario y la adoración, y esta acción fue el motivo para proceder oficialmente contra él, de una manera definitiva. Efectivamente, el templo le importaba a Jesús en tanto en cuanto lo llama “mi casa” y “la casa de mi Padre”. Luego, es más explícito al declarar que el templo de Dios es Él mismo (Juan 2:19) levantado por mano divina y es Cristo resucitado de los muertos. Es a través suyo que entramos en la presencia de Dios.

Las palabras de Jesús señalan el final de la adoración en un edificio como templo. Jesús instituyó un nuevo pacto bajo el cual Dios no habita entre su pueblo por medio de un edificio, sino que está en su pueblo por medio del Espíritu Santo. El culto divino no se restringiría a determinada localidad o por determinada raza o pueblo. Esto es posible gracias a la reconciliación que Cristo efectuara en la cruz y a su resurrección (Mateo 12:6)

En las palabras de Jesús vemos cómo Dios estaba determinado a edificar otro templo, un templo del nuevo pacto, Su Iglesia. El plan divino era infinitamente mejor que bellas rocas talladas por hombres. Su templo real estaría hecho de seres humanos, la Iglesia, su Reino. El culto del templo era, por diseño, una institución temporal en el plan divino que prefiguró el trabajo futuro de Cristo, pero nunca podría proveer una completa reconciliación entre Dios y hombre (Hebreos 10:4). Por medio de la obra redentora cumplida de Cristo, el velo, y en efecto toda la sistema de culto del Templo, había quedado obsoleto, y ahora se invita a los creyentes verdaderos a acercarse “confiadamente al trono de la gracia” (Hebreos 4:14-16) Por ello fue de gran significación el rasgado del velo del templo que separaba el Lugar Santo del Santísimo (Mateo 27:51, Marcos 15:38; Lucas 23:45)

Jesús nos anuncia la llegada del Espíritu Santo quien supera la limitación física y temporal de la persona de Cristo (Juan 16:7), quien vive en nosotros y nos guía a toda la verdad (Juan 16:13-15) He aquí la intención del Hijo y del Padre a través del Espíritu Santo: hacer su morada en nosotros.

Es por ello que el Apóstol de los gentiles dice con claridad que somos el templo del Dios viviente, así el Cristo resucitado y ascendido habita dentro de la comunidad de creyentes verdaderos (la Iglesia) por medio del Espíritu Santo. Es esta comunidad de verdaderos creyentes quienes son un “templo espiritual” que reemplaza el templo arquitectónico del Antiguo Testamento. Pablo lo reflejará de la siguiente manera en varias oportunidades (Hechos 17:24-25, 1 Corintios 3,16-17, 6:19, 2 Corintios 6:16-17; 7:1)

La dimensión del templo en la Iglesia (no iglesia como edificio sino como reunión de personas redimidas) es reflejada también por Pablo en su carta a Timoteo en 1 Timoteo 3:15:

1 Timoteo 3:15 para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad.

En esta cita maravillosa se subraya el papel de la Iglesia como depositaria, guarda y defensora que Dios ha confiado para transmitir su revelación. El apóstol Pedro lo describe a cristianos individuales como “piedras vivas” de los cuales Dios está construyendo una “casa espiritual” (1 Pedro 2:5) Aquí está el templo verdadero sin paredes de la fe del Nuevo Testamento. Esta imagen recuerda la vocación de la Iglesia: ser un lugar espiritual privilegiado en el que Dios actúa, se manifiesta y es adorado. Ella es el “cuerpo de Cristo” (Efesios 1:22-23; 4:11-16; Colosenses 1:18; 2:19; 1 Corintios 12:27), imagen que muestra la unidad orgánica de la iglesia, así como su relación estrecha y vital con Cristo, su Cabeza gloriosa. La Biblia describe a la Iglesia como una realidad de origen divino y la llama “La Iglesia de Dios” (Hechos 20:28; 1 Corintios 1:2) Y no hay otra, es única, perfecta, hermosa.

La Iglesia apostólica, de vocación universal, rompió las barreras nacionales y étnicas de Israel. Así siguió el plan original de Dios (Efesios 3:1-10) y la orden de Jesús: “Id y haced discípulos de todas las naciones” (Mateo 28:19)

Conclusión

Es sencilla. El tabernáculo y el templo del AT son un tipo de la Iglesia del Nuevo Testamento. Se trata de una plan escondido desde la eternidad por el Padre Celestial de reunir todas las cosas en Cristo y atraer hacia sí a los gentiles además de a los judíos para formar un nuevo y espiritual pueblo que le sirviese, y fuera embajada de Él en l tierra para también atraer a otros a su amor y misericordia.

Efesios 1:9…dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo, 
10 de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.

Efesios 2:14 Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, 
15 aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, 
16 y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando en ella las enemistades. 
17 Y vino y anunció las buenas nuevas de paz a vosotros que estabais lejos, y a los que estaban cerca;
18 porque por medio de él los unos y los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre. 
19 Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios…

CAPÍTULO 4. CRISTO REINA AHORA

4.1.  Análisis de Isaías 9:5-7

El texto de Isaías 9:5-7 arroja mucha luz para la interpretación correcta de que Cristo reina ahora, y no tenemos que esperar un futuro para el cumplimiento de las profecías que nítidamente explican esta verdad, como tratan de contradecir las actuales enseñanzas heréticas.

Isaías 9:6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 
7 Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto.

Este texto trae a colación varias verdades que enumeramos:

1. Cuando el profeta dice nos, apunta a la relación estrecha de Cristo con la humanidad en la salvación del pecado del hombre. El nació para la raza humana, descendió y de gloria nos llenó, su gracia hizo que pudiésemos ver nuestra condición, y renacer a una vida nueva. Esto es claro para su comprensión en el hecho que el cumplimiento del reinado de Cristo sucedería cuando un niño naciera, y nos fuera dado.
2. El Padre dio a su Hijo por nosotros, y puso el principado sobre sus hombros como título eterno de verdadera dignidad.
3. Él es Admirable, o sea que causa admiración o es digno de admiración, brillante, lúcido, sobresaliente en todos los aspectos de su vida: su concepción, nacimiento, predicación, milagros, sufrimientos, muerte, resurrección y ascensión.
4. Él es Consejero, o sea que aconseja o al que se le pide consejo, asesor, mentor, guía, maestro, tanto en la exposición correcta de la ley, demostrando su origen, objetivo, naturaleza y propósitos, como en la exposición de su Reino. Siempre está delante del Padre en favor de los hombres, de tal manera que cuando el Padre mira y considera, siempre ve a Cristo, quien nos sirve como Mediador perfecto (1 Timoteo 2:5)
5. Él es Dios fuerte como veíamos en Juan 1:1.
6. Él es Padre Eterno, el origen de todas las cosas, la causa de la existencia o vida, el Padre de los espíritus.
7. Él es el Príncipe de paz, una paz que solo él puede dar al hombre (Juan 14:27-28), en medio de tanta guerra espiritual.
8. La extensión de su imperio no tiene límites, porque su reinado es infinito, así como la paz que trae al corazón del hombre, no como ausencia de guerra, sino como algo interior que no se puede explicar con palabras, es necesario sentirlo.
9. La mención al rey David ya vimos en epígrafes anteriores que es un tipo de Cristo.
10. La justicia y juicio de Cristo son características intrínsecas del reinado del Señor obrando y juzgando con respeto a la verdad y dando a cada uno lo que le corresponde. No hay otro como Él. Amén.

Otra escritura valedera para confirmar esta verdad se halla en las palabras que el ángel expresara a María en la gran anunciación de Lucas 1:30-33:

Lucas 1:30 Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. 
31 Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS.
32 Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 
33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.

Esta cita apunta a que Cristo sería llamado Hijo del Altísimo, y que su reino sería establecido para siempre, es decir que sería eterno. Si bien el reinado de David tuvo su fin, así como todos los reinos de la tierra, el reino de Cristo triunfa sobre el infierno y la muerte (1 Corintios 15:25-28), su dominio no tiene fin. He aquí la gloria, extensión y perpetuidad del Reino del Señor, el cual en su manifestación prístina radica en su Iglesia (Mateo 16:18, Colosenses 1:18), pero que finalmente será un reino por la eternidad en los cielos.

4.2. El Reino y el Primer Advenimiento de Cristo

La identificación, sobre todo para los judíos, de que Cristo es rey es precisamente su asiento en el trono de David, rey muy famoso y querido entre ellos, al cual Dios exaltó grandemente (1 Samuel 13:14, Hechos 13:22-23, Mateo 27:42) Ellos comprenderían exactamente la misión y oficio del Señor, pero como dice la Palabra, a los suyo vino (a ser Rey sobre todo y todos), pero los suyos (judíos) no le recibieron, pero a los que le recibieron, como es todo aquel que cree en su nombre, le dio el poder de ser llamados hijos de Dios (Juan 1:11-13) ¡Qué privilegio pertenecer a ese tipo especial de Reino: el de Cristo! Nosotros, los gentiles, que estábamos lejos de Dios, nos hizo cercanos, y con El reinamos vencedores (Efesios 2:13-14)

Mateo 27:41 De esta manera también los principales sacerdotes, escarneciéndole con los escribas y los fariseos y los ancianos, decían: 
42 A otros salvó, a sí mismo no se puede salvar; si es el Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, y creeremos en él. 
43 Confió en Dios; líbrele ahora si le quiere; porque ha dicho: Soy Hijo de Dios.

Así que Cristo principió su Reino sobre el trono de David, su tipo, durante los días de su encarnación. Nacido rey (Mateo 2:1-2), y revestido de toda autoridad evidenciada en su ministerio, comenzó a dar pautas a seguir a los hombres (Mateo 5,6 y 7), de tal manera que el pueblo se vio obligado a expresar que su predicación y sus hechos no eran iguales a los hipócritas fariseos y escribas, sino que había autoridad en sus enseñanzas y actitudes (Mateo 7:28-29)

Pedro expresó estas ideas de forma condensada en Hechos 2:29-36.

Hechos 2:29 Varones hermanos, se os puede decir libremente del patriarca David, que murió y fue sepultado, y su sepulcro está con nosotros hasta el día de hoy. 
30 Pero siendo profeta, y sabiendo que con juramento Dios le había jurado que de su descendencia, en cuanto a la carne, levantaría al Cristo para que se sentase en su trono,
31 viéndolo antes, habló de la resurrección de Cristo, que su alma no fue dejada en el Hades, ni su carne vio corrupción. 
32 A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos. 
33 Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís. 
34 Porque David no subió a los cielos; pero él mismo dice: 
Dijo el Señor a mi Señor: 
Siéntate a mi diestra, 
35 Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.
36 Sepa, pues, ciertísimamente toda la casa de Israel, que a este Jesús a quien vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo.

1. El rey David murió y fue sepultado, así que su reino no podía ser eterno.
2. Dios le había jurado que de su descendencia en la carne levantaría al Cristo, para que se sentase en su trono, de forma que fue constituido un tipo de Jesús.
3. David habló del acto de resurrección del Señor, lo cual confirmó que Su Señorío es eterno.
4. La resurrección del Señor fue un acto el cual tiene muchos testigos y es la base de la victoria del hombre salvo por su sangre y vencedor sobre el pecado, la carne y el mundo.
5. El Espíritu Santo es la agencia actual de Dios entre nosotros que nos permite conocer siempre la verdad (Juan 16:13)
6. David reconoció el Señorío de Cristo sobre todas las cosas.
7. Dios le hizo (a Jesús) Señor y Cristo[17], a pesar de que había sido crucificado, pero Él venció la muerte con poder y al cielo se exaltó.

Volviendo a la escritura de Hechos 15:13-17:

13 Y cuando ellos callaron, Jacobo respondió diciendo: Varones hermanos, oídme. 
14 Simón ha contado cómo Dios visitó por primera vez a los gentiles, para tomar de ellos pueblo para su nombre. 
15 Y con esto concuerdan las palabras de los profetas, como está escrito: 
16 Después de esto volveré 
Y reedificaré el tabernáculo de David, que está caído; 
Y repararé sus ruinas, 
Y lo volveré a levantar,
17 Para que el resto de los hombres busque al Señor, 
Y todos los gentiles, sobre los cuales es invocado mi nombre, 
18 Dice el Señor, que hace conocer todo esto desde tiempos antiguos.

Esta escritura nos habla del amor de Dios al extenderlo hacia los gentiles (Efesios 2:11-22), y por ello el templo fue reconstruido, con un nuevo pueblo, gentiles y judíos, o sea la Iglesia de Dios. Así todo hombre que quiera buscar a Dios tiene la maravillosa oportunidad de hacerlo ya que Dios extendió su misericordia a todos. Es aquí donde se reitera el reinado eterno del Señor Jesucristo sobre el trono de David en esta dispensación; cuando judíos y gentiles pueden disfrutar juntos de las bendiciones del Señor.

Figura 27. Extensión mundial del Reino Triunfante de Cristo (Wikipedia y el autor)

4.3 Las parábolas[18] del Reino

Desde los tiempos de Jesús, la gente ha estado tratando de comprender el Reino de Dios. Jesús mismo lo enseñó con una serie de parábolas, llamadas «las siete parábolas del Reino de Dios». Estas parábolas se encuentran en los Evangelios sinópticos de Mateo, Marcos y Lucas.

En el Sermón de la Montaña, por ejemplo, Jesús trata explícitamente la ética del Reino de Dios; así como en sus parábolas enseñó los principios que caracterizan la naturaleza de ese reino. La mayoría de las parábolas de Jesús se introducen con el objetivo de revelar algún aspecto del Reino de Dios (“Y el Reino de Dios es como […]”) Ver Figura 28.

Las siete parábolas del Reino de Dios son:

1. La parábola del sembrador (Mateo 13:1-9, Marcos 4:1-9, Lucas 8:4-18)
2. La parábola del trigo y la cizaña (Mateo 13:24-30)
3. La parábola del grano de mostaza (Mateo 13:31-32, Lucas 13:18-19)
4. La parábola de la levadura (Mateo 13:33, Lucas 13:20-21)
5. La parábola del tesoro escondido (Mateo 13:44)
6. La parábola de la perla de gran precio (Mateo 13:45-46)
7. La parábola de la red (Mateo 13:47-50)

Las Parábolas sobre el Reino de Dios en la Biblia ciertamente fueron enseñanzas dadas por Jesús a todos sus seguidores, y con las que Él manifestaba el significado de lo que Dios haría en la vida de las personas a quienes se les revelaría la llegada del Reino de los cielos.

Cada una de estas enseñanzas dadas por el Rey tiene mensajes para el crecimiento y madurez personal y comunitario, que aun en este tiempo funcionan para todos los creyentes en Dios, quienes deben escudriñar estos mensajes que Jesús trajo a la tierra directamente del cielo y que enseñan tanto respecto a las características del Reino de Dios.

Figura 28. Jesús enseña las Parábolas del Reino (Wikipedia)

Cuando se escudriñan las Sagradas Escrituras se puede ver como la palabra parábola aparece en 36 oportunidades en los libros de Mateo, Marcos, Lucas y Juan, en el que se refieren a esas siete parábolas que Jesús habla sobre el Reino de Dios.

En la revisión de cada una de estas siete parábolas se puede describir la historia de la Iglesia desde el principio, ya que Jesús fue quien inició la Iglesia (Mateo 16:18) a través de su ministerio sembrando la Palabra a través de su recorrido por cada una de las localidades que pudo visitar y expandirse con sus discípulos.

Entre estas narraciones revisten importancia particular las que enuncian y nos permiten descubrir el carácter de desarrollo histórico y espiritual que es propio de la Iglesia según el proyecto de su mismo Fundador. Desde el principio hasta el fin, la existencia de la Iglesia se inscribe en la admirable perspectiva escatológica del Reino de Dios, y su historia se despliega desde el primero hasta el último día.

Jesús dice a los suyos:

Marcos 4:11a A vosotros se os ha dado el misterio del reino de Dios

Los instruye acerca de este misterio y, al mismo tiempo, con su palabra y su obra:

 Lucas 22:29 Yo, pues, os asigno un reino, como mi Padre me lo asignó a mí,

Esta preparación se lleva a cabo incluso después de su resurrección. En efecto, leemos en los Hechos de los Apóstoles que se les apareció durante cuarenta días y les hablaba acerca de lo referente al reino de Dios (Hechos 1:3) hasta el día en que fue elevado al cielo y se sentó a la diestra de Dios (Marcos 16:19) Eran las últimas instrucciones y disposiciones para los Apóstoles sobre lo que debían hacer después de la Ascensión y Pentecostés, a fin de que comenzara concretamente el Reino de Dios en los orígenes de la Iglesia.

No es posible comprender el origen de la Iglesia sin tener en cuenta todo lo que Jesús predicó y realizó (Hechos 1:1) Precisamente de este tema habló a sus discípulos, y nos ha dejado su enseñanza fundamental en las parábolas del Reino de Dios.

Marcos 4:26 Decía además: Así es el reino de Dios, como cuando un hombre echa semilla en la tierra; 
27 y duerme y se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y crece sin que él sepa cómo. 
28 Porque de suyo lleva fruto la tierra, primero hierba, luego espiga, después grano lleno en la espiga; 
29 y cuando el fruto está maduro, en seguida se mete la hoz, porque la siega ha llegado.

Por tanto, el Reino de Dios crece aquí en la tierra, en la historia de la humanidad, en virtud de una siembra inicial, es decir, de una fundación que viene del mismo Dios, y luego de este impulso inicial divino la Iglesia se sigue cultivando a lo largo de los siglos. En la acción de Dios en relación con el Reino también está presente la hoz del sacrificio: el desarrollo del Reino no se realiza sin sufrimiento. Éste es el sentido de la parábola que narra el evangelio de San Marcos.

1. Parábola del Sembrador

En esta parábola del Sembrador Jesús explica como Él se convierte en ese Sembrador, quien entrega esa buena semilla que es la Palabra de Dios, y es sembrada en un campo amplio que es toda la tierra, y trae cuatro resultados o cuatro tipos de oyentes (Tabla 4)

No. Oyente	Destino de la semilla	Explicación de Cristo
1	Junto al camino	Venida del malo, arrebatando lo que fue sembrado en el corazón.
2	Pedregales	Recepción primaria de la Palabra con gozo, pero no hay raíz, pues al venir las pruebas, aflicciones y persecución por la Palabra, tropieza.
3	Entre espinos	Oye la Palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas la ahogan y esta se hace infructuosa en su corazón.
4	Buena tierra	El que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.

Es por eso que Jesús dijo que los frutos hablarían del creyente (Mateo 7:15-20)

El crecimiento del reino de Dios se presenta ciertamente como fruto de la acción del Sembrador; pero la siembra produce fruto en relación con el terreno y con las condiciones climáticas: una ciento, otra sesenta, otra treinta (Mateo 13:8) El terreno representa la disponibilidad interior de los hombres. Por consiguiente, a juicio de Jesús, también el hombre condiciona el crecimiento del Reino de Dios. La voluntad libre del hombre es responsable de este crecimiento. Por eso Jesús recomienda que todos oren: Venga tu Reino. En sus palabras se transparenta la dimensión temporal y escatológica del reino de Dios.

2. Parábola del Trigo y la Cizaña

A través de esta parábola Jesús enseña como se siembra una semilla la cual es la Palabra de Dios, pero el enemigo quiere hacerla improductiva en el corazón del hombre, y empieza a sembrar odio, mentiras, discordia y divisiones que vienen a perjudicar el crecimiento del verdadero creyente en Dios.

Todo esto se refiere a que al mismo tiempo en que crece el trigo, también lo hace la cizaña, la cual al final del tiempo será levantada, pero el trigo prevalecerá porque es edificado en Cristo Jesús, haciendo evidente que esa cizaña no se mantendrá de pie ante el Reino de Dios.

Es importante hacer notar que la espiga de trigo y la de la cizaña son parecidas, lo que humanamente no permite muchas veces identificar el malo del bueno.

Esta parábola explica la coexistencia y, con frecuencia, el entrelazamiento del bien y del mal en el mundo, en nuestra vida y en la misma historia de la Iglesia. Jesús nos enseña a ver las cosas con realismo cristiano y a afrontar cada problema con claridad de principios, pero también con prudencia y paciencia. Esto supone una visión transcendente de la historia, en la que se sabe que todo pertenece a Dios y que todo resultado final es obra de su Providencia. Como quiera que sea, no se nos oculta aquí el destino final de dimensión escatológica de los buenos y los malos, lo que está simbolizado por la recogida del grano en el granero (cielo) y la quema de la cizaña (infierno)

3. Parábola de la Semilla de Mostaza

A través de esta parábola se hace evidente como se iniciaba la Iglesia y de como la fe de una persona al ser sustentada en la roca que es Cristo Jesús, podría dar un árbol con grandes frutos.

Es por ello que se puede decir que a través de esta semilla de mostaza se convierte en un gran árbol, es decir que la iglesia nacería y se expandiría por todo el mundo, a través de la Palabra dada por Jesús que se multiplicó a través de cada uno de sus discípulos.

Se trata del crecimiento del Reino en sentido extensivo.

4. Parábola de la Levadura

La parábola de la Levadura se viene a deducir como que no se puede subestimar el potencial de algo pequeño, ya que se hace una similitud de como el Reino de los cielos al llegar a un lugar produce crecimiento y transformación, así como lo hace la levadura que agranda la masa.

Es una metáfora sobre como el Espíritu Santo empieza a obrar en la vida del creyente, trayendo una gran transformación desde adentro hacia afuera, activando los dones espirituales y ver tangible el fruto del Espíritu, y así poder ver los cambios sustanciales en la vida de una persona.

Muestra su crecimiento en sentido intensivo o cualitativo.

5. Parábola del Tesoro Escondido

Esta parábola se refiere a que cuando una persona se encuentra con el Reino de los cielos en su vida deja a un lado todo aquello que lo desvía de su propósito delante de Dios, y se desprende de aquellas cosas que son estorbo para poder tener esas bendiciones que Dios promete a sus hijos.

Esto se refiere a que ese tesoro está escondido en un campo que en este caso viene a ser el mundo, y ese tesoro se está refiriendo a esa luz que es la Palabra y enseñanza de Dios, pero muchos no la encuentran porque prefieren seguir la rutina del pecado que es común en el mundo.

6. Parábola de la Perla de Gran Precio

La parábola de la perla de gran precio es la evidencia de como un mercader está buscando una Perla Preciosa, y al encontrarla vende todo lo que tiene para obtenerla, pues ve en ella la oportunidad de obtener todo lo que desea.

Esta parábola es un símil de lo que ocurre cuando una persona conoce el Reino de los cielos, y esto lo tiene al recibir una palabra que le revela la salvación eterna, y al entender ese mensaje decide tenerla, y dejar todo aquello que puede ser impedimento en tener ese gran regalo tan valioso como es una eternidad delante de Dios.

7. Parábola de la Red

Esta última parábola se está refiriendo a como será el fin de los tiempos, ya que Jesús en ella está ordenando que la Iglesia debe lanzar la red en el mar y recoger todos los peces que pueda, y Dios en ese caminar transformará las vidas de las personas, para luego apartar aquellos que serán aprobados.

En esta enseñanza se ve como serán recogidos todos esos buenos peces que viene a representar a esa Iglesia que está limpia, sin mancha y que podrá llegar a la eternidad con el Padre Celestial. Luego de ello están esos peces malos que son recogidos y serán juzgados por el Señor, y que tendrá un destino eterno en el infierno.

Conclusión

Las palabras dirigidas a Pedro en Cesarea de Filipo y que luego son repetidas a los demás discípulos en Mateo 18:18 se inscriben en el ámbito de la predicación sobre el Reino. En efecto, le dice:

Mateo 16:17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. 
18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. 
19 Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.

Es una promesa que en ese momento se formula con el verbo en futuro, edificaré, porque la fundación definitiva del Reino de Dios en este mundo todavía tenía que realizarse a través del sacrificio de la cruz y la victoria de la resurrección. Después de este hecho, Pedro y los demás Apóstoles tendrán viva conciencia de su vocación de anunciar las alabanzas de Aquel que les ha llamado de las tinieblas a su luz admirable (1 Pedro 2:9) Al mismo tiempo, todos tendrán también conciencia de la verdad que brota de la parábola del sembrador, es decir, que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios que hace crecer, como escribió San Pablo (1 Corintios 3:7)

Juan da voz a esta misma conciencia del Reino cuando afirma en el canto al Cordero: porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación; y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y reinaremos sobre la tierra.  (Apocalipsis 5: 9-10) El apóstol Pedro precisa que nosotros también, como piedras vivas, debemos ser edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo  (1 Pedro 2:5) Todas éstas son expresiones de la verdad aprendida de Jesús quien, en las parábolas del sembrador y la semilla, del trigo y la cizaña, y del grano de mostaza que se siembra y luego se con vierte en un árbol, hablaba del Reino de Dios que, bajo la acción del Espíritu Santo, crece en las almas gracias a la fuerza vital que deriva de su muerte y su resurrección; un Reino que crecerá hasta el tiempo que Dios mismo previó desde la eternidad.

La Figura 29 muestra un resumen de las parábolas del Reino.

Figura 29. Parábolas del Reino, dichas por Jesús (Alamy, Escritor)

  CAPÍTULO 5. UN TRONO ETERNO

  5.1   El Israel literal

Hay una pregunta crucial que muchos hoy se formulan respecto a si el pueblo actual de Israel aún es el pueblo escogido de Dios, y hasta muchos defienden esta posibilidad como una verdad incuestionable. Ciertamente, la adopción, la gloria, el viejo pacto, la promulgación de la ley escrita en tablas de piedra, el culto, las promesas, los patriarcas, y de donde vino el Señor Jesucristo (Romanos 9:4-5) son patrimonio del Israel terrenal, a quien Dios escogió como su pueblo en el pasado. Hoy ya ese pueblo en su gran mayoría ciertamente se ha olvidado del Señor que les rescató y no aceptan su sacrificio, su señorío y su reinado (porque no han entendido aun el misterio escondido desde la eternidad acerca del Reino de Dios) aunque en realidad ha quedado un remanente santo (Joel 2:32) que le adora. Es por ello que el Diosde Pactos dio por obsoleto el primero, y dio paso al segundo establecido sobre mejores promesas (Hebreos 8:6; 9).

En la dispensación presente Cristo edificó Su Iglesia, heredera de ese nuevo pacto, el cual fue establecido a través de su sangre, y que dispuso habitación para todo aquel que en el crea (San Juan 14:6), los cuales en otro tiempo no eran pueblo, y que ahora han sido constituidos nuevo pueblo de Dios (1 Pedro 2:9-10), junto con los judíos que aceptan su sacrificio.

Datos sobre el Israel literal

• Israel fue el Pueblo escogido por Dios para cumplir Su Voluntad, y para que este le sirviera. Dios prometió a los patriarcas que levantaría un pueblo que le obedeciera (Génesis 12:1-3, Éxodo 19:5-6)
• Le dio la ley para que esta fuera de obligatorio cumplimiento por ese pueblo (Éxodo 20:2-17) El pueblo viviendo bajo la ley en cuantiosas ocasiones la desobedeció trayendo en múltiples ocasiones la ira de Dios (Isaías 48:8)
• Les dio la buena tierra de Canaán para que la habitasen (Josué 1:2-4)
• Siempre Dios fue muy celoso con su pueblo, de tal forma que el quebrantamiento de la ley era delito muy grave delante del Señor, aunque fuera en un solo punto (Deuteronomio 4:24)
• Les levantó jueces, sacerdotes, profetas y hasta reyes (como las demás naciones) para que les gobernasen (Jueces, 1 y 2 Samuel, 1 y 2 Reyes, 1 y 2 Crónicas.
• Permanecieron como una sola nación hasta que el reino primero unido, fue dividido en Judá e Israel (1 y 2 Samuel, 1 y 2 Reyes)
• Les dio grandes victorias sobre enemigos, incluso más poderosos que ellos (Éxodo 14)
• Lo desechó al ver que era pueblo duro de cerviz (Éxodo 32:9), aunque siempre quedó un remanente santo (Isaías 5:24) que le siguió obedeciendo.
• Extendió su amor para el resto de los gentiles y les prometió entrar en su amor haciendo de dos pueblos, uno solo (Iglesia del Nuevo Testamento) (Efesios 2:14)
• El Señor vendrá otra vez a este mundo a buscar a UN SOLO PUEBLO, NO DOS (Mateo 8:11; 24:11; Lucas 13:29)

Viejo Pacto, Éxodo 19 y 24

1. Dios encomendó al pueblo de Israel terreno a cumplir con un grupo de leyes. Estaba lleno de rituales, restricciones y órdenes, y el pueblo debió prometer solemnemente su cumplimiento por sus obras (Éxodo 24:3)

Este pacto es una demanda que se hizo al pueblo desde afuera (imposición). El pueblo tenía la obligación de cumplir so pena de desagrado de Dios. Era algo de fuera hacia adentro del hombre. La imposición de tales reglas fue la pesada motivación en el cumplimiento del Pacto (Deuteronomio 4:13)

2. La primera manifestación del pacto fue el poder de cada uno para cumplir con el mandato (Gálatas 3:10-12) Se necesitaba de la constancia y fuerza moral del hombre para cumplir con la Ley de Dios. Ellos debían actuar y suplir motivación y energía propias. Esta es una comprometida descripción del Pacto: “Todo viniendo de ellos”. Es decir, “ellos intentando hacer algo por Dios” (Éxodo 24:7)

3. El Pacto descansa sobre la plataforma de decir sí a esa imposición. Es una cuestión del hombre el vencer para no faltarle a Dios.

NOTA: Ese fue el Pacto en acción. El aprender a caminar con una motivación de imposición y plena obediencia estricta como un deber ineludible, so pena de castigo divino.

Nuevo pacto, (Jeremías 31:31, 33-34, Hebreos 8:8-13)

1. Dios va a hacer lo que la gente misma nunca pudo hacer. A pesar de todo su fracaso, les va a restaurar a través de un nuevo proceso o pacto (V31). Dios va a cambiar la motivación de la vida de una persona, para que esta venga desde dentro en vez de desde fuera (V33).

El “Nuevo Pacto” es algo puesto dentro de nosotros. Amor es la motivación. El responder en amor por Dios, y por lo que ya ha hecho en nuestra vida y corazón, esa es una nueva motivación.

2. La segunda manifestación es un nuevo poder (V33). Dios mismo es la fuerza de la vida del hombre. El suplirá el poder para actuar. Ellos son los que actúan; Él es el que suple. Esta es una bella descripción del Nuevo Pacto: “Todo viniendo de Dios; nada viniendo de mí”. No “yo intentando hacer algo por Dios”, sino “Dios haciendo algo para mí, por medio de mí, en todo lo que hago”. Ese es el nuevo poder.

3. Una nueva familia (V34): Que podamos conocerle mejor, ser como Él. Los cristianos aunque no se hayan conocido previamente, comparten la misma vida, la de Cristo (Lucas 22:20, 1 Corintios 11:25)

4. El Nuevo Pacto descansa sobre esta gran plataforma (V34). Es así como Dios propone ganar esta batalla. Cuando la Ley falla y no podemos responder a esa imposición, Dios no nos echa en cara nuestro fracaso. Su amor estará con nosotros y nos sostendrá. Él es por nosotros, y transformará todas las dificultades por las que estamos pasando para nuestra ventaja, para que nos convierta en gente transformada.

NOTA: Ese es el Nuevo Pacto en acción. Al aprender a caminar en dependencia sobre una nueva motivación y un nuevo poder, en una nueva relación los unos con los otros, descansando sobre el perdón de Dios, descubrimos que están pasando cosas maravillosas en nuestra vida. Ver Figura 30.

Figura 30. Extensión del Reino de Cristo a todos los hombres (Wikipedia, El Autor)

Muchos toman la cita de Jeremías 31:36-37 para asegurar que Dios no ha desechado a la nación terrenal de Israel y que permanece fiel a las antiguas promesas. Un verso por sí solo no puede extraerse del contexto, además debe comprobarse con otros escritos para establecer una verdad bíblica. Por ello se deben buscar otras citas que aclaren este punto:

• El pueblo antiguo de Israel traspasó el pacto que hizo Dios con ellos) Isaías 24:5; Jeremías 34:18; Oseas 6:7, 8:1; Zacarías 12:10; Éxodo 32; Números 13) No quiere decir que todos los que habitan ese país, antiguamente escogido por Dios, no son pueblo de Él. Permanecen allí personas que han abrazado el sacrificio de Cristo (remanente) (2 Crónicas 34:21, Esdras 9:8,13-15) llevado a cabo para llamar a otro pueblo (gentil) (Mateo 10:6; 15:24; Lucas 15:4; Juan 10:16, Efesios 2:11-22) a Su amor.
• El pacto que estableció con ese antiguo pueblo era débil para salvar, tenía limitaciones (figura del que vendría después) y fue abrogado para dar paso al segundo (esencia). Luego ese pacto nuevo, constituido para todas las naciones, no excluye al Israel terreno. Los israelitas de allí deberán creer en el Señor Jesucristo para ser salvos. Aunque ellos eran pueblo de Dios, el plan de Dios cubrió mayor área terrenal y espiritual a través de Cristo que no murió en vano. También lo hizo por ellos (Juan 3:16)
• El reino de Cristo es espiritual (Juan 18:36; Rom. 14:17). No son necesarios tanques de guerra, municiones, aviones de combate, infantería moderna para conquistar por amor a un mundo perdido en el pecado(Juan 3:16)
• Israel actual es una entidad política, no espiritual. Las victorias militares de Israel en el siglo pasado (XX) se debieron a su pericia, organización y arrojo en el combate, además, debido a la voluntad de Dios que hace y permite lo que Él quiere (Salmo 24:1)
• El profeta decididamente está hablando aquí en símbolos porque Dios ya no tiene hijos de sangre y carne, sino de la promesa (Juan 1:11-13) Así que al hablar de Israel, es el espiritual (Gálatas 6:16)
• Las promesas dadas a Israel terrenal eran condicionales (Deuteronomio 28:1-2, 62-63)
• Israel desechó al Señor Jesucristo (Mateo 21:33-41, Mateo 22:1-14, Lucas 19:41-44, Juan 1:11-13) Cristo predijo la destrucción de Jerusalén, el templo y los sacrificios y así sucedió tras la invasión del General Tito en 70 d.C. (Mateo 24:1-2)
• Las promesas se cumplen hoy en el Israel espiritual que es la Iglesia de Dios (Hebreos 8, Romanos 9-11)
• No hay diferencia entre judíos y gentiles (Hechos 10:34-35, Efesios 2:11-22) No hay preferencia entre judíos y palestinos. Ver Figura 31 que muestra la defensa de Pedro delante de los apóstoles  y hermanos de la Iglesia (Hechos 11)

Figura 31. Pedro ante el Concilio de Jerusalén (Wikipedia y Autor)

  5.2  El Misterio escondido

Analicemos ahora Efesios 3:1-9 a fin de establecer un misterio que había estado escondido desde la eternidad, pero que ahora ha sido declarado al Apóstol de los gentiles por revelación:

1 Por esta causa yo Pablo, prisionero de Cristo Jesús por vosotros los gentiles; 
2 si es que habéis oído de la administración de la gracia de Dios que me fue dada para con vosotros; 
3 que por revelación me fue declarado el misterio, como antes lo he escrito brevemente, 
4 leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo, 
5 misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de los hombres, como ahora es revelado a sus santos apóstoles y profetas por el Espíritu: 
6 que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio,
7 del cual yo fui hecho ministro por el don de la gracia de Dios que me ha sido dado según la operación de su poder. 
8 A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo, 
9 y de aclarar a todos cuál sea la dispensación del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas; 
10 para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales,

1. En primer lugar Pablo aclara que dado la misión grande que recibiera del mismo Señor Jesús en el camino a Damasco cuando se disponía a perseguir a la Iglesia de Dios (Hechos 9:15), y que ahora está preso en cadenas debido a la predicación del mismo Evangelio que antes persiguió, tenía la autoridad, como Ministro por el don de Dios, para ser depositario del misterio de Cristo, que le fue revelado para anunciarlo a los hombres.
2. El misterio no había sido revelado antes pues no era el tiempo de Dios (kairos), pero ahora Dios lo revela a través del apóstol a sus santos profetas y apóstoles a través del Espíritu Santo (Juan 14:26; 16:13, Efesios 2:20, Colosenses 1:24-29)
3. El misterio escondido en los rincones de la eternidad lo hemos señalado en rojitas y es: que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio. O sea que Dios ha querido en su amor y misericordia, hacer a los gentiles (no judíos) partícipes junto a los judíos de la herencia en gloria y la familia de Dios en el Espíritu (Efesios2:15), manifestada por la gracia del Señor Jesucristo, cuya sangre derramada es capaz de limpiar los pecados de toda la raza humana. Esto no era muy comprensible para el pueblo judío que creían en que todo lo concerniente a Dios y sus caminos solo pertenecían a su pueblo, pero, ¡gloria a Dios!, Él estaba edificando un Reinado tan abarcador que puede alcanzar a todos los hombres que deseen integrar la Iglesia de Dios, actual depositaria de las promesas del Señor donde el Reino de Cristo es una bendita realidad presente. Pablo hace un resumen del misterio en una manera triple:
4. Gentiles coherederos con los judíos.- Comparten con los judíos la misma herencia espiritual que incluye todos los beneficios del pacto de gracia y los pilares de la salvación eterna: adopción, justificación, redención, reconciliación, regeneración, propiciación y santificación. Para entender esta gloriosa herencia se requiere fe y ayuda de Dios, y así el alma se eleva a los confines eternos del cielo.
5. Mismo cuerpo.- Se trata de la Iglesia de Dios. Los gentiles están incorporados al cuerpo de Cristo, que es la Iglesia (Colosenses 1:18), o sea están ambos pueblos sobre la misma base, en lo que toca a compartir la vida de Cristo.
6. Copartícipes de la promesa.- Antes, los gentiles estaban ajenos a los pactos de la promesa (Efesios 2:12), pero ahora comparten con los judíos la promesa de vida y salvación (Tito 1:1-3) Ambos pueblos pertenecen a la misma sociedad, o sea disfrutan del don por el cual la sociedad nueva se distingue de la vieja.

Y esta relación es realizada en Cristo y su cruz (Figura 32) Los gentiles no lo logran abrazando la fe judía. Ocupan el mismo lugar con Cristo que ocupan los judíos. Cuando el Evangelio es predicado efectivamente y bajo la unción del Espíritu Santo produce el nacimiento espiritual de los hombres, sean ricos o pobres, hombres o mujeres, de una u otra nación. Nadie es alguien antes de venir a Cristo, pero todos son de Cristo cuando son unidos a Él (1 Pedro 2:9-10)

Figura 32. Judíos + gentiles, un nuevo hombre, misterio divino escondido antes, revelado ahora (MIAPIC)

5.3  El Gran Reino Redentor

La palabra redención apunta a uno de los pilares de la salvación por gracia que hoy disfrutamos muchos.

Redención: Salvación de la humanidad lograda por Jesucristo con su pasión y su fallecimiento. Jesucristo murió en la cruz para redimir al hombre y permitirle el acceso al Cielo, liberándolo de la culpa del pecado. Ahondando más en la etimología del término, encontramos que en el verbo «redimir» se aprecia el prefijo latino «re» y el verbo «émere», que juntos dan la idea de «volver a comprar o a adquirir». Esto puede servir para entender las acciones de Jesucristo con más claridad, ya que él devolvió a las personas ese estado libre de pecado que habían tenido en el pasado, y para ello tuvo que entregar algo a cambio, nada más y nada menos que su propia vida.

Puede decirse que la Redención es el precio que Jesucristo asume y paga ante Dios para que los seres humanos sean redimidos y puedan alcanzar un estado diferente, llegando al Reino de Dios.

Analicemos ahora la cita bíblica de 1 Corintios 15:22-28:

22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. 
23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida. 
24 Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia. 
25 Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies.
26 Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte. 
27 Porque todas las cosas las sujetó debajo de sus pies. Y cuando dice que todas las cosas han sido sujetadas a él, claramente se exceptúa aquel que sujetó a él todas las cosas. 
28 Pero luego que todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.

De esta cita se desprenden varias verdades:

1. Habrá una resurrección universal de todos los hombres (Apocalipsis 1:7, Juan 5:25-29)
2. La resurrección tendrá lugar al tiempo de la segunda venida de Cristo, con un orden dado por Dios (1 Tesalonicenses 4:15-17), pero todo ojo le ha de ver, aun los que le traspasaron (Apocalipsis 1:7, 1 Corintios 15:51-56)
3. Con la segunda venida de Cristo y la resurrección de los muertos vendrá el fin de todas las cosas, el fin de este mundo, el fin de la oportunidad de ser salvos, el fin del tiempo (1 Corintios 15:24-28)
4. Con la resurrección de los muertos, el último enemigo, la muerte, será derrotado.
5. Cristo debe reinar hasta que ponga a todos sus enemigos debajo de sus pues, esto quiere decir que ese reinado no es después, sino mientras que derrote a todos sus enemigos. Entonces no se debe esperar un reinado milenario en el futuro, porque Cristo está reinando ahora. Está claro.

Así que con esta cita queda demostrado que Cristo tiene un reino ahora, pero lo más importante es que se trata de un Reino Redentor, el cual todos estamos llamados a alcanzar, aunque como el criminal al lado del Señor crucificado, estemos al final de nuestras existencias, pero nos arrepintamos de nuestra vieja vida y abracemos la nueva que por el Señor podemos alcanzar (Efesios 4:22-24)

Lucas 24:42 Y dijo a Jesús: Acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. 
43 Entonces Jesús le dijo: De cierto te digo que hoy estarás conmigo en el paraíso.

Muy importantes las palabras reino que el criminal comprendió, asegurando que estaba ante el Rey; y la palabra hoy, que significa actualidad de ese reino, ¡gloria al Señor! Entonces, ¿por qué esperar un reinado de mil años futuro, si hoy podemos estar reinando con Cristo en su reino triunfante sobre la carne, el pecado y el mundo?

CAPÍTULO 6. VICTORIA DE CRISTO SOBRE SATANÁS

El hecho más glorioso que la raza humana puede experimentar es la ascensión de Cristo al reinado de cada corazón usurpando al diablo el alto puesto que tenía allí.

6.1. La misión de Cristo en su primera venida

Por muchos años Satanás se ha opuesto al Reino de Cristo, como veremos en el capítulo 7, tratando de robar las almas de los hombres a través del pecado y la muerte, o separación espiritual del hombre con su Dios, es decir robó al hombre todos los privilegios que gozaba al salir de las perfectas manos del Creador (Génesis 27:26-31) para ser con Él un ser perfecto que obedeciera en todo a Altísimo. Es por ello que el mundo entero vive en un desosiego total, sumidos en la caída que produce el pecado, llenos de miseria, muerte, tinieblas, enemistad, sufrimientos, etc. Satanás entonces es un usurpador, y se hizo príncipe de las tinieblas y de la potestad del aire de este mundo (Efesios 2:2; 6:12, 2 Corintios 4:4-6)

Es entonces, que como dice San Pablo, el pecado reinó desde Adán hasta Cristo (Romanos 5:12), por lo que la raíz adámica solo es removida de nuestras almas a través de la segunda obra de gracia ganada por Cristo en la cruz: la santificación (1 Tesalonicenses 4:3)

La ley de Moisés era débil y tenía limitaciones para salvar al hombre:

• Trajo maldición y no justificación (Deuteronomio 27:26, Levítico 18:5, Romanos 3:6-14)
• No puede anular la promesa de Dios a Abraham, 430 años antes prometida a Padre de la fe (Romanos 3:15-18)
• Tuvo una función muy específica, ser el ayo[19] para llevarnos a Cristo (Romanos 3:19-24)

Solo Cristo pudo salvar a los pecadores, pues Él es el Cordero de Dios que remueve el pecado del mundo, y para eso vino (Juan 1:27), por ello apareció en nuestro mundo, para traer libertad y redención predicando según la promesa de Isaías 32:1-20 y su cumplimiento en Lucas 1:15-16:

PROMESA: Isaías 32:1 He aquí que para justicia reinará un rey, y príncipes presidirán en juicio.

CUMPLIMIENTO: Lucas 1:14 Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios, 
15 diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio.

Cristo estableció un reinado opuesto completamente al reino que mantenía al hombre esclavo del pecado, de la carne, del yo triunfante. Por ello muchísimas almas fueron libertadas por el ejercicio de su gran poder (Hechos 10:38). Las almas eran sanadas tanto las materiales, como las espirituales, los demonios salían tan solo por orden de Cristo, perdonaba pecados en el acto con autoridad y poder, envió a sus doce discípulos a predicar, a los 70 que regresaron con gozo, les aseguró haber visto a Satanás cayendo desde el trono del corazón humano (Lucas 10:17-18) Todas, absolutamente todas las penurias que la raza humana experimenta en todos los tiempos son producto de ese diablo, el cual fue echado fuera del corazón de aquellos que hemos creído al Evangelio del Reino de Cristo.

Lucas 11:17 Más él, conociendo los pensamientos de ellos, les dijo: Todo reino dividido contra sí mismo, es asolado; y una casa dividida contra sí misma, cae. 
18 Y si también Satanás está dividido contra sí mismo, ¿cómo permanecerá su reino? ya que decís que por Beelzebú echo yo fuera los demonios. 
19 Pues si yo echo fuera los demonios por Beelzebú, ¿vuestros hijos por quién los echan? Por tanto, ellos serán vuestros jueces. 
20 Más si por el dedo de Dios echo yo fuera los demonios, ciertamente el reino de Dios ha llegado a vosotros. 
21 Cuando el hombre fuerte (el diablo) armado guarda su palacio, en paz está lo que posee. 
22 Pero cuando viene otro más fuerte que él (Cristo) y le vence, le quita todas sus armas en que confiaba, y reparte el botín.

Entendemos entonces definitivamente que la misión especial de Cristo al venir a este mundo fue la de establecer su reinado en el corazón de los hombres, destronando por completo al diablo. Entonces, ¿a qué esperar un reino milenario, si ya estamos reinando con Cristo aquí en la tierra, hollando serpientes y escorpiones espirituales que batallan contra nuestras almas? (Lucas 10:18-19)

Cristo restauró lo que el diablo le arrebató al hombre, pero para ello debió morir como un maldito (Gálatas 3:12-14, Filipenses 2:5-11), a fin de satisfacer el requisito de su Padre de que un cordero muriera en nuestro lugar para redimir de una vez y por todas al hombre cuyo corazón estaba esclavizado por el que tenía el imperio de la muerte (Hebreos 2:14) Fue así que yendo a la muerte fue echado el que tenía el poder de la muerte, y Satanás fue destronado del alto puesto que había retenido por muchos años sobre la raza humana.

6.2. La tentación de Cristo en el desierto de Judea

La tentación del Señor Jesucristo en el desierto de Judea (Figura33) es de vital importancia para el triunfo del Reino de Cristo. Es por ello que la analizaremos. Dice la Palabra que Cristo fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado y ayunó por 40 días y 40 noches:

Mateo 4:1 Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.
2 Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.

Figura 33. Monte de la Tentación en el desierto de Judea donde Cristo fue tentado (Wikipedia)

El Señor Jesucristo había tenido una gran victoria en el acontecimiento público de su bautismo en el Jordán, pero inmediatamente le siguió una experiencia agonizante, dura y áspera en el desierto de Judea cuando fue tentado por el diablo. En nuestras vidas como santos de Dios, las grandes bendiciones generalmente son seguidas por grandes tentaciones. Esto es una lección para nosotros hoy. Esta horrible tentación y la posterior victoria sobre ella hicieron que su poder alcanzara a los que son tentados (Hebreos 2:17-18) Es de notar que Jesús fue llevado por el Espíritu Santo, lo que quiere decir que a diferencia de los hombres que al ser tentados es fácil pensar que estamos fuera de la voluntad de Dios, el Señor estaba bajo la divina dirección del Padre. El Padre permitiría que el Hijo fuese probado antes de comenzar su salvadora obra pública, como el metal es probado antes de ser usado en un lugar crucial. El diablo abrigaba la esperanza de hacerle caer, cuestión esta que sembraría el precedente de que el cristiano no podría vencer la tentación en su vida, además de las devastadoras consecuencias que traería para el plan de salvación de la raza humana. Todo esto es muy diferente a los sucedido en el Edén cuando a diferencia del Maestro, Adán y Eva estaban acompañados el uno por el otro (Él estaba solo), estaban en un lugar paradisíaco (Él estaba en un lugar desolado) y tenían abundancia de pan (Él estaba hambriento), pero a diferencia de la primera pareja que cayó en la tentación y se labró su muerte espiritual, Él triunfó sobre la tentación.

En la Tabla 3 se muestran los detalles de la tentación de Jesús por el diablo en el desierto de Judea.

El Señor fue tentado por el diablo, y lo venció con las mismas armas que hoy tenemos a nuestra disposición: la Palabra de Dios (Efesios 6:17)

Efesios 6:17 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios;

No.	Provocación del enemigo	Nivel	Cita usada	Respuesta de Jesús	Cita usada
1	Hambre(hacer algo bueno de manera equivocada, obedeciendo al diablo antes que a Dios)	Físico	V4	La Palabra de Dios es más necesaria y preferente	Deut. 8:3
2	Conducta imprudente(no es evidencia de fe, sino de presunción)	Intelectual	Sal. 91:11-12	Resistencia de Jesús al sensacionalismo. Toma el sencillo sendero humilde de obediencia al Padre.	V7
3	Ganar todo el mundo sin ir a la cruz. Alcanzar los objetivos aprobados por el Padre, pero empleando la estrategia de Satanás	Espiritual	V8-9	Ordena a Satanás que se marche, obteniendo victoria completa	V10, Deut. 6:13, 1 Reyes 19:5-7

Tabla 3. Detalles de la tentación de Jesús en el desierto de Judea (el autor)

Satanás no estaba especulando en manera alguna; él pensaba que tenía el poder para someter a Cristo, y en un supremo intento de desbaratar la misión del Maestro, y sabiendo que su poder y reinado iba a ser roto si Cristo iba a la cruz y establecía su Reino, trató en vano de hacerle caer. Cristo soportó estoicamente la tentación, obteniendo redención para la raza humana, por ello nos alienta en Juan 16:33 a tener paz en Él en medio de un mundo de aflicciones porque Él triunfó y nos da poder para vencer también (Juan 14:18-19) Así que la salvación del hombre está completamente asegurada ¡Gloria al Señor!

Juan 16:33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

6.3. La venida del Espíritu Santo

Después de ir a la cruz, nuestro Señor resucitó, lo que constituye la piedra angular de la fe cristiana ya que al vencer la muerte Cristo granjeó para el hombre la salvación eterna (1 Corintios 15:1-17) El ascendió a los cielos y desde la diestra del Padre intercede por nosotros siendo un Mediador excelente ante el Altísimo (Hechos 1:9-11, 1 Timoteo 2:5) Ya en los cielos, Su Padre y Él enviaron al Espíritu Santo, el cual es Dios con nosotros hoy al convencernos de justicia de juicio y de pecado y guiarnos a toda la verdad (Juan 14: 16-17,26; 16:7-14)

El Espíritu Santo descendió en Pentecostés cuando el Reino de Dios fue empoderado y la Iglesia, su agencia orgánica visible, fue una realidad en el mundo alcanzando a muchos hombres que se vieron libres del pecado, la muerte espiritual, la carne, el mundo y el diablo.

La Iglesia es entonces un reino de sacerdotes y gente santa, como Dios pretendió fuera el pueblo de Israel en el pasado (Éxodo 19:5-6) y como lo es hoy en el Nuevo Israel (Gálatas 6:16, 1 Pedro 2:9, Tito2:14, Apocalipsis 1:5-6,9a)

1 Pedro 2:9 Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable; 
Apocalipsis 1:5 y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre, 
6 y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.

Apocalipsis 9a Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo

CAPÍTULO 7. ENEMIGOS DEL REINO

Desde su surgimiento, el Reino de Cristo ha tenido acérrimos y poderosos enemigos, los cuales lejos de amedrentarlo, lo que han hecho es que, ante la oposición y persecución, el Reino ha experimentado un gran desarrollo, porque es en la confrontación que el Reino se ha hecho fuerte y los valientes lo arrebatan (Mateo 11:12) La idea es que desde que Juan comenzó a predicar que el Mesías había llegado y que El vino a traer salvación y juicio, multitudes corrían con ímpetu y fuerza por entrar en el reino de los cielos, para alcanzar la salvación. Esa es la naturaleza de la fe salvadora. Aquél que posee la fe salvadora se esforzará para llegar a los cielos. El Reino de los cielos sufre violencia, es decir, muchos desean entrar a los cielos y alcanzar la salvación eterna. El sustantivo violento en griego es “biastés” que significa: hombre esforzado o violento. Implica fuerza, vehemencia, dedicación, celo; los que ofrecen violencia en las cosas de Dios heredan el reino de los cielos (Judas 3)

Relacionamos ahora los enemigos que ha tenido el Reino de Cristo, sobre los cuales, ha vencido y vencerá (Apocalipsis 6:2)

7.1. El Paganismo

La Figura 34 muestra la trayectoria de la Iglesia de Dios, o sea del Reino de Cristo a través de la historia. En ella se destacan los enemigos que este ha tenido a lo largo de esa historia, y pasamos a describirlos. El primero fue el Paganismo (Figura 35), representado en el Apocalipsis como un dragón escarlata que se situó frente a la mujer encinta, o sea la Iglesia (Apocalipsis 12: 1-6) para devorar su criatura, o sea los santos primitivos tan pronto la Madre de todos los creyentes (Gálatas 4:26) diera a luz.

El Paganismo^[20], adoración de imágenes y todo tipo de objetos hasta del mismo hombre, fue desarrollado e impulsado por Roma, y fue el primer enemigo de la naciente Iglesia. Fue un período triste dado la feroz persecución a la que fue sometida. La Figura 36 muestra la imagen de un grupo de hombres adorando un palo. Esta forma primitiva de paganismo está ahora en plena efervescencia en los medios espiritistas de todo el mundo, a pesar de lo desarrollado de este siglo. Bien expresa la palabra de Dios en Habacuc 2:18-20 un ay para los que vayan tras esa torpeza espiritual.

Figura 34. Representación histórica de los períodos de la Iglesia de Dios (El autor)

Figura 35. La Mujer (Iglesia de Dios) y el Dragón escarlata (el diablo en la forma del Paganismo romano, Apoc. 12 (Goodsalt.com)

Figura 36. Imagen del Paganismo (hombres adorando un simple palo). Esta es la base de la adoración actual en medios espiritistas (Hab. 2:18-20) (Wikipedia)

La Figura 35 muestra una imagen de la Iglesia simbolizada por una mujer vestida del sol (Cristo) con la luna (Ley de Moisés) debajo de sus pies y una corona de 12 estrellas en su cabeza (12 apóstoles del Cordero) la cual estaba encinta. Esta gravidez no significa para nada que esa mujer Iglesia iba a parir a Jesucristo, como muchos enseñan, porque la Iglesia no puede dar a luz al Señor, sino por el contrario, Jesús da a luz a la Iglesia cuando muere por ella.

El dragón bermejo simboliza el Imperio Romano bajo su forma pagana. La mujer representa la Iglesia en dos fases; la fase representada por el niño es la fase de la Iglesia que fue quitada de la tierra debido a la persecución y al martirio, mientras la otra fase se trata de la mujer que huyó al desierto y es la que continuó en la tierra, pero escondida en cuevas y catacumbas debido a la gran apostasía que sobrevino. Después aparece una gran batalla de Miguel y sus ángeles, que no es otro que Cristo y sus ángeles contra el gran dragón (Apocalipsis 12:1-11) Esto representa el conflicto primitivo entre la Iglesia y el paganismo, pero el dragón fue echado del cielo, o sea del corazón de los hombres que aceptaban a Cristo como su Salvador. Este conflicto es bien narrado en la Historia secular. Mientras los paganos lucharon con espada, tormento, persecución sin tregua, bestias de la tierra, martirio de miles de santos de Dios en el círculo romano[21] (Figura 37), incendiándolos como postes de alumbrado, etc., los discípulos de Cristo, cual David contra Goliat (1 Samuel 17:26-54), fueron en el nombre de Su Maestro Redentor, y la palabra de su gran testimonio público, y gracias a Dios, vencieron. Ellos tuvieron en poco sus vidas con tal de agradar al Señor que les rescató. Con este testimonio muchos paganos fueron convertidos al Evangelio de paz, llegando incluso el tiempo bajo el Emperador Constantino[22] que los templos paganos fueron destruidos, quedando el cristianismo como religión del imperio. Ellos reinaron en sus vidas junto al Rey de reyes, Jesús, que ya había establecido su reino en el mundo.

Figura 37. Mártires cristianos en el Coliseo o Circo romano (Alamy)

El período del reinado del Paganismo fue entre el 33 y hasta el 530 d.C.

PERÍODO DE 33-270 d.C.

• Comienzo glorioso de la Iglesia que Cristo edificó. (Hechos 2:42-47; 4:32-35, Lucas 18:38). Todo comenzó como UN SOLO PUEBLO, UN SOLO REBAÑO. Solo estaban en la escena religiosa los judíos (fariseos, escribas, esenios, samaritanos y saduceos), los paganos y la Iglesia de Dios.
• IGLESIA viene del griego ecclesia que significa “los llamados a salir fuera”. El Señor no se unió a ningún grupo desprendido de la doctrina de Moisés, sino que formó Su Iglesia llamándolos a salir de sectas fundadas por hombres.
• Ya a finales del período y aún antes de ese tiempo los hermanos estaban dejando (no perdiendo) el primer amor (Filipenses 2:19-21), aunque siempre quedó un remanente santo ¡Gloria a Dios!

PERÍODO DE 270-530 d.C.

• Florecimiento del Paganismo (adoración de las criaturas antes que a Su Creador). Comienzo de apostasía (vivir sin ley).
• La Roma Pagana perseguía a los santos de Dios y muchos sucumbieron ante esta persecución. Comenzó a desmembrarse ese único pueblo que comenzó tan gloriosamente.

7.2 El Catolicismo

La Figura 38 muestra la imagen de la bestia que es descrita en Apocalipsis 13:1-10 y 17:1-12), segundo enemigo del Reino de Cristo, el cual tuvo preponderancia en la escena religiosa desde el 530-1530 d.C. Es necesario destacar que fue un tiempo de nublado espiritual (Ezequiel 34:12) donde el Catolicismo reinó en el mundo religioso sin ninguna oposición. Este período fue funesto para los cristianos verdaderos que sufrieron persecución y muerte ya que este sistema no aceptaba oposición alguna so pena de morir en una hoguera, ser aserrado, ser descuartizado, ser empalado, ser crucificado, y muchas otras formas de asesinato que se practicaron con la Biblia en la mano, describiendo un capítulo tristísimo en la historia de la humanidad, a la cual este sistema le debe mucho, y no será posible que pague. Este período tiene las características siguientes:

Figura 38. La Bestia que surge del mar (Catolicismo) (Escuela sabática)

• Florecimiento del Catolicismo (aproximadamente 1 000 años. La apostasía había hecho su obra mortal entre los santos de Dios a través del trono papal (2 Tesalonicenses 2:3-4).
• Los falsos profetas abundaban (Núm. 25:1-3; 31:14-16).
• Una parte de la Iglesia cayó en fornicación espiritual (creer que María es corredentora con Cristo, la misa (ceremonia que celebra el sacrificio de Cristo, ofreciendo cuerpo y sangre bajo las especies de pan y vino), las penitencias y la confesión son formas de alcanzar la salvación). También el celibato sacerdotal y la veneración y adoración de imágenes en los templos, entre muchas otras doctrinas y tradiciones de hombres. Cristo es el único mediador entre Dios y los hombres (1 Timoteo 2:5).

Un estudio concienzudo de las profecías contenidas en la Palabra de Dios junto a acontecimientos históricos perfectamente ciertos y verificables pueden arrojar la verdad sobre este personaje, que no es uno como tal, sino varios que se tienen sí, un mismo espíritu.

Es preciso conocer la identidad y trabajo de este espíritu que se opone a Cristo o quiere tomar el lugar de Cristo para destruir la verdad de Dios en cada corazón humano y llevarlo a la perdición eterna.

En la Palabra existen varias citas donde se menciona la palabra ANTICRISTO, O ANTICRISTOS. El apóstol San Juan, como nadie, nos habla con insistencia sobre ese espíritu: 1 Juan 2:18, 1 Juan 4:1, 2 Juan 7-11. 7.

Algunas características:

• La palabra viene del griego αντιχριστός, esto es (i.e.) “opositor de Cristo, “o que “pretende ocupar el lugar de Cristo“.
• No acepta que Jesús es el Cristo (Mesías) o que Él es el Hijo de Dios. — 1 Juan 2:22.
• Se opone a Cristo, el Ungido de Dios. — Salmo 2:1, 2; Lucas 11:23.
• Finge ser el Cristo. — Mateo 24:24. Aparece como apóstoles de Cordero, pero predican un Cristo diferente (2 Corintios 11:3-45; 13-15)
• Persigue a los seguidores de Cristo, porque, como Jesús dice, quien persigue a sus seguidores persigue a Jesús mismo. — Hechos 9:5.
• Dice que él apoya al cristiano, pero impulsa a hacer lo que está errado y engaña a otros. (Mateo 7:22, 23; 2 Corintios 11:13)
• Además de hablar de individuos que actúan como anticristos, la Palabra también se refiere a ellos colectivamente como el Anticristo (2 Juan 7). El espíritu del Anticristo siempre ha estado activo. La Palabra había advertido que eso iba a acontecer (1 Juan 4:3)
• Recalcamos que aunque la Palabra parece referirse a una personalidad como enseñan hoy muchos maestros, realmente es un espíritu que ha estado presente siempre en la historia de la Iglesia.

En nuestra modesta opinión, San Agustín [23]definió muy correctamente este espíritu presente en toda la historia del cristianismo. Destacadas en letras itálicas están las frases con las que de forma desnuda y viral este eminente teólogo desnudó este espíritu.

“Son ciertamente anticristos todos los que salen de las Iglesias y se separan de su unidad. O sea, los que se van al mundo por sus pasiones carnales y abandonan a Dios. Nadie lo dude; como pasó con la iglesia del mismo Juan: Salieron de entre nosotros, pero no eran de los nuestros, pues, si hubiesen sido de los nuestros, sin duda hubiesen permanecido con nosotros. Resulta evidente, por tanto, que es anticristo cualquiera que, en vez de permanecer con nosotros los cristianos, salga de nosotros. ¿Y cómo se prueba que son anticristos? Por su mentira. (…) Hemos hallado a los anticristos mismos: quien niega a Cristo con sus obras es un anticristo, Quien dice que Jesús fracasó en la cruz del Calvario es anticristo. Quien se hace llamar sucesor de Cristo es un anticristo, todo el que busque grandeza y adoración la cual únicamente pertenece al Rey de reyes es un anticristo. No presto oído a lo que suena al oído, sino que pongo los ojos en cómo vive. (…) Mentiroso consumado es el anticristo que confiesa con la boca que Jesús es el Cristo y le niega con las obras. Por eso es mentiroso, porque dice una cosa y hace otra. (…) Ahora ya, hermanos, si son las acciones las que han de ser sometidas a examen, encontramos no sólo que hay muchos anticristos que salieron, sino que hay muchos otros, aún no al descubierto, que no han salido en absoluto. (…) Pero si no quieres y amas y te abrazas a tus pecados, estás contra Cristo. Estés fuera, estés dentro, eres un anticristo; estés dentro, estés fuera, eres paja. ¿Por qué entonces no estás fuera? Porque te ha faltado el viento favorable. ““San Agustín de Hipona”

Ahora bien, este espíritu habita en el sistema católico, lo cual constituye una base moderna para su establecimiento y peligroso empoderamiento actual. Comencemos por el sueño del rey babilónico, Nabucodonosor interpretado por el profeta Daniel (Daniel 2:31-35) y que coincide con el sueño del profeta en Daniel 7:1-8, como una confirmación de Dios.

La Figura 39 muestra la imagen que el rey vio en sueños y la interpretación, también vista en sueños, de Daniel, mientras que la Figura 40 muestra la piedra, lanzada sin mano (Roca de los siglos) que destruyó la imagen y que significa la destrucción de cada gran imperio y el establecimiento final del Reino eternal de Cristo.

Figura 39. Imagen del sueño del rey Nabucodonosor (jw.org)

Figura 40. Piedra que destruyó la imagen (Reino de Cristo) (Editorial La Paz)

La Figura 41 muestra las bestias que Daniel vio en su sueño del capítulo 7 de su libro, y que es una confirmación del mensaje de Dios al profeta para que escribiera los hechos que se iban a manifestar a nivel mundial.

Figura 41. Las 4 bestias que Daniel vio (Recursos bíblicos)

La Figura 42 muestra el cuerno pequeño que surgió de entre los 10 cuernos del sistema romano y que tiene especiales características que le proporcionan una base para sostener a nivel mundial todo espíritu de anticristianismo. Las 10 divisiones del imperio romano, que aparecen destacadas en la figura, se mencionan a continuación:

1. Francos (Hoy Francia)                                   6. Ostrogodos (exterminados)

2. Alemanis (Hoy Alemania)                             7. Suavos (Hoy Portugal)

3. Herulios (exterminados)                               8. Anglosajones (Hoy Inglaterra)

4. Burgundianos (Hoy Suiza)                             9.  Lombardos (Hoy Italia)

5. Vándalos (exterminados)                             10. Visigodos (Hoy España)

Figura 42. El cuerno pequeño y sus características (Wiki index)

La Tabla 5 denota una comparación entre Daniel 7 y Apocalipsis 13 que señalan inequívocamente la identidad del Catolicismo Romano como principal sistema sostenedor del anticristianismo.

Tabla 5. Comparación entre Daniel 7 y Apocalipsis 13 (El autor)

La Tabla 6, de forma muy explicativa y haciendo un resumen, enseña diferentes nombres que la Biblia da al Papado, señalando varias características de ese sistema, que lo hacen triste merecedor de la base de todo espíritu de anticristianismo.

Tabla 6. Identificación del espíritu del Anticristo en el Catolicismo (Wikipedia)

Hacia el año 1530 d.C. un movimiento mundial de Reforma religiosa tuvo lugar con Juan Calvino[24], en Inglaterra y Martín Lutero[25] en Alemania como sus mayores expositores. Este movimiento paró en seco el poder absoluto del Papado. Fue un período de más de mil años en que los santos de Dios fueron martirizados, y la mujer apóstata, o sea la Iglesia Católica Apostólica y Romana se embriagaba con la sangre de los mártires de Jesús (Apocalipsis 17:6), pero el Cordero venció ese poder a través de los reformadores que le infligieron una herida mortal, aunque realmente fue sanada de esta herida pues volvió a aparecer su fea cabeza en el ámbito espiritual (Apocalipsis 13:3)

7.3 El Denominacionalismo

La Figura 43 muestra una bestia que no es tan horrorosa, la cual Juan ve surgir de la tierra (Apocalipsis 13:11-18) Esta bestia representa otro sistema contrario a la verdad de Dios, el cual, usando el nombre de Cristo, proclama representar el verdadero pueblo de Dios. De la misma forma que en los versos 1-10 de Apoc. 13, donde el Dragón dio su autoridad a la bestia que surgió del mar, o sea el Sistema Católico, también en esta Bestia ese dragón está presente ya que la misma hablaba como este mitológico animal (verso 11b). Esto lleva a concluir que detrás de cada sistema religioso falso está la influencia engañosa y anticristiana del dragón, que es el diablo en la forma del Paganismo.

Figura 43. La segunda bestia surgida de la tierra, representativa del Denominacionalismo (Apocalipsis 13:11-18) (Wikipedia)

Fijémonos en las características fundamentales de esta bestia:

• Sube de la tierra, es decir su origen no es divino, sino es un sistema de hombres (Apoc. 12:1, la mujer que aparece en el cielo es la Iglesia, esta es de origen divino). También ver Santiago 1:17.
• Tiene dos cuernos que le dan una apariencia benévola ya que parece un cordero. Estos dos cuernos representan el sostén que tuvo el sistema, o sea Alemania (con Lutero) e Inglaterra (con Calvino).
• Contrario a la primera bestia de los versos 1-10, no parece ser tan engañosa, su engaño no es tan palpable, o sea es más atractiva. El sistema que ella representa es mucho más atractivo en el orden espiritual.
• Sus ministros no son enviados, se envían a ellos mismos (Jeremías 14:14-15; 23:21)

No.	CARACTERÍSTICA	DRAGÓN (PAGANISMO)	2DA. BESTIA (DENOMINACIONALISMO)
1	ADORACIÓN	Muchas formas (Adore en la forma que desee).	Muchos grupos cristianos (Vaya al de su preferencia).
2	CRENCIAS O DOGMAS	Muchas formas de creer y muchos dioses que adorar.	Muchas formas de adoración y muchos ministros que obedecer.
3	DIVISIÓN	Justifica la cantidad de dioses y dogmas.	Justifica la cantidad de denominaciones.

Tabla 7. Comparación entre el Paganismo y el Denominacionalismo (el autor)

• Ejerce toda la autoridad de la primera bestia en presencia de ella ya que muchas de las naciones (Alemania, Inglaterra, Suecia, Noruega, Dinamarca, Holanda y Suiza) y hombres católicos como Yiye Ávila, Cesar Castellanos, Cash Luna, Emma Claudia Castellanos, Yuri (cantante), entre otros muchos, se hicieron protestantes.
• El Sistema Protestante le hace imagen o refleja a la Iglesia Católica ya que ambos son sistemas de hombres, el uno espera por la guianza del papa y el otro por su fundador o líder (Tabla 7)
• En este sistema se hacen señales. Muchas de estas señales son hechas por los ministros del ocultismo. En nuestros días, han salido a la palestra agoreros del fin del mundo, heraldos de juicios divinos, pregoneros de catástrofes, teólogos de mal agüero, profetas de pacotilla…, ante la pandemia provocada por el coronavirus en 2019. Todos tienen un denominador común: mercadear con la fe provocando miedo. ¡Qué lejos están del evangelio y de la intención de Jesús de Nazaret! Las señales de Jesús estaban orientadas a dar luz, a aclarar cómo es el Dios que le enviaba, no a anunciar juicios apocalípticos.^[26] Tales señales aún engañan a los escogidos. 
• Hizo matar debido a que, en parte, por su causa tuvieron lugar las guerras entre católicos y protestantes^[27]. No es ese el espíritu de la Iglesia de Dios (Lucas 9:51-56)
• Cristo advirtió acerca de falsos Cristos y falsos profetas en Mateo 7:15; 24:23-24)
• Se le llama también FALSO PROFETA (Apocalipsis 16:13; 19:20; 20:10), debido a que se hace pasar por enviado de Dios, cuando en verdad surgió de la tierra, de ideas y mentes humanas.
• Hablaba como dragón, es decir su forma de operar se asemeja a la forma de operar del Paganismo. Como la Babel del capítulo 11 de Génesis, habla diferentes lenguajes religiosos.
• Este fue el tiempo que el dragón fue suelto de su prisión (Apocalipsis 9:1-3; 20:2-3)
• Adorar la primera bestia es adorar al dragón, y adorar la segunda bestia es adorar la primera.

Merece atención aparte la marca de la bestia. Muchos creen en estas marcas que se harán de forma literal en las manos y frentes de las personas, pero esto también es una expresión simbólica. La frente es usada para representar la mente y el espíritu del hombre (Ezequiel 3:7-9). Ser marcado en la mano es señal de compañerismo y comunión (Gálatas 2:9). Los que mantienen comunión con este sistema blasfemo de la bestia, así como han aceptado en sus mentes y corazones su doctrina, están marcados en frente y manos.

La marca 666 es la de UN ANTICRISTO, no del Anticristo. Esta no tiene que ver con un evento futuro, sino con uno pasado cuando la bestia reinó sin oposición durante 42 meses, 1 260 días, tres años y medio, o tiempos y tiempo y la mitad de un tiempo. Dice la palabra en Apocalipsis 13: 18 que el número de la bestia es 666 y esto no es más que: VICARIUS FILII DEI (VICARIO DEL HIJO DE DIOS). La Figura 44 expresa los títulos de la Iglesia Apostólica Romana, aquella bestia a la cual la2da. Bestia, también llamada falso profeta hace imagen. Todos los títulos suman 666.

Figura 44. Títulos de la Iglesia Católica Romana. Todos suman 666 (Wikipedia)

En la actualidad casi un 40 % de los cristianos pertenecen a una iglesia protestante. Luteranos, calvinistas, anabaptistas, anglicanos y otras más. El luteranismo se consolidó en los principados alemanes y en los países escandinavos. Esta doctrina se ha mantenido a lo largo del tiempo, pero en su interior surgió otro movimiento en el siglo XVll, el pietismo[28].

Una denominación religiosa es un subgrupo dentro de una religión que opera bajo un nombre, tradición e identidad comunes.

El término se refiere principalmente a las diversas denominaciones cristianas (por ejemplo, ortodoxo oriental, católico romano y muchas variedades de protestantismo). También se utiliza para describir las cuatro ramas del judaísmo (ortodoxo, conservador, reforma y reconstruccionista). Dentro del Islam, puede referirse a ramas o sectas (como sunitas, chiitas y ahmadíes), así como a sus subdivisiones y sucumbas, escuelas de jurisprudencia, escuelas teológicas y movimientos religiosos. La denominación religiosa más grande es el Islam sunita, seguido por el catolicismo romano.

Ahora bien, ¿Es el “Denominacionalismo” del orden de Dios o de los hombres?

Todo cristiano ha mirado más o menos a la Palabra de Dios (la Biblia) para encontrar el camino a la salvación, pero parece que muy pocos, después de ser salvos, han buscado la Palabra para encontrar cómo el Señor los reuniría para adorar y ministrar. Aunque todo el mundo cree que sólo hay una manera de ser salvo, muchos consideran que cada uno se queda la opción para sí mismo de cómo debe adorar. Como resultado, la mayoría de los cristianos adoran a cada uno en su propia forma o estilo propio de su afiliación confesional, aunque el modelo de Dios para la verdadera adoración cristiana y ministración permanece claramente revelado en la Biblia (Juan 4:21-24) Es apropiado que todo creyente auténtico busque las Escrituras para aprender cuál es Su voluntad en este importante asunto. En la Figura 43 se observa una imagen de los espíritus de los opositores al Reino de Cristo (Apocalipsis 16:13) que son a manera de ranas, o sea habitan en lugares terrenales, no celestiales, dado que las ranas habitan tanto en la tierra como en el agua (Figura 45)

Figura 45. Espíritus de los opositores al Reino de Cristo (el dragón, la bestia, el falso profeta) a manera de ranas (Apocalipsis 16:13) (Editorial La Paz)

Todos estos sistemas contrarios al Reino de Cristo forman los que la Palabra llama Misterio Babilonia, el cual en Apocalipsis 18 se predice un tiempo de una gran reformación que da lugar al progreso del Reino de Cristo en el cual la caída de este sistema babilónico (o de confusión religiosa) es caído y el verdadero pueblo de Dios es llamada a salir de allí (Apocalipsis 18:4) Aquí se presenta la separación espiritual de la Iglesia inmaculada de todo el conjunto apóstata en la tarde del día del Señor. De ella se habla en Apocalipsis 15:2-4. El mar de vidrio es la pureza y santidad de Dios mezclado con el fuego del Espíritu Santo donde la Iglesia vencedora sobre los sistemas blasfemos del Catolicismo y el Denominacionalismo se coloca de pie sobre cantando el himno de victoria, el cántico de Moisés de Éxodo 15 cuando los israelitas cruzaron el Mar Rojo. Ver Figura 46. El Señor quiere dejar claro que si Israel no recibe bendición no es porque Él falló o falló su Palabra, sino porque los israelitas no siguieron el orden de Dios. Moisés invita al pueblo a que vean el pasado y analicen en qué punto se desviaron.

Es preferible referir las dos expresiones de canto a un único canto, que sería precisamente el de Apocalipsis 15:3-4. Si Juan lo designa con dos expresiones diversas, se debe a que este canto, en el cual los vencedores de la Bestia agradecen a Dios su redención y su victoria, conseguida en virtud de la sangre del Cordero, se inspira en el himno con que los israelitas expresaron su gratitud por la liberación de Egipto, guiados por Moisés. Para los judíos del tiempo de Cristo, en efecto, el paso del mar Rojo era tipo y prefiguración de la redención mesiánica; Moisés era tenido por el primer libertador; Jesús por el segundo. El canto está compuesto íntegramente con material del AT. Los cantores exaltan las obras y los caminos de Dios, o sea, su intervención poderosa, sabia, justa y bondadosa en la historia. Con tales expresiones se refieren, ante todo, a la obra de la redención, y manifiestan, alegres, su seguridad de que al fin nadie rehusará a Dios, el único santo, el honor y la gloria, y que aun los paganos acabarán por someterse a él, cuando todos sean testigos de su justicia al premiar y al castigar. De esta esperanza se hicieron eco los salmos y profetas. [Extraído de A. Wikenhauser, El Apocalipsis de San Juan. Barcelona, Ed. Herder, 196]

2 Vi también como un mar de vidrio mezclado con fuego; y a los que habían alcanzado la victoria sobre la bestia y su imagen, y su marca y el número de su nombre, en pie sobre el mar de vidrio, con las arpas de Dios. 
3 Y cantan el cántico de Moisés siervo de Dios, y el cántico del Cordero, diciendo: Grandes y maravillosas son tus obras, Señor Dios Todopoderoso; justos y verdaderos son tus caminos, Rey de los santos. 
4 ¿Quién no te temerá, oh Señor, y glorificará tu nombre? pues sólo tú eres santo; por lo cual todas las naciones vendrán y te adorarán, porque tus juicios se han manifestado. 

Figura 46. Paso del Mar Rojo por los israelitas (Guioteca)/ Cántico del Cordero sobre el mar de vidrio representativo de la santidad de Dios (Twitter)

7.4 El Octavo Enemigo

En el libro de Apocalipsis capítulo 17:3-6 Dios nos habla acerca de la visión del Apóstol Juan sobre una bestia color escarlata, la cual trae una mujer ebria, con un nombre blasfemo y vestida pomposamente (Ver Figura 47) Se trata de la Falsa Iglesia, madre de las rameras espirituales de todo el mundo (V5), con una copa llena de las abominaciones cometidas por ella contra el Señor (V4, 1 Corintios 6:16) y enarbolando falsas verdades (Mateo 7:6, Apocalipsis 3:18) Entendemos por la Palabra que representan el sistema católico romano que sostiene a la Babilonia o confusión religiosa global.

Figura 47. El octavo y último enemigo de la Iglesia (Apocalipsis 17) (YouTube)

No es objetivo explicar hasta la saciedad estos interesantes símbolos en este artículo, solo enfatizaremos en lo que al presente tema se refiere. Interpretamos que ambas poseen un mismo espíritu religioso falso que ha habitado en todos y cada uno de los siete períodos de existencia de la Iglesia de Dios en el mundo. Pero, se nos habla también de un octavo reino o bestia, la cual exhibe los espíritus religiosos falsos existentes en todos los períodos de la Iglesia, y que representa el último enemigo al cual ésta deberá enfrentarse (Apocalipsis 17:11) Se trata de la más peligrosa amenaza espiritual contra el pueblo de Dios. Si bien los enfrentamientos contra la Iglesia en el pasado fueron abiertos y directos, este último es fino, encubierto y astuto. Aparentemente no existe siquiera una feroz y relativa persecución expresa. Es precisamente este movimiento religioso falso quien intentará representar la reunión (no unidad) de todas las religiones conocidas y por conocer, en una sola religión mundial, donde lo más peligroso es que no importaría el credo de cada cual, aún si alguna negara la divinidad y señorío de nuestro Señor Jesucristo, cruciales para la salvación de la raza humana. Estos intentos ecuménicos no son nuevos. Hace ya muchos años que el espíritu religioso falso habita en el Movimiento Ecuménico Mundial, pero actualmente se ha exacerbado a través de la acción intercesora del Papado, puntualizado en encíclicas, reuniones y visitas, incluso, a líderes religiosos antes enemigos acérrimos del catolicismo romano, como el líder ortodoxo cristiano. También conocemos que muchas denominaciones cristianas, fieles al espíritu falso del sistema protestante, han comulgado entre sí y con el sistema católico.

En este epígrafe solo destacaremos varios hechos que con una evidencia brutal nos acerca al pensamiento e intenciones de la Iglesia Católica, guiada por el espíritu del Anticristo, en el contexto mundial actual y que reafirma ser parte importante del octavo enemigo de la Iglesia. Se trata de las doctrinas que enarbola su flamante líder, el Papa Francisco, y que ha dejado boquiabierto al mundo. A continuación mencionamos varias de ellas:

• Llamamiento para un Nuevo Pacto Educativo Mundial.

Lanzado el pasado 12 de septiembre de 2019, el Papa Francisco convocó a la sociedad mundial para participar en un evento global que se celebró en octubre de 2020, en Roma, Italia, con la intención de consolidar un NUEVO PACTO EDUCATIVO GLOBAL con los pretendidos objetivos primordiales de cuidar el medio ambiente y lograr el fomento de una mayor solidaridad mundial. Participaron del mismo los líderes del mundo en varios ámbitos: político, humanitario, religioso, económico, cultural, científico; para suscribir con ellos una alianza estratégica. El llamado también se extendió a exponentes de organizaciones internacionales y de diversas instituciones humanitarias, científicos y pensadores, economistas, educadores, sociólogos y políticos, artistas y deportistas. Este pacto señala tácitamente a la Iglesia Católica como el próximo líder mundial que gobernaría en un Nuevo Orden Mundial, el cual la Biblia le ha llamado el Octavo y último sistema o Reino que se levantaría contra la Iglesia, según Apocalipsis 17. Se trata del trampolín que el enemigo de las almas ha orquestado para introducir ese nuevo orden, con sometimiento total a los designios papales.

• El Papa Francisco ha emitido tres encíclicas, las cuales cada vez se acercan más a las herejías más profundas que se puedan tolerar y que señalan al sistema católico como un líder espiritual del octavo enemigo de la Iglesia: Encíclicas del Papa Francisco: 1ra. LUMEN FIDEI, 2da. LAUDATO SI, 3ra. FRATELLI TUTTI.

1ra. LUMEN FIDEI.- Luz de la fe, 29 de junio de 2013. La fe es como una luz que disipa las tinieblas e ilumina el camino del ser humano.

2da. LAUDATO SI.- Laudato si’, mi’ Signore» – «Alabado seas, mi Señor. Nuestra casa común es también como una hermana, con la cual compartimos la existencia, y como una madre bella que nos acoge entre sus brazos: «Alabado seas, mi Señor, por la hermana nuestra madre tierra, la cual nos sustenta, y gobierna y produce diversos frutos con coloridas flores y hierba » El Papa habla del disfrute de una casa común, término que debe unir a todos los hombres de la tierra. Los cristianos no tienen una casa común con los infieles. Estos tienen una casa donde se hace la voluntad de su padre, el diablo (San Juan 8:44), y los santos de Dios tienen su casa, la cual es la Iglesia en este mundo, y otra casa, eterna en los cielos, si le somos fieles (2 Corintios 5:1-10). No podemos comulgar con los que no hacen la voluntad de nuestro Padre, porque no hay acuerdo alguno entre los pecadores y los santos de Dios (2 Corintios 6:14-18). Nosotros tenemos la misión de atraer a los hombres a la casa de Dios, pero no a través de esfuerzos humanos, sino a través de la conversión de las vidas por medio del Espíritu Santo (Hechos 16:31) En esos términos es que se puede hablar de casa común.

3ra. FRATELLI TUTTI. – Escribía San Francisco de Asís para dirigirse a todos los hermanos y las hermanas, y proponerles una forma de vida con sabor a Evangelio. De esos consejos quiero destacar uno donde invita a un amor que va más allá de las barreras de la geografía y del espacio. Allí declara feliz a quien ame al otro «tanto a su hermano cuando está lejos de él como cuando está junto a él». Con estas pocas y sencillas palabras expresó lo esencial de una fraternidad abierta, que permite reconocer, valorar y amar a cada persona más allá de la cercanía física, más allá del lugar del universo donde haya nacido o donde habite. Es precisamente un movimiento religioso falso que intentará representar la reunión (no unidad) de todas las religiones conocidas y por conocer, en una sola religión mundial, como dijimos anteriormente.

• Está tratando de afirmar que hay que actualizar la Palabra de Dios.

El papa está tratando en vano de hacer ver que la Biblia se ha desactualizado, que ya no le sirve al hombre moderno, que la palabra sangre que aparece muchas veces en la Palabra, es muy fuerte para lidiar con ella, cuando es precisamente la sangre de Cristo la que nos limpia de todo pecado (1 Juan 1:7), que la Biblia no tiene autoridad alguna sobre el hombre moderno, que la cultura es lo que determina el comportamiento humano, y por consiguiente el puro Evangelio no sirve para este siglo, y predican otro evangelio (Gálatas 1:6) Así, por ejemplo, afirma que la carta del apóstol Pablo a Filemón muestra la insuficiencia de la Biblia. ¡Cuánta blasfemia!

• Aceptación del homosexualismo como una condición y no como un comportamiento pecaminoso.

Esto sencillamente es una aberración ya que en este punto la Palabra de Dios es muy clara. Se trata de decir que las referencias directas a prácticas homosexuales en la Biblia se consideran escasas y ambiguas. En Génesis 1:27, Dios creó la mujer y el hombre, no términos sexuales medios. El Señor Jesús ratificó la creación de hombre y mujer en Marcos 10:6-9.

• Refrenda el matrimonio gay[29]. En Génesis 2:24, Dios instituye el matrimonio entre una mujer y un hombre, y para ello los dotó en sus cuerpos de características tales, que ambos se complementan perfectamente. Nada hay más bello que esta institución divina. ¿Por qué el hombre quiere ir en contra de lo que Dios ha implementado para él? ¿Por qué el hombre no está de acuerdo con ese plan perfecto para procrear nuevos hombres, ya que el homosexualismo es incapaz de hacerlo? ¿Cómo podrá lograrse la natural fructificación y multiplicación de la especie humana si se aumentara desproporcionadamente el homosexualismo en nuestro planeta? (ver Génesis 1:28) ¿Cómo podrán criarse los niños adoptados por una pareja homosexual si no tienen siquiera el ADN^[30] de sus verdaderos padres? ¿Cómo se perpetuará la raza humana entonces? Son preguntas difíciles de responder, o no se pueden responder satisfactoriamente.
• Aceptación del aborto.

La aceptación del aborto es la aceptación de uno de los crímenes más grandes que se cometen a diario en nuestra sociedad. Y hay que decir que se cometen por millares en el mundo diariamente, todo debido a la no aceptación de lo que Dios dice al respecto del adulterio y la fornicación. Es muy difícil que una pareja bien casada cometa tal pecado, aunque no imposible, ya que todo hecho pecaminoso nace en el corazón del hombre (Marcos 7:21) El adulterio se castigaba en la Ley de Moisés con la muerte (Levítico 20:10, 21:9) aunque Dios perdonó a David cuando el cometió tan deleznable acto (2 Samuel 11:2-5, Salmo 51:1-2) y Cristo perdonó a la mujer adúltera en Juan 8:11 cuando el Maestro le dijo vete y no peques más. Pablo habla de la fornicación como otro deleznable pecado (1 Corintios 6:18) y que también nace en el corazón del hombre de acuerdo a las palabras de Jesús.

• Colocación de la Palabra de Dios en igual condición o por debajo de los postulados de la ciencia.

Actualmente, la posición oficial de la Iglesia Católica, por ejemplo, en cuanto a la Creación de Dios, es que no acepta completamente esta verdad que se plasma en la Palabra desde el primer versículo, Génesis 1:1:

Génesis 1:1 En el principio creó Dios los cielos y la tierra.

El propio Papa Francisco ha afirmado que la Evolución^[31] y el Big Bang^[32] son líneas de pensamiento correctas y no entran en conflicto con el Catolicismo Romano.

Aunque acepta la creación de Dios también dan lugar y crédito a tales teorías en boga actualmente ya que éstas son científicamente válidas. Esta posición es llamada Creacionismo Evolucionista o Evolucionismo Creacionista. Los católicos enseñan y defienden que estas teorías científicas no niegan el origen divino del mundo y tienen la función de describir el método usado por Dios para crear todas las cosas. No considera, entonces la Creación como un diseño inteligente del Creador de todo.

Esta posición le hace juego a los que no aceptan la creación de Dios, comulga con los impíos que no creen en el poder del Creador, disminuye a un estado muy bajo el poder del Altísimo y constituye el punto de inflexión más importante para creer en todas las cosmogonías^[33] con base babilónica(costra idolátrica). Todo método científico parte de la premisa de que la ciencia es algo observable. Para ser científico, se precisa empíricamente observar un fenómeno y percibir que se repita en condiciones específicas. Cuando hablamos de micro evolución es un hecho científico porque es posible, por ejemplo, observar una especie de mosquito sufriendo una mutación, y a partir de ahí, debemos cuestionarnos que evolución no es la palaba correcta a usar, sino la palabra mutar, cambiar.

Cuando hablamos de la Evolución de Darwin^[34], por ejemplo, hablamos de macro evolución, o sea la creencia de que una especie puede evolucionar a otra. No existe posibilidad alguna de observar un cambio de un mono a un hombre, por tanto si nadie pudo observar ese cambio efectuado durante tres millones de años, concluimos que la macro evolución no es un proceso científico, sino un acto de creencia, de fe. El libro de Génesis no intenta presentar un hecho metodológicamente científico (es un libro genealógico, no cronológico), pues muchos de sus puntos no son observables. No estamos lidiando con instrucción de ciencia, sino con instrucción de fe.

En Génesis vemos un Dios Creador de todas las cosas, que es personal, y que por más que no entendamos, Él quiere una relación íntima con el hombre. Nuestro Dios no es como ellos, de acuerdo a Jeremías 10:1-16.

Jeremías 10:16.- 16 No es así la porción de Jacob; porque él es el Hacedor de todo, e Israel es la vara de su heredad; Jehová de los ejércitos es su nombre.

• Afirmación de que el sacrificio de Cristo fue el fracaso de Dios.

Esta afirmación es el colmo de la herejía, cuando fue el sacrificio de Cristo el que obró la salvación del hombre y esto es un don inefable del Dios de los cielos que se despojó a sí mismo para obrar tan grande redención (Isaías 53:4-6).

Isaías 53:4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. 
5 Más él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
6 Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; más Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.

• Afirmación de que el infierno no existe.

En San Lucas 16:19-31, Jesús narra una parábola que nos aclara varios puntos sobre el infierno (ver Figura 48).

Figura 48. La realidad del infierno (el autor)

Es pues el infierno (ver Figura 49):

• Un Lugar de tormento eterno (Mateo 5:22; 2 Pedro 2:4)
• Desconocemos su dimensión, pero no por ello podemos decir que es irreal, como pretende hacer ver el papa.
• Fue creado por Dios para el diablo y sus ángeles, no para el hombre. (Mateo 25:41; 2 Pedro 3:7; Juan 3:16)
• El diablo nunca estuvo en el cielo, como pretenden hacer ver muchas denominaciones cristianas, es un ser creado con el fin de desarrollar en el hombre el LIBRE ALBEDRÍO. Dios no obliga a nadie (Génesis 1:26-31; 2:16-17)

Figura 49. Características del infierno (el autor)

• Afirmación de que Dios no tiene una sola Iglesia, que todos los caminos conducen a Dios, no importa la religión que se practique se va al cielo.

Esto sencillamente no es verdad. Cristo tiene una sola Iglesia, la cual es su cuerpo y es su Redentor, el Reino de Dios entre nosotros. Él es el único camino para el hombre, sea cubano, norteamericano, hindú, chino, etc. (Juan 3:16, 14:6). La prédica de lo contrario trae una confusión muy grande y peligrosa para la salvación de los hombres. Es precisamente el Ecumenismo un movimiento que distorsiona completamente el hecho de UNA SOLA IGLESIA en el mundo comprada por Cristo (ver Figura 50)

Figura 50. El Ecumenismo, paso inicial para una religión mundial, como parte de un Nuevo Orden Mundial (Facebook.com/findelsiglo)

Este es el panorama actual de la Iglesia Católica, y este es el peligro que se cierne sobre la raza humana. Todo unido a la rapidación^[35] como fenómeno envolvente que destruye la espiritualidad del hombre y la destrucción paulatina que éste hace de su medio ambiente están dirigidos a la destrucción espiritual del hombre, y la Iglesia de Dios debe estar consciente de estas verdades para prepararse contra estos peligros.

• El Sistema Católico se ha erigido como la base de todo sistema blasfemo contra Cristo y sus santos (Apoc. 17:3-6) De ahí que se vea como la cabeza de todo espíritu anticristiano.
• Apoya a todo sistema que se opone a Cristo, dándole abrigo espiritual y gubernamental, es decir, a todos los sistemas que le hacen imagen a la bestia católica (Apocalipsis 13:11-18) Son los sistemas (por ejemplo, el Denominacionalismo) y otros muy alejados de la realidad de la salvación de Cristo y de la unidad por la cual el Maestro oró (Juan 17) que se apartan de los santos, pues no son santos, y tienen tergiversado el concepto de unidad de la Iglesia.
• En este tiempo muchos dicen tener la verdad, y confiesan de Cristo, pero ¿cómo está su testimonio? Y si tienen la verdad, ¿qué espíritu tienen?
• Se trata de un espíritu desarrollado en todos los períodos de la Iglesia de Dios.
• De ella saldrá la octava bestia, que se constituye el último enemigo siniestro de la Iglesia de Dios.
• Dios nos ayude a estar apercibidos de este enemigo encubierto que tratará de destruir la Iglesia de Dios en este último tiempo.

Ahora vemos a la octava bestia con la que estamos lidiando hoy. Se le llama así porque es una conglomeración de todas las bestias anteriores, incluyendo aquellas que aparecen en el libro de Daniel. Se trata del movimiento ecuménico de las iglesias alrededor del mundo, donde vemos reunidos a católicos, protestantes, metodistas, bautistas, religiones del medio oriente y hasta comunistas. Cierto gobernante comunista, mientras hacía morir de hambre al pueblo, mandaba representantes a África con muchísimo dinero con el propósito de ayudar al consejo ecuménico de iglesias. Es por ello por lo que en estos encuentros podemos encontrar rabinos, obispos, además de gurús hindúes.

No hace mucho tuvo lugar uno de esos servicios en Tampa, donde aparecía además uno de esos doctores africanos danzando. Así es que el alcalde de la ciudad quería mostrar cuán unidos estamos en esta ciudad, sin importar en qué creyeras, fuera en el aborto, la fornicación, el feminismo o todo tipo de desviación sexual. Lo importante es que estén todos unidos. En la imagen los vemos a todos juntos y encima de ellos a Babilonia la grande, la madre de todas las rameras (Apocalipsis, capítulo 17). ¿Por qué son prostitutas? Porque Babilonia la Grande, que es la Iglesia Católica, es la madre de todas las denominaciones que salieron del falso profeta. Si le preguntamos a los protestantes cuál es la madre iglesia, dirán con certeza que es la Iglesia Católica Romana. Sin embargo, la Iglesia de Dios es la madre de todos nosotros (Gálatas 4:26), la cual descendió del Cielo (Apocalipsis 12:1), producida por el Señor mismo, saliendo del costado de Jesucristo en la cruz del Calvario. Esa es la razón que es llamado como el Segundo Adán, porque Eva salió de su costado. Por eso es por lo que Él nos protege y estamos bajo Sus alas (Romanos 5:12-19)

Vemos a la Iglesia dando hijos a Jesús, parada sobre el mar de vidrio. ¿Cuántos tienen el mar de vidrio con ustedes? La Palabra dice que la Biblia es como un espejo que cuando la abres te puedes ver en ella, y si estás mal, puedes notarlo. Esto solo lo oirás en la Iglesia de Dios, columna y baluarte de la Verdad, la cual está firme en el mar de vidrio mezclado con fuego, refiriéndose al fuego del Espíritu Santo y la Palabra. Ambos son los Dos Testigos, a los que vemos sobre una nube, juntos, sobre los que estamos parados. Lo que dice la Palabra, el Espíritu Santo lo respalda. No podemos tomarlos por separado, pues siempre están en común acuerdo. Si seguimos su testimonio, nunca caeremos.

Estamos en este tiempo, y es por eso por lo que el diablo está luchando tan fuerte contra la Iglesia. ¿A quién le habla el Señor ahora? A ti, y te está diciendo algunas cosas que solamente Él y tú sabes. ¿Estás tú en el mar de vidrio mezclado con fuego, o estás de acuerdo con la octava bestia, con todo lo que es aceptado por la mayoría, aunque sea malo, y tienes temor de llamarlo por su nombre? El pueblo de Dios siempre ha tomado una decisión. Daniel lo hizo y terminó en la fosa de los leones (Daniel 6:1-17), pero ahí mismo el Señor les cerró la boca. Igualmente, los tres varones hebreos por no acatarse a las leyes humanas fueron arrojados en el horno de fuego ardiente, pero terminaron dentro con el hijo de Dios (Daniel 3:16-30)

Gracias al Señor por los que han tomado esa determinación. ¿Para quién trabajas tú? ¿A quién promueves con tu testimonio? En Apocalipsis 4 vemos el trono de Dios y a los veinticuatro ancianos, símbolos de las doce tribus de Israel o la vieja dispensación del Antiguo Testamento, y a los doce apóstoles, símbolos de la nueva dispensación del Espíritu en el Nuevo Testamento.

 Apocalipsis 4:6-7 nos habla de un trono donde aparecen los cuatro seres vivientes, a los que llaman así para no confundirlos con las otras bestias, las cuales tenían apariencia de león, águila, de hombre y becerro. Estas son las cuatro características de la Iglesia. La razón por la que el Señor me dijo esto antes de que comenzara la serie, es porque nunca entenderemos qué es la Iglesia hasta que no nos demos cuenta de que la misma está formada por seres humanos. ¿Puedes entenderlo? Muchos tropiezan y caen, por causa de aquellos que se llaman Iglesia, que son afectados al no reconocer que la Iglesia no es una organización sino un organismo. Hay una gran diferencia entre ambas.

Puedes tener una organización con sus propias reglas y todo tipo de creencias, siendo un grupo organizado con un propósito específico. Pero un organismo es algo vivo. No daríamos nada a cambio por una de nuestras piernas, un ojo o un brazo. Cada uno de ellos nos completa como organismo. Somos el cuerpo de Cristo, unido por Su amor en nuestras coyunturas, uniéndonos como a uno solo. Esa es la diferencia entre la Iglesia de Dios y el mundo religioso. Ella es hermosa, así la describe la Palabra (Cantares 6:4)

Este ha sido el problema de muchos por tanto tiempo. Les encanta saber que la Iglesia tiene las características del león, y qué bueno que podemos ser como el águila, pero también debemos ser como el becerro sacrificial en poder decir no a nuestra propia voluntad (Romanos 12:1). Sin embargo, es en el rostro de hombre donde muchos se traban; en otras palabras, en nuestra humanidad. El hecho de que seguimos siendo humanos, pero tenemos que aprender cómo actuar, sin llegar a ser carnales.

Santos, necesitamos reconocer que somos humanos, de lo contrario eso trae consigo el chisme, las dudas en contra de los hermanos, el espíritu de sospecha y son las cosas que quieren tomar el primer lugar. Toda la Iglesia es santa, pero recordemos a aquellos que no son aún santificados, y que todavía son carnales. Tenemos que soportarnos los unos a los otros, dejar de mirar a los demás y concentrarnos en nuestra propia vida. ¡Cuidado con la cara de hombre! Tenemos que saber que no podemos concentrarnos en nuestra humanidad mientras muchos se van al infierno preocupados porque alguien no lo saludó. Algunos se ofenden porque un hermano no le saluda, así que se creen con el derecho de dejarles saber cómo se sienten. Ella tenía que saludarme porque yo soy yo. Y ahí está el problema, en el “yo”.

Cuando olvidamos que la Iglesia está formada por seres humanos, tenemos que chequearnos a nosotros mismos y preguntarnos si hemos recibido al Espíritu Santo desde que hemos creído. Si la gente te molesta de tal manera, mírate y es probable que no seas santificado todavía. Estos estudios bíblicos son para ayudarnos a vivir conforme a la voluntad de Dios.

Él nos enseñará a volar como las águilas, a vivir una vida sacrificada como un cordero, poder rugir como un león. Pero recordemos siempre que somos humanos y la Biblia nos enseña que debemos tratarnos y amarnos los unos a los otros no como una organización, sino como un organismo.

El punto es que estamos al final del cartel. Todo lo que queda es la segunda venida Cristo. ¿Estás listo? Que el Señor nos ayude y que podamos llegar al cielo, nuestro hogar celestial (Anna Figueroa, Pastora de la Iglesia de Dios en Tampa, FL, EEUU)

7.5 La victoria final del Reino de Cristo

Es importante notar que el poderoso ejército de redimidos por la sangre del Cordero ha obtenido la victoria tanto en el orden individual como en el comunitario sobre la bestia, su imagen, su marca, y el número de su nombre (Apocalipsis 13:17), es decir el triunfo se ha verificado sobre toda religión falsa, sobre todo el ejército de Satanás, sobre la carne y sobre el mundo. Esto le da honor y gloria a Aquel que bajó de los cielos y vino al mundo a padecer porque su amor era grande y nos quiso socorrer muriendo en la cruz del Calvario para darnos salvación cumpliendo la gran misión de establecer su reino en el corazón de los hombres. Ese Rey de los Santos cuyo nombre es precioso, maravilloso y poderoso al fin ha vencido, ¡aleluya! Ante Él los enemigos de su reino han caído (Apocalipsis 19:1-8) tras ruda lucha espiritual, la gran ramera del diablo por fin será juzgada de acuerdo a sus macabros hechos, vengando la sangre de sus siervos de todas las edades. Todos estos espíritus inmundos serán atormentados por los siglos de los siglos, mientras que los santos de Dios gozarán de perfecta paz y gozo en el cielo junto a su Dios que reina y reinará por la eternidad. Como vimos en el epígrafe 2.5 el Jinete del caballo blanco, llamado Fiel y verdadero se ha enfrentado con sus ejércitos a todo espíritu de error y pecado y los ha vencido en esta grande y espiritual batalla final.

1 Después de esto oí una gran voz de gran multitud en el cielo, que decía: ¡Aleluya[36]! Salvación y honra y gloria y poder son del Señor Dios nuestro; 
2 porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella.
3 Otra vez dijeron: ¡Aleluya! Y el humo de ella sube por los siglos de los siglos.
4 Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron en tierra y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y decían: ¡Amén[37]! ¡Aleluya! 
5 Y salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los que le teméis, así pequeños como grandes.
6 Y oí como la voz de una gran multitud, como el estruendo de muchas aguas, y como la voz de grandes truenos, que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro Dios Todopoderoso reina! 
7 Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado. 
8 Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.

No es el Armagedón como muchos predican (ver Anexo 1). La confusión religiosa se ve bajo los nombres de Gog y Magog profetizados por el profeta Ezequiel en los capítulos 38 y 39.

Lo importante de este conflicto final es que a esta hora ya está en completa efervescencia las bases que lo apuntalan, existiendo ya una confederación de falsas religiones que se han unido para presentar guerra espiritual contra el Reino de Cristo (Apocalipsis 20:7-15), como vimos en epígrafes anteriores. Pero Cristo debe reinar hasta que ponga a todos sus enemigos de rodillas ante su presencia, llorando por su gran derrota (Salmo 110:1-3) El fuego de Dios los devorará completamente (Apocalipsis 20:10) Otro evento importante que sucederá al unísono es la resurrección final de todos los muertos que destruirá el último enemigo del Rey, o sea, la muerte. Aquí termina la primera fase del Reinado del Señor Jesucristo: Su Reino Redentor. A partir de aquí la oportunidad de salvación para el hombre termina, y es tiempo del juicio final, para juzgar las obras de todos ante el Gran Trono Blanco (Ver Anexo 1) Este Reino Redentor abarcó dos propósitos: el primero destruir todo poder antagónico y enemigo de su Reino, y el segundo restaurar todo lo que se había perdido debido a la caída inicial del hombre en Edén (Génesis 3)

Cristo ahora reina en un trono mediador, intercediendo por toda la raza humana ante el Padre, el cual mira su sacrificio, y no nuestros yerros, ¡gloria a Dios!

Hechos 3:19 Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio, 
20 y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; 
21 a quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por boca de sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo.

Ahora bien, la segunda fase del Reinado de Cristo es muy distinta ya que se sentará como juez. Ya el mundo andará sin abogado, sin Salvador, abandonado a su suerte. Será el juicio ante el Gran Trono Blanco de Apocalipsis 20:11-12. Allí toda rodilla se doblará, quiera o no, y toda lengua confesará, quiera o no, la gloria del Padre (Romanos 14:11-19), y reconocerán a Cristo como el Rey de reyes y Señor de señores. Es entonces que se oirá con voz aterradora y de juicio: Alejaos de mí, malditos al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles (Mateo 25:41) Es entonces que Cristo recibirá a sus santos que han lavado y emblanquecido sus ropas espirituales en la sangre del Cordero (Apocalipsis 22:14) Estos santos recibirán al Señor en el aire (1 Tesalonicenses 4:17), ante la vista de todos (Apocalipsis 1:7). Es la oportunidad esperada por el Padre de presentarle el éxito, la cosecha del sacrificio del Rey Amado (1 Corintios 15:24) Termina así la obra redentora del Señor, desde que fue ungido por el Espíritu Santo en su bautismo en el Río Jordán por Juan el Bautista (Mateo 3:13-17), siguió con el anuncio de que su reino había comenzado entre los hombres (Lucas 17:20-21, Mateo 4:17), hasta la escena tremenda del juicio para todos, el malvado con su castigo y el justo recibiendo su premio de vida eterna. Todo este trabajo fue ejecutado por el Rey de reyes. El Padre le encomendó toda esta gran obra (Efesios 1:10; 3:4:8-13), y Él la cumplió a la perfección, y ahora ya está preparado para entregar el Reino al Padre para siempre jamás.

¿No es el Reino de Cristo, un Reino triunfante?

Claro que lo es, ¡gloria a Dios!

CONCLUSIONES

Terminadas las ideas que me había formado para la actualización del folleto acerca del Reino Triunfante de Cristo escrito por Riggle hace muchos años, noto que quizás me haya quedado un poco corto dado el gran volumen de información que este bello y extenso tema puede llevar. Desde la Introducción de este trabajo me había propuesto este atrevido intento, y evaluando el asunto creo haber llenado en algo las expectativas de este objetivo. Repito que la Iglesia de Dios, o sea el Reino Triunfante de Cristo vive en estos momentos una nueva etapa, distinta a la que vivió Riggle, ya que como afirmábamos, el tiempo del fin de las cosas está cerca, el diablo hace ingentes esfuerzos aún por destruir la Iglesia y la esperanza que Dios ha puesto en los corazones de los santos de Dios, el error cada vez está tomando más y más terreno en el campo religioso, nuevas doctrinas y enseñanzas que terminan abrazando un evangelio light pululan en el mundo denominacional, amenazando con destruir la sana doctrina en las vidas de los hombres. Además la práctica del pecado cada vez se hace más desvergonzada y profunda.

Pero la Iglesia de Dios ha de permanecer firme en las doctrinas sanas de nuestro Rey de reyes y Señor de señores, esperando por su venida que ya está muy cerca.

Este pequeño esfuerzo está dedicado a la Iglesia de Dios en Cuba. Nuestro país se ha alejado peligrosamente de la sana doctrina del Señor, y vive en estos momentos una crisis en todos los sentidos, sobre todo en el orden espiritual, que demanda de la grey de Dios una actitud mucho más firme y comprometida hacia fuera de sus puertas que hacia dentro de ellas. Nuestro país necesita que se le explique y se le haga conocer la sana doctrina que ahora está enrarecida y se quiere pervertir (Gálatas 1:6-9) El mundo denominacional con sus paquetes de doctrinas ha copado el mundo cristiano cubano, el paganismo se ha enraizado mucho más en nuestro pueblo, y el pecado en sus formas más blasfemas ha llegado a nuestros hogares, escuelas, centros de trabajo; aunque, en cierta forma, más tarde que en otros países. La situación entonces es espiritualmente desesperada y se requiere que la verdad sea predicada y vivida de acuerdo a lo que Cristo expresara a la mujer samaritana: en espíritu y en verdad.

Espero que este atrevido intento pueda ayudar a los santos de la Iglesia de Dios en Cuba, sobre todo a aquellos que se preparan como obreros para cumplir la bendita y noble misión de llevar la sana doctrina al pueblo, así como aquellos que habiéndonos formado con el precioso folleto de Riggle, hoy experimentamos un nuevo escenario de la verdad revelada y necesitamos un nuevo toque doctrinal.

Ruego a Dios que muchos puedan llegar a la lectura y estudio de este artículo, y si de alguna manera ha servido de ayuda doy gracias a Dios por ello, y espero, además, por alguna que otra recomendación, adición o sustracción a este esfuerzo.

Doy gracias a mi Dios por permitirme escribir acerca de sus cosas. Me gusta hacerlo, y siento que mi vida se hincha de gozo al mover mis manos, cerebro y corazón, y así poder servir de alguna ayuda.

EL ESCRITOR

BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA

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• Cabrera, Ángela. Israel – El primer templo en tiempos del rey Salomón entorno al 952 a.C.
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• Comentario al Nuevo Testamento por Partain.
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• Leicea Yins, Luis Manuel. La realidad del infierno, enero 2023.
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• Versión Nuevo Mundo de la Biblia Watchtower de los Testigos de Jehová.
• Versión Reina Valera 1960 de la Biblia.
• Wikipedia, Profecías mesiánicas.
• Wikipedia. Enciclopedia Libre.
• Willmington. Auxiliar Bíblico Portavoz.

ANEXOS

ANEXO 1. Monte Sión

Figura 1. Monte Sión (Wikipedia, Enciclopedia libre)

En el Salmo 87:2-3 dice que Sión es sinónimo de ciudad de Dios, y es un lugar queDios ama. Sión es Jerusalén. El monte Sión es la alta colina sobre la que David construyó una ciudadela. Se halla en el lado sureste de la ciudad de Jerusalén.

La palabra Sión aparece más de 150 veces en la Biblia. Significa esencialmente “fortificación” y tiene la idea de ser “levantada” como un “monumento”. Sión es descrita tanto como la ciudad de David como la ciudad de Dios. En la medida en que avanza la Biblia, la palabra Sión amplía su alcance y adquiere un significado espiritual adicional.

La primera vez que se menciona Sión en la Biblia es en 2 Samuel 5:7: “Pero David tomó la fortaleza de Sion, la cual es la ciudad de David“. Sión era originalmente una antigua fortaleza jebusea en la ciudad de Jerusalén. Tras la conquista de la fortaleza por David, Jerusalén pasó a ser posesión de Israel. Allí se construyó el palacio real, y Sión/Jerusalén se convirtió en la sede del poder del reino de Israel.

Cuando Salomón construyó el templo en Jerusalén, el significado de Sión se amplió aún más para incluir la zona del templo (Salmo 2:6; 48:2, 11-12; 132:13) Este es el significado que se encuentra en la profecía de Jeremías 31:6: “Levantaos, y subamos a Sion, al Señor nuestro Dios“. En el AT, Sión se utiliza como nombre de la ciudad de Jerusalén (Isaías 40:9), de la tierra de Judá (Jeremías 31:12) y de la nación de Israel en su totalidad (Zacarías 9:13)

La palabra Sión también se utiliza en sentido teológico o espiritual en las Escrituras. En el AT, Sión hace referencia a Israel como pueblo de Dios (Isaías 60:14). En el NT, Sión se refiere al reino espiritual de Dios. No hemos venido al monte Sinaí, dice el apóstol, sino “al monte de Sion, a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial” (Hebreos 12:22). Pedro, citando a Isaías 28:16, se refiere a Cristo como la Piedra Angular de Sión: “He aquí, pongo en Sion la principal piedra del ángulo, escogida, preciosa; y el que creyere en él, no será avergonzado” (1 Pedro 2:6).

Anexo 2. Paquete doctrinal escatológico del Denominacionalismo

Permítaseme expresar que cada una de estas doctrinas fue inventada hace muy poco tiempo, tal vez en el siglo XVIII o XIX, así que son relativamente jóvenes y son como especie de un paquete que, si bien no hallan sostén en la Palabra de Dios, todas, una a una, se caen por su inconsistencia. Algunos datos ya observados dentro del volumen del artículo los estamos repitiendo aquí en este paquete, pero entendemos que es válido.

1. RAPTO DE LA IGLESIA

La primera de las doctrinas de este paquete es la del Rapto de la Iglesia para una supuesta boda en el cielo. La Figura 1 muestra una imagen del rapto de la Iglesia. Primeramente, debo decir que Jesús no tiene que raptar (arrebatar, secuestrar, tener un impulso brusco hacia su Iglesia, ocasionado por algún tipo de estado pasional.

Figura 1. Rapto de la Iglesia (Wikipedia)

Jesucristo vendrá al fin del tiempo, pero será una venida visible y gloriosa que nadie podrá ignorar. Será entonces cuando ocurrirá el juicio final; vivos y muertos serán llevados de este mundo a la presencia del Señor. No existirá un “rapto secreto” anterior al fin del mundo. Cuando venga el Señor esto será un hecho paralelo al fin de los tiempos.

1. El llamado Rapto no es tal, pues dice la Palabra de Dios que todo ojo verá al Señor cuando El venga, no viene a escondidas. (Apocalipsis 1:7, Hechos 1:10-11, Mateo 24:27)
2. Coincide con la Segunda y última Venida de Cristo.  El evento será visible y manifiesto. El vino la primera vez para relacionarse con el pecador y salvarlo, pero una segunda sin relación con el pecado para llevar a su pueblo, que le espera (Hebreos 9:28). Un paralelo con el Diluvio Universal expresa la misma idea (Mateo 24:36-42).
3. En ese momento se hace la separación de justos e injustos (Juan 5:28-29 y Mateo 24:30-31 que es una parábola con la misma idea).
4. Se basa en una mala interpretación de Mateo 24.

2. GRAN TRIBULACIÓN

Este tiempo, según los inventores del milenio será de grandes plagas y tribulaciones que habrá al final del tiempo y antes del Milenio, otra doctrina falsa que explicaremos más adelante.  La ira de Dios se derramará en abundancia sobre los servidores de Satanás. Este será el fin del desarrollo del pecado en la tierra. Mientras el pecado prevalecía, la tierra se volvía cada vez más corrompida y devastada. Pero al final de todo esto, Jesucristo regresará junto a los ejércitos del cielo y comenzará un tiempo glorioso y de sanación en la tierra (1 000 años).

En el verso V3 de Mateo 24, los discípulos hicieron 2 preguntas a Cristo:

1. ¿Cuándo sería la destrucción del templo?

2. ¿Qué señal habría de su venida y del fin del siglo?

2. El Señor debió responder ambas interrogantes:

• V4 -14.- Él les habló del fin del mundo (señales antes del fin, guerras, terremotos, pestes, etc.)
• V15 – 22.-…cuando veáis en el lugar santo (templo)…Les habló de la destrucción del templo llevada a cabo por Tito en 70 dC.
• V23 – 51.- Otra vez les habla del fin del mundo (aparición del Señor, envío de los ángeles para juntar a los escogidos, como los días de Noé, etc.). En los versos V40-41, tomados incorrectamente por los inventores del Rapto, se nos da el cuadro gráfico de la raza humana dividida en dos grupos; el uno esperando la venida de Cristo, el otro viviendo de espaldas a este acontecimiento (…entonces estarán dos en el campo, el uno será tomado y el otro dejado, dos mujeres en un molino (molinillo manejado por dos mujeres todavía visto en Palestina), la una tomada y la otra dejada…). Los versos del 42-51 nos habla de que no sabemos cuándo ha de venir nuestro Señor, por ello debemos velar (o sea, estar bien despiertos).

Así que la destrucción de que habla este capítulo ya ocurrió. Se refiere a la abominación desoladora (algo detestable que causaría desolación en el templo) de dos momentos de la historia que tanto Daniel como Jesucristo refieren: la profanación de Antíoco Epífanes en 167 a.C. (destruyó las escrituras judías, suspendió el ritual del templo y prohibió la observancia de las leyes mosaicas; Daniel 9:27; 11:31; 12:11) y al de Tito Flavio Sabino Vespasiano (30.12.39-13.09.81) al conquistar y arrasar la ciudad de Jerusalén y el templo en abril-septiembre de 70 d.C. El Señor lo había predicho antes en Mateo 23:37-39. Según los milenaristas será un tiempo caracterizado por lo siguiente:

1. Tiempo antes de la Manifestación y venida de Cristo que durará 7 años (3 años y medio de aparente paz mundial y 3 años y medio de guerras a escala global, terremotos, pestes, etc.). Estas señales serán para los cristianos motivo de alegría porque les anuncia que su salvación se acerca (Lucas 21:25-26, 28; 21:28)
2. Gobernarán en la tierra el Anticristo (un líder político mundial), el Falso Profeta que es un líder religioso ecuménico y la Bestia que es el dios de la religión del futuro.
3. En 2 Tesalonicenses 1:6-9 es descrita.
4. Comienza con la proclamación de paz y seguridad (1 Tesalonicenses 5:3).

Así que no hay que escapar de ningún país de forma súbita como muchos expresan con temor, ni acercarse a las montañas del Escambray o de la Sierra Maestra en Cuba para escapar de esa tribulación. Se refiere, repito al tiempo pasado cuando la ciudad de Jerusalén fue atacada y sometida por los romanos.

• MILENIO

La Figura 2 muestra la interpretación del milenio que hacen muchas denominaciones cristianas, y la 3 la de la Iglesia de Dios:

Figura 2. Interpretación del milenio por parte de muchas denominaciones cristianas (El autor)

Figura 3. Posición de la Iglesia de Dios acerca del milenio (El autor)

El capítulo 20 de Apocalipsis se refiere al milenio. Ahora se explica la interpretación cabal de este pasaje:

1. V1.- El ángel representa los ministros de Dios en la tierra, aquí los de la Iglesia Primitiva (Apoc. 1:20; 22:8-9). La llave es señal de autoridad para abrir y cerrar (Mat. 16:18-19, Apoc. 1:18 y Mat. 18:18). La cadena es para atar a los espíritus malignos fuertemente. No es literal. A los espíritus no se les puede atar (Luc. 8:29; Mar. 3:27).
2. V2.- Buscar paralelo con Apoc. 12:9. Allí el Dragón (Paganismo) aparece echado del lugar de exaltación (los corazones de los hombres) y aquí encadenado para que no funcione por 1 000 años en que la Bestia (Catolicismo) reinó sin oposición.
3. V3.- El abismo es un lugar terrenal, sin fundamento (Apoc. 9:11; 11:17; 17:8). Es un lugar de destrucción espiritual, no aniquilación.
4. V4.- Los 1 000 años son los profetizados para la Iglesia de Esmirna (530-1530; Apoc. 2:10). Es también el tiempo que la mujer (Iglesia) huye al desierto (Apoc. 12:6) donde es sustentada por 1 260 días. El Catolicismo (Bestia) pudo reinar abiertamente por 42 meses (Apoc. 13:5). También el tiempo donde Juan no pudo ver la Iglesia visible sino solo las almas de los que habían muerto por Cristo (Apoc. 6:9). Estos son los muertos físicos.
5. V5.- Los muertos espirituales no volvieron a vivir hasta que se cumplieron 1 000 años. Esto se refiere a que después del gobierno de la Bestia Católica los muertos pudieron volver a vivir tras la herida infligida a esa bestia por los reformadores del Siglo XVI (Apoc. 13: 3a). Esta es la primera Resurrección, la espiritual.
6.   V6.- Existen 2 resurrecciones:

• LITERAL: Jn. 5:28-29. La que experimentarán todos los muertos a la llegada del Señor.
• ESPIRITUAL: Jn. 5:25-26.

           Habrá un orden de resurrección (2 Tes. 4:16-17)

• Cuando nacemos de nuevo, y experimentamos la primera resurrección somos felices y santos. La segunda muerte que es el lago de fuego no puede tocarnos ya (Apoc. 20:14).

7.    V7.- Después de los 1 000 años, el dragón fue suelto de su prisión y se manifestó asomando su fea cabeza a través del Sistema Protestante que como el Dragón enseñaba muchos dioses y formas de adoración, esta Imagen de la Bestia enseña muchas formas de adoración y muchas maneras de llegar a Dios (Apoc. 13:11, hablaba como Dragón). El Sistema Protestante no cumple la oración de Cristo en Juan 17.

Los 1 000 años o Milenio es un período ya pasado en el cual la 1a. Bestia (Catolicismo) reinó sin oposición, después que el Dragón (Paganismo) fue atado por los ministros de Dios de la Iglesia Primitiva para no funcionar como lo había hecho. Tras cumplirse ese tiempo, este Dragón fue suelto de su prisión para engañar nuevamente, esta vez en forma más sofisticada, manifestándose en la 2da. Bestia (Sistema Protestante) que ofrece a la humanidad nuevas y variadas formas de adoración y nuevas formas de acercarse a Cristo, en contraposición a la oración del Maestro en Juan 17:20-23. Dios permita que podamos comprender toda la dimensión de esta verdad.

4. LA IGLESIA, ¿NOVIA O ESPOSA?

Siempre en la Palabra se habla de la esposa de Cristo, no de la novia del Señor. Así que Jesús no tiene por qué raptar a su novia, porque ya Él tiene esposa.

1. En ningún pasaje de la Escritura se habla de la Iglesia como novia de Cristo; siempre como la esposa: Cantares 4:8, Isaías 62:5, Jeremías 3:14, Mateo 9:15, Juan 3:29, 2 Corintios 11:2, Apocalipsis 19:7; 21:2; 21:9; 22:17.

2. Desde que nos convertimos a Dios, nos casamos con Cristo, pertenecemos a su Iglesia. Dios no nos hace miembro de una denominación, sino de Su Iglesia.

3. Las Bodas del Cordero son una realidad presente (Mateo 22:1-14). Lo demuestra el hombre que no viste traje de boda, lo que indica que ese evento no puede ocurrir en el cielo. Apocalipsis 19:9a no dice los que fueron llamados, sino los que son llamados, lo que indica que es un hecho que se está verificando en la tierra, no verificado o a verificarse en el cielo.

4. Cristo viene con sus ángeles, no con sus santos (esposa, la Iglesia) (Mat. 16:27)

5. JUICIO FINAL, UNO SOLO, NO DOS

Respecto al juicio final podemos señalar lo siguiente:

1. Hay un solo juicio (no dos) para todos los hombres. (Mateo 13:24-30). No se recoge el trigo y después de mucho tiempo la cizaña, un evento es a continuación del otro. La separación es hecha en el mismo momento (fin del mundo). Mateo 13:41-43; 47-50.
2. El Señor se refirió al Día del Juicio en singular. Mateo 10:15; 11:22, 24; 12:36; y 41, 42.
3. Habrá un Juicio General (Mateo 16:27… a cada uno… Cristo viene con sus ángeles, no con sus santos (Iglesia) como predican los Milenaristas en la llamada Manifestación al final de la Gran Tribulación para la Batalla del Armagedón (2 Corintios 5:10; Romanos 14:10, Juan 5: 28-29, 2 Timoteo 4:1)
4. Los justos también estarán presentes en el Juicio Final (Mat. 19:28-29). Nadie puede evadir ese juicio.

6. ARMAGEDÓN

También hacemos aclaración de la batalla final que dicen que habrá entre Cristo y su Iglesia y las fuerzas del mal, o sea el Armagedón detallada en Apocalipsis 16:13-16 a desarrollar en el Valle de Jezreel.

1. Deriva de Meguido, lugar donde se desarrollaron las batallas de Israel contra sus enemigos (Siglo XV a.C., 608 a.C. y 1918). Ver Ezequiel 38 y 39.

2. En esta profecía se identifica con el nombre de Gog y Magog (V8).

3. Dios usa este ejemplo aquí como una lección espiritual, o sea el conflicto espiritual de la Iglesia con sus enemigos, donde la victoria de sus santos es segura (V9-10).

4. El mundo entero participará en esta batalla (V8b). Siempre ha habido en el mundo dos contrincantes en el campo de batalla, (Mateo 12:30)

Figura 4. Valle de Jezreel (עמק יזרעאל) (localización y foto) (Wikipedia)

7. EL GRAN TRONO BLANCO

Otra de las doctrinas que se predican hoy y no tienen basamento bíblico alguno es la del Gran Trono Blanco del Señor.

1. El Gran Trono Blanco y el Trono de Dios son la misma realidad.
2. Todos seremos juzgados ante la santidad de Dios, de ahí lo blanco del trono.
3. El juicio no es para decidir quién será salvo o no. Seremos juzgados por nuestras obras. Se trata de un juicio de recompensas o condenación por las obras que hagamos hecho en la tierra (V12).
4. En el infierno algunos tendrán más tormentos que otros, así como en el cielo unos tendrán más recompensas que otros. Todo se determinará ante el Gran Trono Blanco.
5. Una cosa es ciertísima: El que no se halle inscrito en el Libro de la Vida será lanzado en el lago de fuego (V15) junto a la Bestia, el Dragón y el Falso Profeta.

CONCLUSION

Estas lecciones sé que pueden resultar extrañas para algunos, y difíciles de comprender. Mi deseo es que puedan ser comprendidas al estudiarlas con detenimiento ya que hay falsos ministros que han salido por el mundo (Judas 3-25) a trastornar la fe de muchos e infundirles un temor grande. Estoy tratando de arrebatar del fuego a muchos, de ser engañada por tales maestros. Dios les bendiga ricamente.

ANEXO 3. Obras de la gracia de Dios a través de Jesucristo (Tomado en parte de mensaje de la Pastora Anna Figueroa, Tampa, Florida, Estados Unidos)

El sacrificio del Señor Jesucristo, o sea, la sangre derramada en la cruz del Calvario por nosotros los hombres, trajo dos tamañas bendiciones o dones, la salvación como primera obra de gracia que nos limpió del pecado por el cual somos responsables ante Dios, y la Santificación o bautismo del Espíritu Santo que nos liberó del pecado heredado del primer hombre Adán. Romanos 6:22 describe muy bien el hecho. Juan el Bautista profetizó esta experiencia del bautismo en el Espíritu Santo (Juan 1:32-34)

22 Más ahora que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna.

Esta cita trata de lo que Dios ha hecho con nosotros en tres tiempos; presente, pasado y futuro.

Pasado: Habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios (SALVACIÓN).

Presente: Tenéis por vuestro fruto la santificación (SANTIFICACIÓN).

Futuro: Y como fin la vida eterna (GLORIFICACIÓN).

Así que acerca de la Santificación debemos apuntar varias cuestiones:

La santificación no es un tema retórico para dejarlo a merced de una discusión entre teólogos. ¡Es un tema muy importante para Dios y para los cristianos (1 Tesalonicenses 4:3)! Para poder recibir la vida eterna debemos haber sido santificados. Si no hemos sido santificados tampoco podremos entrar en el Reino de Dios (Hebreos 12:14). Por lo tanto, es fundamental su significado en las vidas.

“La idea dominante de la santificación, por lo tanto, es la separación de lo secular y pecaminoso, y ser apartado con un propósito sagrado” Diccionario bíblico de Unger.

En el Antiguo Testamento: La palabra hebrea para el verbo “santificar” es qadash y significa “consagrar”, “dedicar”, “reverenciar”, “purificar”, “(ser, mantener) santo” (Concordancia Exhaustiva de la Biblia de Strong #6942).

En Nuevo Testamento: La palabra griega para “santificación” es hagiasmos, y significa “separación, una separación” (Diccionario Bíblico de Unger, “Santificación” p. 965).

Cristo a través del agente santificador, el Espíritu Santo, es el que santifica:

“Porque el que santifica y los que son santificados, de uno son todos; por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos” (Hebreos 2:11).

“Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir. El me glorificará; porque tomará de lo mío, y os lo hará saber” (Juan 16:13-14).

Dios está interesado en santificar a un pueblo al llamarlo para que saliera de este mundo (Juan 17:14-18, 1 Tesalonicenses 5:23)

Este llamamiento incluía no solo a los judíos, sino también a los gentiles. Veamos Efesios 3:6.

Efesios 3:6 que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio,

• Dios santificó a Jesucristo para que hiciera su voluntad (Juan 10:36; Juan 5:30), lo que incluía que Cristo muriera por nosotros. Nosotros somos santificados a través de la sangre derramada por Jesucristo (Hebreos 13:12)
• Dios y Jesucristo deseaban esta santificación para las personas. ¿Por qué? Así como el antiguo Israel iba a ser el pueblo de Dios, ahora la Iglesia va a ser su pueblo, su nación santa. De hecho, en 1 Corintios 1:2 se refiere a la Iglesia de Dios como santificada. Ver también Tito 2:14.
• También vemos en 1 Pedro 2:9-10 la misma verdad.
• De la misma manera que el antiguo Israel debía alejarse del pecado y ser obediente a Dios, los cristianos (los seguidores de Cristo, o más bien, santos) también deben evitar el pecado (Romanos 6, 1 Tesalonicenses 4:3)
• Nosotros somos santificados por la fe en Cristo: “…por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados” (Hechos 26:18)
• Nosotros somos santificados por la verdad: “Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad” (Juan 17:17)
• Nosotros somos santificados por el sacrificio de Cristo: “porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados” (Hebreos 10:14)
• Nosotros somos santificados por Dios (Judas 1)
• La santificación es administrada por el Espíritu Santo, no es un acto de consagración (orar más, servir más, adorar más); sino algo sobrenatural operado en el cristiano. “Y esto erais algunos [pecadores]; mas ya habéis sido lavados, ya habéis sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios” (1 Corintios 6:11)
• En el Antiguo y Nuevo Testamento hubo personas santificadas. En cada caso, Dios “apartó” espiritualmente estas personas del mundo que los rodeaba (Éxodo 19: 5-6) Dios todavía quiere un pueblo santificado, separado del mundo de pecado y maldad. Él quiere la santidad y la santificación de la mente, el espíritu, el pensamiento, el cuerpo y las acciones. Él quiere una nación espiritual, su propio pueblo especial, que proclame las alabanzas de Dios, que refleje sus valores y su carácter (Tito 2:14)

La Figura 23 nos muestra la transición de los estados del corazón humano desde la creación de Dios hasta la obra de la Santificación como segunda obra de gracia que Cristo compró en la cruz. La semilla del pecado está sembrada en el corazón infante ya que fue traída desde la caída del hombre en pecado en Edén (Génesis 3, Romanos 5:12-21) Esta semilla se torna un árbol frondoso representativo de los múltiples pecados en los cuáles caemos estando sin Cristo (Efesios 2:1-3), pero cuando el Señor nos resucita de esa vida pecaminosa, cuando por fe nos convertimos a Él, Cristo corta ese árbol, perdonando todos nuestros pecados (Efesios 2:4-9), pero queda la raíz del pecado. Pero, ya con la Santificación, segunda obra de gracia aceptada también por fe, esa raíz que había quedado en el corazón es arrancada de una vez y el hombre vive una vida de poder alejada del pecado y de servicio para Dios.

Figura 1. Las tres condiciones del corazón (Tomado de mensaje de Pastor Anna Figueroa, Iglesia de Dios, Tampa, FL)

La salvación es para muchos un proceso fácil de experimentar, y de vivir, pero la Santificación es un paso más hacia Dios, hacia la perfección que Él nos ordena, es una victoria rotunda sobre el maligno, es una situación de vivir en el poder del Espíritu Santo.

La gente complica la Santificación. Primero debemos entender que fuimos hechos a imagen y semejanza de Dios desde la creación, según Génesis 1:26.

Dios puso en Adán un corazón puro, incapaz de querer hacer el mal y con capacidad para tomar sus propias decisiones. Pero cuando el hombre cayó de la gracia (Génesis 3), su descendencia ya no poseía la semilla original. De Caín, todo hombre nacería no a la imagen de Dios, sino de Adán, con una naturaleza carnal pecaminosa o tendente al pecado.

Entonces esa vida de pecado es manifiesta por las obras de la carne que Pablo destaca en Gálatas 5:19-21. Pero gracias a Dios que cuando estábamos muertos, o separados de Dios, en pecados, Él nos resucitó a vida nueva en Cristo (Efesios 2:1-6)

Sabemos que un niño no es culpable de su naturaleza caída, y si comete un pecado, no será culpable, porque no se da cuenta de que ha hecho algo malo ante Dios. Pero a medida que crece y conoce la diferencia entre el bien y el mal, asume la responsabilidad de sus acciones y del pecado cometido. El mismo Jesús bendijo a los niños, y agregó que el que recibe a Cristo como un niño, con inocencia, no puede ver el Reino de Dios (Mateo 18:1-5, 19:14)

Después de ser salvos, somos cubiertos por la sangre de Jesús (Hebreos 9:22, Éxodo 12:7) y perdonados de todos nuestros pecados. Él nos da el poder de ser llamados hijos de Dios (Juan 1:12-13), y la Palabra dice que empecemos a ser como niños en Cristo (Tito 3:4-7) Ver Figura 2 con la prefiguración de Dios respeto a la salvación por la sangre, requisito de Dios para la expiación del pecado.

Figura 2. Muerte de un cordero y la sangre en los dinteles de la casas de los judíos (Éxodo 12:7) (Twitter)

El Espíritu Santo nos guiará para hacer lo correcto ante Dios y nos mostrará toda la Verdad. El Espíritu nos recuerda la Palabra de Dios. Si ignoramos los servicios cuando se predican, el Espíritu no tendrá manera de recordárnoslos. Por eso es tan importante prestar atención y pedirle a Dios que nos ayude a comprender la esencia de las Escrituras y atesorarlas en nuestro corazón. Cuando esto suceda, el Espíritu en nosotros nos recordará lo que se ha predicado (Juan 16:13-14)

La Biblia dice que de la abundancia del corazón habla la boca. Muchas veces, en medio de la oración, nos damos cuenta de que el Espíritu nos guía y nos hace saber cuál es la voluntad del Señor. Cuando tengamos la Palabra dentro de nosotros, predicará sobre la Verdad que hemos escuchado antes. La fe se adquirirá precisamente escuchándola (Romanos 10:17)

Las Escrituras que más necesitamos vendrán a la mente en el momento justo si tenemos el hábito de pedirle ayuda al Señor cada vez que leemos y estudiamos Su Palabra. Cualquier verdad que se nos predique o se escuche a través de un testimonio, un himno o alguna alabanza, comienza a formar parte de nuestra historia personal con Dios. Por eso es vital tomar nota de cada nueva Escritura que se nos enseña. Necesitamos la fuerza del Espíritu en nosotros para poder vivir la Palabra, siendo estos los dos testigos de Dios en la tierra (Apocalipsis 11). Aquellas vírgenes sensatas guardaban aceite en sus lámparas mientras que las insensatas lo descuidaban, aceite que simboliza al Espíritu Santo.

Sin embargo, necesitamos recibir la segunda obra de gracia o bautismo del Espíritu Santo porque cuando somos santificados, el Espíritu de Dios no solo nos acompañará y nos guiará para hacer el bien, sino que morará dentro de nosotros, dándonos el poder de quemar esa raíz adámica en nuestra naturaleza pecaminosa. Si no lo buscamos a tiempo, corremos el riesgo de dejarnos llevar por nuestra tendencia natural al pecado (Romanos 7:5). Sin el poder de la santificación, no podremos vencer las tentaciones que vendrán a nuestra vida. Tampoco podremos eliminar la raíz de amargura que el pecado hace crecer en nosotros (Hebreos 12:14-15) Ver Figura 3. Siendo justificados, la sangre de Cristo nos ha purificado, pero aún tenemos esa naturaleza carnal. Ya no somos culpables de los pecados cometidos en el pasado, pero estamos en peligro de volver a caer.

Figura 3. La raíz de amargura la corta la Santificación (Ilustración del mensaje de Pastora Anna Figueroa acerca de la Santificación)

En la cruz del Calvario, el Señor nos lava de todos los pecados cometidos, pero seguimos viviendo con una naturaleza caída. Si morimos en esta condición, vamos al cielo, pero no podemos vivir así por mucho tiempo ya que seremos tentados por dentro y por fuera, y en debemos pasar de inmediato a la segunda obra pidiendo al Señor que nos santifique. Ya no somos acusados de pecados pasados, y el diablo no puede culparnos. Sabemos quiénes somos ahora y lo que la sangre de Cristo ha hecho en nosotros. Lo único que puede mantenernos en absoluta obediencia al Señor es la Santificación.

Pablo nos cuenta en Romanos 7 acerca de su batalla contra el pecado, pero a medida que avanza en el capítulo 8, nos deja saber que somos liberados de la esclavitud del pecado una vez salvos (Romanos 7:14-25) No merecemos ser justificados, este es un don inmerecido de Dios, pero podemos retroceder si no buscamos la presencia del Espíritu Santo en nuestras vidas. El Espíritu de Dios nos llevará a toda la Verdad y aclarará cualquier duda. En el pasaje del Buen Samaritano, vemos que entregó los dos denarios (símbolo de la Palabra y el Espíritu) al dueño de la posada; no se la dio al azotado sino al mesonero, símbolo de los pastores que cuidan de nuestras almas (Lucas 10:25-37)

Cuando Jesucristo les dice a sus discípulos que vayan a Jerusalén y esperen la promesa del Espíritu (Hechos 1:4-5), este es el poder del que habló el Señor (Juan 14 y 16). Obedecemos, pero comenzamos a ver en nosotros mismos el fruto del Espíritu (Gálatas 5:22-25) Y hablamos de fruto porque un fruto es algo que crece y se desarrolla partiendo desde la semilla, luego pasa a la raíz, al tronco, las ramas, las flores y por último se convierte en lo que llamamos el fruto. Así es la obra del Espíritu Santo dentro de nuestras vidas. Todo comienza con la siembra de la semilla de la Palabra de Dios en nuestros corazones y continúa hasta que la misma da el fruto espiritual para lo cual fue sembrada. La cosecha que Dios espera recoger es el carácter cristiano que se desarrolla y madura siendo lleno del Espíritu Santo y guiado por él. Nuestro Salvador quiere reproducir dentro de nosotros su “naturaleza divina” (2 Pedro 1.4)

El Sermón del Monte comienza en Mateo capítulo 5 mostrándonos cómo debe ser el carácter del cristiano y lo hace por medio de las nueve bienaventuranzas. Este mensaje tan poderoso y cautivador concluye en Mateo 7 con las palabras tan definitivas y enfáticas del Señor: “Por sus frutos los conoceréis” (Mateo 7.16) La prueba del cristianismo verdadero siempre es el fruto de la semejanza del carácter de Dios en la vida de los cristianos (Mateo 5.44–45). No sería lógico escoger a un árbol malo y colocar en él buenos frutos. El fruto nace de la savia que está dentro del árbol. ¡El fruto artificial no se puede comer! En nuestra experiencia espiritual el crecimiento del fruto tiene su origen en el Espíritu Santo que mora en nuestro espíritu y echa raíces, ramas, flores y frutos (Salmo 1.1, 3)

Desde la santificación nos será más fácil seguir al Señor. Muchos no tienen una experiencia auténtica de santificación porque no salen limpios del pecado. Cuando ya estamos santificados, volvemos a tener el corazón puro que tenía Adán al principio (1 Corintios 6:9-11)

Los apóstoles fueron conducidos a Jerusalén para permanecer allí sin salir, permaneciendo unánimes en la oración. Según la Palabra, quinientos seguidores de Jesús lo habían visto ascender al cielo. Pero cuarenta días después, solo ciento veinte permanecieron en el aposento alto. El resto había preferido esperar la promesa fuera del aposento alto. Antes de Pentecostés, discutieron quién sería el más importante entre ellos una vez que Jesús partiera. Pero cuando el Espíritu Santo descendió sobre ellos, el tema de conversación cambió. Ahora todo lo que buscaban era predicar la verdad del evangelio a las almas (Hechos 2)

El mismo Pedro había negado a Jesús por temor a perder la vida, y a los pocos días algo había sucedido, y ese mismo discípulo se puso de pie ante una gran multitud y los acusó con valentía de haber llevado al Hijo de Dios a la cruz. ¡El poder del Espíritu Santo había hecho la diferencia! (Hechos 1:8, 2:14-40)

Después de ser santificados, lo primero que sucede es que comenzamos a obedecer por la fe, aunque a veces no entendamos lo que se nos pide. Muchos sentirán la necesidad de testificar y trabajar para el Señor una vez santificados. Cuando Jesús pidió a sus discípulos que le permitieran lavarle los pies, el mismo Pedro se negó a aceptarlo (Juan 13:1-20) Pero aunque no entendió, terminó obedeciendo. Sin embargo, una vez que fue santificado, pudo predicar con poder, y una multitud de más de tres mil fue salva en un día (Hechos 2:41)

No entendemos cosas sobre el estándar, cómo debemos vivir, pero cuando somos santificados, el Espíritu en nosotros nos guiará a toda la Verdad. Por lo tanto, la Santificación es tan importante. Cualquier deseo que alguna vez tuvimos de pecar o de las cosas del mundo es reemplazado por una genuina sed y hambre de trabajar para el Señor y consagrarnos a Él.

El Espíritu Santo quita nuestro deseo por todo lo mundano, provocando nuestra sed de Dios y de todo lo santo, dándonos así testimonio de que el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo moran en nosotros. La tentación ya no vendrá de dentro de nosotros sino de fuera. Jesús no nació con esa naturaleza carnal, y aunque fue tentado en todo, no pecó (Mateo 4:1-11) El Espíritu dentro de nosotros nos enseñará cómo escapar de las tentaciones. Lo primero que Jesús fue tentado dentro del desierto fue el pan después de un ayuno de cuarenta días. El diablo tratará de tentarnos con lo que apela a nuestra carne. Todo lo que debemos hacer es orar para recibir poder de Dios. Cada uno de nosotros individualmente sabe qué es lo que puede usarse para tentarnos. La Palabra nos exhorta en 1 Tesalonicenses 5:22, “Absteneos de toda especie de mal”. Adán miró el árbol del conocimiento del bien y del mal y fue tentado (Génesis 3:1-6) (Figura 4) Solo hay tres cosas a través de las cuales podemos ser atraídos: la vanagloria de la vida, los deseos de los ojos y los deseos de la carne. ¡Debemos huir de la tentación! (1 Juan 2:16-17, Santiago 1:12, 1 Corintios 10:13)

Figura 4. Adán y Eva en el Edén (Wikipedia)

De una forma u otra, nos enfrentaremos a las mismas tentaciones por las que habrán pasado otros seres humanos. Somos tentados a veces con cosas que nos toman por sorpresa, pero la Palabra misma nos dice que Dios es poderoso y que no seremos tentados más de lo que podemos soportar. El diablo nos trae una tentación, pero al mismo tiempo, el Señor nos muestra el camino para escapar de ella. Esa será nuestra decisión. El Señor nos da el poder y la fuerza para soportar cualquier prueba por fe. Todo lo que necesitamos es orar para que el Señor reprenda al enemigo de nuestra alma y nos dé la capacidad de no caer.

Acordémonos de José y de la mujer de Potifar (Figura 5) Esta mujer lo había tomado por su ropa, pero él salió corriendo, huyendo de su presencia. Aunque fue acusado y enviado a prisión, las Escrituras revelan que prosperaba en todo lo que hacía porque hacía la voluntad del Señor. Si vemos la tentación y no oramos, podemos quemarnos con esa tentación (Génesis 39)

Figura 5. José y la mujer de Potifar (YouTube)

Por eso no debemos acercarnos a esos lugares que solíamos visitar cuando no éramos salvos porque seremos tentados. Debemos decidir porque si no somos santificados, tarde o temprano, nuestra naturaleza carnal nos llevará a pecar nuevamente (Romanos 6:22)

El poder del Espíritu Santo se aplicará a nuestra naturaleza y quemará todo deseo carnal de volver al pecado. Sabemos quiénes somos y de qué debemos huir, pero lo mejor sería ser santificados para recibir poder de lo alto. La Palabra dice que solo las ovejas pueden ser pastoreadas, mientras que las cabras no pueden.

El Espíritu Santo también está representado en la Palabra por fuego. Cuando Jesús fue bautizado por Juan el Bautista, aún con un corazón puro, una paloma descendió sobre Él mostrando la pureza y dulzura de Su naturaleza (Lucas 3:22) Pero en el día de Pentecostés, el mismo Espíritu se manifestó a través de lenguas de fuego, representando ese poder purificador que quemó la naturaleza sensual de sus corazones. La Palabra dice que estas lenguas de fuego se asentaron sobre sus cabezas (Hechos 2:1-3)

Figura 6. La venida del Espíritu Santo en Pentecostés (Arquidiócesis de Sevilla)

Babilonia ha malinterpretado esto, asegurando que eran lenguas o lenguajes angelicales.

“Que el mismo Dios de paz os santifique por completo, y que todo vuestro espíritu, alma y cuerpo sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo” (1 Tesalonicenses 5:23)

Esto es lo que hace el Espíritu Santo. Limpiará nuestra alma y la disposición natural al pecado.

“Yo a la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento, pero el que viene detrás de mí es más poderoso que yo, cuyo calzado yo no soy digno de llevar. Él os bautizará en Espíritu Santo y fuego” (Mateo 3:11)

La palabra santificado significa estar limpio y apartado para un uso santo. La Palabra nos habla de los vasos en el templo que fueron consagrados (Esdras 5:14-15). Nadie podía tocarlos a menos que los levitas los tomaran durante las ceremonias. No podrán ser utilizados para otra cosa que no sean tales fines. Hemos sido limpiados y apartados para un uso santo cuando somos santificados. Nos hemos vaciado ya que el Señor no puede llenar algo que no ha sido limpiado. Nos acercamos voluntariamente al Señor, confesando que somos carnales y que necesitamos Su poder para servirle. Nuestra mente, alma y cuerpo están abrumados por una gran alegría. Difícilmente alguien que ha sido santificado puede darle la espalda al Señor. Una vez que recibimos la santificación, vivimos consagrados a su entera voluntad (Romanos 12:1)

“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional” (Romanos 12:1)

Después de que el Señor haya aceptado nuestra ofrenda, debemos morir a nosotros mismos. Debemos acudir a Él limpios después de orar y ayunar, pidiéndole al Señor que quite todo lo que le desagrada. Las personas no salvas dan sus vidas, deseos y planes al mundo, pero los hijos de Dios viven para Él y buscan trabajar para Su gloria. Debemos estar seguros de darle todo a Él, y convertirnos en vasos puros, para ser usados solo por el Señor. De lo contrario, solo somos religiosos.

Sabemos que somos aceptables y limpios ante el Señor cuando hemos hecho Su voluntad en todo lo que sabemos. Debemos preguntarnos: ¿Estaría dispuesto a hacer lo que Dios me pidiera? Abraham aceptó la prueba de fe al aceptar sacrificar a su único hijo. La Palabra en Hebreos 11 nos dice que cuando se dirigía al lugar del sacrificio, creyó que el Señor podría cumplir la promesa que le había hecho de darle descendencia.

Debemos rendirnos completamente a Dios (Figura 7). Así superaron los mártires las pruebas y tribulaciones; también surgieron los grandes avivamientos. Recibimos con santificación la valentía de testificar de esta experiencia. La Palabra dice que la limpieza haría aún más visible el fruto del Espíritu y que no hay ley contra ese fruto (Gálatas 5:23) Recordamos, además que cuando el apóstol Pablo llegó a Jerusalén ante la Iglesia defendió fuertemente lo que Dios había preparado además de la bendición del Espíritu sobre los judíos también sobre los gentiles (Hechos 15:6-9)

Figura 7. Rendidos a Dios (Stanley Jones)

Todo lo que hagamos, cualquier celebración o reunión, incluso con la familia no salva, dará testimonio de nuestro temor a Dios y nuestra determinación de servirle. Si queremos ser populares con el mundo, nunca podremos ser santificados. No podemos limitar al Señor. Y eso fue lo que hizo Abraham (Génesis 16:1-5, 17:17) La misma Palabra dice que no podemos servir a dos señores, ni andar en dos caminos, ni comer en dos mesas (Mateo 6:24)

La auténtica experiencia cristiana nos llenará de alegría. La vida de los salvados nunca será aburrida; al contrario, es intensa y profunda, instaurando la comunión con el Señor. Cada vez que vamos a tomar una decisión importante en nuestra vida, debemos contar con la aprobación de Dios. Al entregarle nuestros sueños y planes, estamos dispuestos a permitir que se nos use de cualquier manera. Dios bendecirá nuestro deseo de servirle.

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[1] The Gospel Trumpet (La Trompeta del Evangelio) comenzó como el Heraldo de la Libertad del Evangelio en enero de 1878 en Wolcottville, Indiana. La publicación mensual duró tres años y se mudó a la ciudad de Rome antes de que terminara en noviembre de 1880. El Herald estaba asociado con el Cuerpo de Ancianos de la Iglesia de Dios del Norte de Indiana y fue editado por I. W. Lowman y J.

[2] Es un tipo de evangelio que tiende a tornar todo a su alrededor un poco volátil, etéreo, liviano, banal, permisivo. Una especie de evangelio “descafeinado”. Un evangelio que no es sal ni fermento en la sociedad, ni está comprometido fielmente con Jesucristo.

[3] Palabra, pensamiento, razón, ley.) Término que inicialmente designaba la ley universal, la base del mundo, su orden y armonía. Atribuido convincentemente a Cristo.

[4] Ciencia que trata de Dios y del conocimiento que el ser humano tiene sobre él.

[5] Doctrina referente a la salvación del hombre.

[6] צִיּוֹן Sion. Este nombre significa “hito”, “señal”, un lugar encumbrado y visible. En la Biblia, Sion es tanto la ciudad de David como la ciudad de Dios (Ver Anexo 1)

7 Modelo ideal que reúne los caracteres esenciales de todos los seres de igual naturaleza. Modelo que reúne los caracteres esenciales de un conjunto y que sirve como pauta para imitarlo, reproducirlo o copiarlo.

[8] Tallo que brota de un árbol o de una planta después de podados o cortados.

[9] En la mitología griega, es el tiempo habitual, lineal. Es el tiempo que pasa y se va consumiendo (segundos, minutos, horas, días, etc.)

[10] En la mitología griega, Kairos (en griego antiguo καιρός) representa un lapso de tiempo diferente al tiempo habitual, Cronos. Es el momento en el que algo importante sucede, el tiempo de Dios.

[11] Doctrina contemporánea que concibe el Reino o gobierno futuro de Jesucristo por un período de mil años reinando en la tierra sobre el trono de David, en Jerusalén.

[12] Forma organizativa que las iglesias libres han aceptado y asumido como su manera de ser protestantes. Representan la acomodación de la religión al criterio particular de cada fundador.

Son emblemas, por lo tanto, de la victoria del mundo sobre la iglesia, de la secularización del cristianismo, de la sanción del divisionismo que el Evangelio puro de la Iglesia de Dios condena.

[13] Valoración excesiva de la propia personalidad que lleva a una persona a creerse el centro de todas las preocupaciones y atenciones.

[14] William Hendriksen (18 de noviembre de 1900 – 12 de enero de 1982) fue un teólogo y comentarista bíblico holandés, especialista en el Nuevo Testamento.

[15] Movimiento político-nacionalista. Fueron la facción más violenta del judaísmo de su época, cuando se enfrentaron frecuentemente a otras facciones como los fariseos o saduceos. 

[16] Director de VISALIA MINISTRIES. Doctor en Teología- Especialista Consejería Familiar. Profesor Música (coro, violín, cello, guitarra y piano).

[17] Cristo ​ es una traducción del término hebreo «Mesías», que significa «ungido», ​ y que se emplea como título o epíteto de Jesús de Nazaret en el Nuevo Testamento.​ En el cristianismo, Cristo se utiliza como sinónimo de Jesús.

[18] Narración breve y simbólica de la que se extrae una enseñanza moral.

[19] Persona encargada en las casas principales de custodiar niños o jóvenes y de cuidar de su crianza y educación.

[20] El paganismo (del latín paganus, que significa “campesino”, “rústico”) es un término general, generalmente utilizado para referirse a las tradiciones religiosas politeístas. Se utiliza principalmente en un contexto histórico, refiriéndose a la mitología grecorromana, así como a las tradiciones politeístas de Europa y el norte de África antes de la cristianización.

[21] Una de las instalaciones más importantes de las ciudades romanas. Junto con el teatro y el anfiteatro, forma la trilogía de grandes instalaciones destinadas a divertir al pueblo. Allí muchos cristianos vieron la muerte enfrentados a fieras de la tierra debido a su fe.

[22] Flavio Valerio Constantino fue emperador romano desde su proclamación por sus tropas el 25 de julio de 306, y gobernó un Imperio romano en constante crecimiento hasta su muerte. Fue el primer emperador romano en detener la persecución de los cristianos y dar libertad de culto al cristianismo, junto con todas las demás religiones en el Imperio. 

[23] Agustín de Hipona o Aurelio Agustín de Hipona, ​ conocido también como san Agustín, ​ fue un escritor, teólogo y filósofo cristiano. Después de su conversión, fue obispo de Hipona, al norte de África y dirigió una serie de luchas contra las herejías de los maniqueos, los donatistas y el pelagianismo.

[24] Teólogo y filósofo francés, considerado como uno de los autores y gestores de la Reforma protestante. Las doctrinas fundamentales de posteriores reformadores se identificarían con él, llamando a estas doctrinas «calvinismo».

[25] Teólogo, filósofo y fraile católico agustino que comenzó e impulsó la Reforma protestante en Alemania y cuyas enseñanzas inspiraron la doctrina teológica y cultural denominada luteranismo.​ 

[26] Tomado textualmente de: Profetas de pacotilla y señales de los tiempos, de Pedro Álamo.

[27] Entre 1618 y 1648, tuvo lugar un conflicto en Europa que marcó la transición del feudalismo a la Edad Moderna. La guerra de 30 años involucró a varios países, en toda la región donde se encuentra Alemania hoy en día, y tuvo como catalizador las disputas religiosas derivadas de las reformas protestantes del siglo XVI

[28] Movimiento de avivamiento espiritual entre los luteranos promovido por Philipp Jakob Spener (1635-1705) durante el siglo XVII y que se desarrolló notablemente en el siglo XVIII con personajes como August Hermann Francke y Nikolaus Ludwig, conde de Zinzendorf. Fue una doctrina religiosa protestante que tuvo su origen en las ideas de Spener; se caracterizó por oponer a la frialdad derivada de la idea de la justificación por la fe, una religión del corazón, un sentimiento más sincero y emocional.

[29] Persona, especialmente un hombre, que siente atracción sexual y afectiva hacia otra de su mismo sexo.

[30] Ácido desoxirribonucleico, es un ácido nucleico que contiene las instrucciones genéticas usadas en el desarrollo y funcionamiento de todos los organismos vivos y es responsable de la transmisión hereditaria.

[31] Conjunto de cambios en caracteres fenotípicos y genéticos de poblaciones biológicas a través de generaciones, el cual ha originado la diversidad de formas de vida a partir de un antepasado común.

[32] Teoría científica que explica el origen del universo hace 13 800 millones de años. No se refiere a una explosión en el espacio ya existente, sino que designa la creación conjunta de materia, espacio y tiempo, a partir de un universo en un estado de alta densidad y temperatura que luego se expandió.

[33] Teorías que estudian el origen y evolución del universo.

[34] Naturalista británico que postuló la Evolución biológica de las especies (1809-1882)

[35] La continua aceleración de los cambios de la humanidad y del planeta unida hoy a la intensificación de los ritmos de la vida y del trabajo.

[36] Hallĕlū yăh ‘alabad a Dios’. Es una invitación a la alabanza, pues significa literalmente «Alaba (Hallal) al Señor» (Yahveh). Aparece en 25 ocasiones en el Antiguo Testamento (principalmente en los Salmos), y cuatro veces en el Nuevo Testamento. Es una expresión del Cristianismo usadas para expresar júbilo y alabanza a Dios. Se puede usar indistintamente como sinónimo en los contextos de salutación o admiración.

[37] Expresión desiderativa hebrea que se pronuncia al finalizar las oraciones cristianas. Con ella se indica asentimiento, conformidad y obediencia a lo que Dios hace o dice.

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